“Aquí la fatal pregunta, ¿qué es la vida?”

Armando Buscarini seudónimo de Antonio Armando García Barrios



“Deseo que se me haga un entierro solemne y que todos los escritores y artistas me guarden luto durante cinco años.”

Armando Buscarini


El poeta

Sentado junto a una mesa
carcomida por el tiempo
y alumbrado débilmente
por la luz de un quinqué viejo,
un joven pálido escribe
en cuartillas, varios versos.
Es un poeta, las noches
pásaselas escribiendo...
Anhela la gloria, joya
más valiosa que el dinero.
Y continua impasible,
sin descansar un momento,
hasta ver recompensados
algún día sus desvelos.

Armando Buscarini



“Es verdad que yo sufro, pero oídme ¿qué me importa sufrir si soy poeta?”

Armando Buscarini



“Lector: Si me compras este libro quizá pueda ofrecerte aquel libro en el que tus hijos aprendan a tenerte respeto.”

Armando Buscarini



“Mi corazón me dice que le dé el libro de balde, mi cerebro que lo pague?”


Armando Buscarini


Orgullo

Aunque sufra del mundo los desdenes
de mi vida de artista en la carrera;
aunque pasen altivos a mi paso
los hombres de alma ruin que nunca sueñan;
aunque salgan aullando a mi camino
los famélicos lobos que me acechan
con la envidia voraz; aunque en mi lucha
hambre y frío sin límites padezca;
aunque el mundo me insulte y me desprecie
y por loco quizás también me crean;
aunque rujan tras mí ensordecedoras
tempestades de envidia; aunque me vea
harapiento y descalzo por las calles,
inspirando piedad e indiferencia;
y, en fin, aunque implacables me atormenten
las más grandes torturas, aunque vea
que a mi paso se apartan las mujeres
por ver con repugnancia mi pobreza
( pero quizás ignorando de mi alma
el tesoro de ensueño que se alberga),
nada me importará, porque yo siempre,
caminando sereno por la tierra,
con el alma latiendo por la gloria
y flotante a los vientos mi melena,
iré diciendo al mundo con voz fuerte,
¡ con voz en la que vibre mi alma entera!:
-Es verdad que yo sufro; pero oídme:
¿ qué me importa sufrir si soy poeta?

Armando Buscarini


POEMA 'X' 

―Yo sueño mucho, soy poeta.
Tengo en mi frente algo inmortal.
Mi alma es tan pura cual la violeta
¿quieres amarme? ―Nunca jamás.
―Yo soy un hombre sin ideales.
Ni me hace falta soñar.
Mas el dinero tengo a raudales
¿quieres amarme? ―¿Oh, sí, ven ya!
* * *
POEMA ‘NOCHEBUENA’ (de ‘Yo y mis versos’)
¡Oh, melancólica noche de recuerdos, de añoranzas,
que llegas envuelta en una
fría claridad de luna,
que trunca las esperanzas
del bohemio en el arroyo sin amor y sin fortuna!
¡Oh, melancólica noche que llegas siempre cubierta
con el manto de la nieve que es tan bella y tan cruel!
Así tan blanca pareces una novia blanca y muerta
de amores por su doncel.
Por eso dicen: «Ya viene,
ya viene la Nochebuena».
¡Y no comprenden la pena
que la Nochebuena tiene!
¡Un santo inefable de amor
en esa noche se siente del alma en lo más profundo
porque parece de nuevo que ha nacido el Redentor
del Mundo!
¡Noche poblada de sones
de vibrantes instrumentos y de roncas panderetas;
noche de dulces canciones
y noche de inmensa angustia para los poetas!
Noche de nieve, de viento,
noche de santas plegarias…
¡Feliz para los felices! ¡Fatal para el harapiento
montón de seres que duermen en las calles solitarias! 
Noche de ruidos dispersos,
noche en fin de milagrosa, de quimérica ilusión,
¡en esa noche tan triste los poetas no hacen versos
porque los tienen metidos en el corazón!



“Yo soy más feliz que usted porque, además de ver lo que usted ve, yo veo lo que sus ojos ciegos de persona normal no pueden percibir.”

Armando Buscarini


Yo soy un triste joven...

Yo soy un triste joven de ardiente sed carnal,
porque, como a Verlaine, me devora ese mal,
y busco en los burdeles, sediento de lujuria,
las mujeres que calmen mi afrodisíaca furia:
esas mujeres, propias mártires de sus vidas,
que tienen cadavéricos semblantes de suicidas.
Y encuentro en las caricias de esas pobres rameras
como un florecimiento de muertas primaveras…
Yo soy un triste poeta taciturno
a quien embruja el rayo siniestro de Saturno,
y en mis íntimas horas de dolor y de anemia
voy trazando mis versos que son rezo y blasfemia.
Mis poemas son tristes porque triste es mi vida,
los poemas sin nombre de mi alma dolorida
por todos los dolores de mi negra orfandad,
en esta vida inquieta de amarga soledad.

Armando Buscarini












No hay comentarios: