"¿Quién me arrojó a Tibil (el mundo terrenal)?
A Tibil, ¿quién me arrojó?
¿Quién selló los muros
a que este mundo se asemeja
y me lanzó a su interior?
¿Quién me inmovilizó con esta cadena
tan intolerable de llevar?
¿Quién me atavió con este manto
tan variado de forma y color?
¿Quién me confinó en la morada de la oscuridad?
¿Por qué me habéis arrebatado de mi hogar y traído a esta prisión,
y encarcelado en este horrible cuerpo?
¿Dónde están las fronteras de este mundo de oscuridad?
¡El camino que hay que recorrer es largo e inacabable!"

Himno gnóstico