... El ser humano puede ser visto como un microcosmos hecho esencialmente de los mismos elementos que la superficie de la Tierra, y En proporciones similares.

Dr. Arnold L. Lieber


Las cualificaciones científicas no son una licencia para la presunción, ni legitiman los prejuicios.

Dr. Arnold L. Lieber


Somos parte integrante de un Universo en constante cambio, y para sobrevivir tenemos que acomodarnos a sus fluctuaciones.

Dr. Arnold L. Lieber


¿Por qué continúan los prejuicios? La ciencia se ha opuesto siempre a la crédula aceptación de la superstición; sin embargo, esa actitud se ha extendido y ha llevado a algunos a negarse a examinar cualquier creencia "no científica". Tras ese rechazo puede haber un miedo inconsciente al poder de la superstición sobre la mente. Pero los científicos deberían ser capaces ya de ver las diferencias entre la aceptación crédula y la investigación de una creencia.

Dr. Arnold L. Lieber
El Influjo de la Luna


Los individuos con personalidades inestables o desórdenes del estado de ánimo, o los que se encuentran ya bajo una considerable tensión física y emocional, pueden experimentar contratiempos importantes durante los períodos de tensión cósmica excesiva. Si son proclives a la violencia, probablemente se desencadene en ellos una conducta incontrolable.

Dr. Arnold L. Lieber
pág 149 El Influjo de la Luna


¿Hasta qué punto nuestro destino es gobernado por las fuerzas cósmicas, así como por otros factores determinantes de nuestras vidas? Dentro de ciertas limitaciones somos libres para dirigir nuestras vides; pero ello no puede realizarse fácilmente. El hombre se cree diferente de los animales inferiores porque se considera capaz de autodeterminación.
Pero de hecho son poco frecuentes las personas capaces de determinar su propia dirección en la vida. La autodeterminación requiere enormes cantidades de energía, impulso y motivación. Sólo quien es capaz de reconocer, movilizar e integrar los impulsos básicos es también capaz de obtener una relativa libertad de voluntad. (...) Las personas capaces de reconocer y aceptar las limitaciones de la libertad pueden trabajar teniéndolas en cuenta, poniendo en marcha, de ese modo, lo mejor del potencial humano./En otras palabras, sólo seremos libres en tanto en cuanto podamos reconocer y aceptar las limitaciones de nuestra libertad. Es el dilema de la libre voluntad tratando de actuar en armonía con el Universo. ¿Cómo es posible aceptar unos limites para, por otros medios, trascenderlos? Sólo con la pura razón no podemos esperar navegar por la vida fácilmente. Para tener juicios sensatos debemos confiar a menudo en los sentimientos e intuiciones. Y sin embargo, paradójicamente, cuanto más conozcamos nuestros límites más libres seremos, pues será menos probable que perdamos el tiempo en callejones sin salida.

Dr. Arnold L. Lieber
pág 166 El Influjo De La Luna