“A lo largo de estos últimos años he aprendido que el problema del conocimiento del ser humano no es rebatir y destruir las opiniones contrarias, sino incluirlas en una estructura teórica más amplia.”

Ernest Becker

La negación de la muerte, prólogo, pág. 19-20



“Creer es ocultar la masa de tejido interno cicatrizado que palpita en nuestros sueños.”

Ernest Becker

La negación de la muerte, pág. 66




“El desmayo representa la negación más rotunda, el rechazo o incapacidad para seguir consciente ante una amenaza.”

Ernest Becker

La negación de la muerte, pág. 168



"El hombre comete una agresión no sólo por frustración y miedo sino también por gozo, plenitud, amor a la vida. Los hombres matan profusamente por el gozo sublime del heroico triunfo sobre el mal... Normalmente la mayoría de los hombres no matarán a no ser bajo el estandarte de algún tipo de lucha contra el mal... Creo que es hora de que los científicos sociales sepan tanto de psicología como Hitler, y que se den cuenta de que los hombres harán cualquier cosa para pertenecer a una causa heroica victoriosa si se consigue persuadirles sobre la legitimidad de la causa."

Ernest Becker
Escape from evil



"El hombre es un animal que tiene que hacer algo con su ser efímero. Quiere superar y poder decir: "¿ves?, he hecho una contribución a la vida, he ganado a la muerte, he purificado el mundo". Pero esto crea una ilusión. La dinámica de la maldad es el intento de hacer del mundo algo que no es, convertirlo en lo que no puede ser, un lugar libre de accidentes, un lugar libre de impurezas, un lugar libre de la muerte."

Ernest Becker




“El ser humano ha de buscar el apoyo en un sueño, en una metafísica de esperanza que le sostenga y haga que su vida valga la pena.”

Ernest Becker

La negación de la muerte, pág. 392



“La fascinación es un reflejo de la fatalidad de la condición humana.”

Ernest Becker

La negación de la muerte, pág. 217



“La psicoterapia puede hacer que las personas se reafirmen, que rompan los ídolos que restringen su autoestima, que se liberen de la carga de la culpa neurótica; la culpa extra apilada sobre la culpa existencial natural. Puede disipar la desesperación neurótica, la desesperación que procede de centrarse en exceso en la propia seguridad y satisfacción. Cuando una persona se vuelve menos fragmentada, menos bloqueada y encerrada, experimenta verdadera dicha: el gozo de descubrir más de sí misma, de liberarse de la coraza y de los reflejos que la atan, de arrojar las cadenas de la dependencia indiscriminada y autoengañosa, de controlar sus propias energías, de descubrir aspectos del mundo, de la experiencia intensa en el momento presente que ahora está más libre de percepciones prefijadas, de nuevas posibilidades de elección y de acción, y así sucesivamente. Sí, la psicoterapia puede hacer todas estas cosas, pero hay muchas otras que no puede hacer...”

Ernest Becker

La negación de la muerte, pág. 385-386



"Lo que hace más fácil la muerte es poder transcender al mundo, a algún tipo de dimensión religiosa. Yo diría que lo más importante es saber que más allá de lo absurdo de la vida de uno, más allá del punto de vista humano, más allá de lo que nos está ocurriendo a nosotros, está el hecho de las tremendas energías creativas del cosmos que nos utiliza para algún propósito que desconocernos. Ser utilizado para algún propósito divino, aunque seamos mal utilizados, es lo que nos consuela... Creo que a las personas no religiosas les es difícil morir."

Ernest Becker
Enfermo terminal, justo antes de morir




“Ninguna vida orgánica puede autoexpandirse sin más en todas direcciones; todos debemos recluirnos en nosotros mismos en algún área, pagar algún precio severo por nuestros miedos y limitaciones naturales. Sería correcto decir, al igual que Adler, que la enfermedad mental se debe a “problemas en el vivir”, pero hemos de recordar que la propia vida es un problema insuperable.

Ernest Becker

La negación de la muerte, pág. 385




“No queremos admitir que somos poco honrados con la realidad, que la verdad es que no controlamos nuestras propias vidas. No queremos admitir que la verdad es que no estamos solos, que siempre confiamos en algo que nos transciende, algún sistema de ideas y poderes en que nos hallamos incrustados y nos sirve de apoyo. Este poder no siempre es evidente. No hace falta que sea un dios o una persona indiscutiblemente más fuerte: puede ser el poder de una actividad que nos absorba por completo, una pasión, la dedicación a un juego, una forma de vivir que, como una confortable tela de araña, nos mantiene con ánimos, alejados de nosotros mismos, del hecho de que no descansamos en nuestro propio centro. Todos tendemos a recibir apoyo de una forma que consigue que nos olvidemos de nosotros mismos, sin conocer cuáles son las energías que realmente utilizamos, la clase de mentira que hemos inventado para vivir seguros y serenos.

Ernest Becker

La negación de la muerte, pág. 99


  


“Si hubiéramos de ofrecer la más sucinta explicación de todo el mal que los hombres han atraído sobre sí mismos y sobre su mundo desde el comienzo del tiempo, sería simplemente: el tributo que paga a su ilusión de cordura cuando se empeña en negar su verdadera condición.”

Ernest Becker


“Sólo los ángeles conocen la dicha incondicional o son capaces de soportarla.”

Ernest Becker

La negación de la muerte, pág. 386