“Andalucía jamás espiritualmente fue un pueblo servil. Fue creado por la Naturaleza pueblo de espíritu, señor. Y hoy, esclavizada, no sirve, manda. El amo que le puso Europa, España, ¿no es hoy andaluz ante la misma Europa, y ante el mundo entero?”

Blas Infante


“Andalucía necesita de sus clases trabajadoras e industriales, sobre todo de sus artistas, intelectuales, de todos los hombres honrados que son únicamente los que trabajan.”  

Blas Infante


“Andalucía no ríe, llora.”

Blas Infante


“Cuando todos los andaluces conozcan su verdadera historia y esencia, será cuando logremos llegar a obtener el poder necesario para exigir el respeto a nuestra personalidad, tan diferente de aquella que tratan de imponernos.”


Blas Infante





"El premio que más me estimularía: el poder vivir en andaluz, percibir en andaluz, ser en andaluz o escribir en Andaluz."

Blas Infante



“Hay que aprovechar esos períodos libres para reencontrar el río de la genialidad, fuerzas sociales culturales, para hacer del hombre andaluz, hombre de luz, como lo fue antaño, cuando fue capaz de crear un foco cultural como Tartesios e inundó el mundo occidental con la sabiduría de Al Andalus”

Blas Infante



"He aquí la razón de la inmortalidad de nuestra raza. No sólo damos al mundo Quijotes locos. También podemos ofrendar al Ideal Quijotes cuerdos. España es la patria de Alonso Quijano; pero también lo es de los Rodrigo Díaz. La civilización, el concierto de las naciones tiene necesidad de un pueblo que encarne el espíritu de un Cid, nivelado un grado menos de aquel que alcanza la locura sublime, a veces trágica, cómica a veces, pero siempre excelsa del Ideal. Falta un espíritu de abnegación y justicia que combata por Amor, y que, lejos de absorber en ajenos jugos la constancia y los alientos precisos para sus grandes empresas, prodigue en estas, sin cesar, las energías inagotables del Tesoro de su fe. Por esto es preciso que España no muera: por esto es necesario que el Cid vuelva a cabalgar: pero no para ganar batallas campales, sino para vencer en la Gran Batalla de lo porvenir, donde todas las naciones contienden. En la Gran Batalla por el Progreso.
El ideal de España está, pues, en arribar al pugilato manteniendo entre las naciones, con fuerzas bastantes para sellar con su triunfo la realización del Ideal Humano. En esta fórmula, se comprenden un Ideal próximo y otro remoto, medio y fin que habrá de practicar o perecer.
Hay que igualarse en la fuerza a las naciones que contienden; y téngase presente que la fuerza, cuando se habla del Ideal, es la fuerza de la cultural Moral y Física, es la fuerza de la Civilización; no la fuerza bruta subordinada a aquella fuerza, y de la cual, ésta, debe valerse como instrumento, para barrenar obstáculos históricos, que, sólo por este medio, son conmovibles. Únicamente en este sentido puede admitirse que es preciso europeizar a España: en que hay que elevar su nivel de cultura, su nivel de civilización, a la altura de las primeras naciones del mundo. Pero sólo en la intensidad, no en la cualidad. Esta ha de ser obra exclusiva de nuestra raza; como lo será también el alzarse sobre ese nivel y rebasarle, para conseguir el triunfo sobre todas las demás naciones. El proceso denominado de europeización ha de circunscribirse a dotar a España de la civilización de Europa (o por mejor decir, de los pueblos más civilizados del mundo, pues ya la hegemonía escapa de manos de Europa), pero sólo en lo que aquella civilización tiene de Universal; es decir, en cuanto suponga elementos de fuerza indispensables para la realización del Ideal Humano. El genio que ha de desarrollar e impulsar esa fuerza, cualificándola en los matices de creaciones originales, ese lo tenemos nosotros. Importarlo de fuera, equivaldría a la anulación, a la muerte por indignidad; a negar la misión histórica, substantiva e independiente de nuestra raza; o, lo que es lo mismo, a desconocer los fueros de su personalidad creadora. El genio español es el sagrado depósito que nos ha sido confiado por la Naturaleza y la Historia como acicate de nuestra vida, vinculada en la santa aspiración de desplegar su gloria en la hora suprema del triunfo definitivo; y este triunfo no será nuestro si en vez de ostentar en la lucha el carácter de factores activos y originales, renunciamos a nuestra propia personalidad y nos convertimos en instrumentos de las inspiraciones de un alma extranjera."

Blas Infante
Ideal andaluz


“La naturaleza señala a los soldados de la vida el lugar en donde han de luchar por ella.”

Blas Infante


“La vida no es más que el ideal realizado y el pensamiento de este ideal realizándose.”

Blas Infante



    "Mi nacionalismo, antes que andaluz, es humano. Creo que, por el nacimiento, la naturaleza señala a los soldados de la Vida el lugar en donde han de luchar por ella. Yo quiero trabajar por la Causa del espíritu en Andalucía porque en ella nací. Si en otra parte me encontrare, me esforzaría por esta Causa con igual fervor."

Blas Infante


“Nosotros no podemos, no queremos, no llegaremos jamás a ser europeos. Pero jamás hemos dejado de ser lo que somos de verdad: esto es, andaluces, euro-africanos, euro-orientales, hombres universalistas, síntesis armónicas de hombres.”

Blas Infante


“Un pueblo que improvisa, es la estatua que más se tarda en modelar, la que más constancia y derroches de inspiración requiere.”

Blas Infante


“Un pueblo abyecto y cobarde es un mero compuesto de individuos indignos y cobardes, también nosotros, por esto, estamos fundidos con aquella expresión de la Asamblea regionalista de Ronda que proclamó a Andalucía como una realidad nacional, como una Patria (patria es un grupo humano que siente las mismas necesidades y ha de trabajar por satisfacerlas en común), como una patria viva en nuestras conciencias.”

Blas Infante



“Yo tengo clavada en mi conciencia, desde mi infancia, la visión sombría del jornalero. Yo le he visto pasear su hambre por las calles del pueblo, confundiendo su agonía con la agonía triste de las tardes invernales...”

Blas Infante