“Cabe preguntarse si no existe en el hombre una oscura y ciega voluntad de hacer la guerra.”

Karl Theodor Jaspers


“Como la filosofía es indispensable al hombre, está en todo tiempo ahí, públicamente, en los refranes tradicionales, en los apotegmas filosóficos corrientes, en las convicciones dominantes […] No hay manera de escapar a la filosofía. La cuestión es solo si será consciente o no, si será buena o mala, confusa o clara. Quien rechaza la filosofía, profesa también una filosofía, pero sin ser consciente de ella.”


Karl Theodor Jaspers



“Cuando se utiliza el idioma sin verdadera importancia, pierde su finalidad como medio de comunicación y se convierte en un fin en sí mismo.”

Karl Theodor Jaspers


"El hombre sólo llega a su propio ser por conducto del 'otro', jamás por el solo saber. Llegamos a ser nosotros mismos sólo en la medida en que 'el otro' llega a ser él mismo, a ser libres sólo en la medida en que 'el otro' llega a serlo. De ahí que desde mis años de colegial la cuestión de la intercomunicación humana fuera para mí el problema central, por lo pronto práctico, luego filosófico, de nuestra vida. Todos los pensamientos podían, en definitiva, juzgarse según el supremo criterio de si promovían o trababan la intercomunicación humana y la verdad misma podía ser apreciada en función de lo que unía a los hombres y del grado en que ella posibilitaba auténticamente esta unión."

Karl Jaspers
Autobiografía



"En ese espejo que es la Historia, vemos más allá del estrecho presente y discernimos la medida de las cosas. Sin ella perdemos el hálito de nuestro espíritu. Si nos velamos nuestra historia, nos sorprenderá sin que nos demos cuenta..."


Karl Jasper
Tomado del libro de Pierre Carnac, La historia comienza en Bimini, prólogo




"En filosofía son más esenciales las preguntas que las respuestas."

Karl Theodor Jaspers


"En ningún lugar del mundo puede encontrarse a Dios. El elude la presencia y la percepción encarnadas. Su realidad no es en el espacio ni en el tiempo. Su existencia no puede ser demostrada. Su realidad, si es, tiene que ser de un carácter radicalmente diferente a la realidad del mundo. Ninguna ciencia, en el sentido de una cognición universalmente válida de Dios, se desarrolla a partir de pensar en Dios, ninguna cognición que pueda investigar el objeto «Dios». Porque no existe Dios para el conocimiento."

Karl Theodor Jaspers


"Es sorprendente cómo se puede llegar a formular acusaciones. Franz Werfel, que inmediatamente después de la derrota de la Alemania hitleriana escribió un ensayo despiadadamente acusatorio contra todo el pueblo, llegó a decir que sólo Niemóller había opuesto resistencia; y en el mismo ensayo se refiere a los cientos de miles que fueron asesinados en los campos de concentración. ¿Por qué? Pues porque habían opuesto resistencia, aun cuando fuera principalmente sólo de palabra. Se trata de los mártires anónimos, con cuya desaparición carente de repercusiones, se toma aún más claro que se trataba de una tarea imposible. No obstante, hasta 1939 los campos de concentración constituían un asunto puramente interno, e incluso después se llenaron en gran parte con alemanes. En el año 1944, las detenciones políticas sobrepasaron el número de 4.000 al mes. La existencia hasta el final de campos de concentración prueba que había oposición en el país.
En las acusaciones nos parece oír a veces el tono de un fariseísmo por parte de aquéllos que, habiendo huido del peligro y libres ya de la coacción del terror, aun cuando con el sufrimiento propio de los exiliados —que no se puede comparar con el sufrimiento y muerte en los campos de concentración y con el miedo reinante en el interior de
Alemania—, vivían en el extranjero y que, al final, consideran su exilio como un mérito. Frente a ese tono nos sentimos capacitados para defendemos sin ira.
De hecho hay voces de hombres justos capaces de penetrar precisamente en el sentido del aparato de terror y de sus consecuencias. Así Dwight MacDonald en la revista Política de marzo de 1945: se llega a la cumbre del terror y de la culpa forzada bajo el terror con la alternativa: matar o ser muerto. Algunos de los comandantes, designados para fusilar y asesinar —dice él— se negaron a tomar parte en la atrocidad y fueron fusilados por ello."

Karl Jaspers
El problema de la culpa



“Es la búsqueda de la verdad, no la posesión de la verdad lo que da valor a la filosofía.”


Karl Theodor Jaspers



"Filosofar es y sólo es aprender a morir."

Karl Theodor Jaspers



"La guerra es, cada vez en mayor proporción, no una lucha sino un exterminio de la técnica."

Karl Theodor Jaspers



"La interpretación encuentra su límite donde termina el lenguaje. Se consuma en silencio. Y, sin embargo, este límite existe sólo a causa del lenguaje."

Karl Theodor Jaspers



“La razón es como un secreto a voces que puede llegar a ser conocido por cualquier persona en cualquier momento.”

Karl Theodor Jaspers



“La verdad es aquello que nos une.”

Karl Theodor Jaspers
Tomada del libro Hombres en tiempos de oscuridad de Hannah Arendt




"Las preguntas, en filosofía, son más esenciales que las mismas respuestas."

Karl Theodor Jaspers




“Los problemas y conflictos pueden ser la fuente de una derrota, una limitación para nuestra potencialidad, pero también pueden dar lugar a una mayor comprensión de la vida y el nacimiento de una unidad más fuerte en el tiempo.”

Karl Theodor Jaspers


"Ningún pensamiento puede acercar al hombre a la realidad que experimenta el creyente en la presencia personificada (Leibhaftigkeit) de Dios… La realidad está en el mundo del culto y en la Iglesia. La revelación y la palabra de Dios no pueden recibirse a solas. Adquieren realidad sólo a través de ¡a presencia de lo Santo en una institución."

Karl Theodor Jaspers


"No podemos rebasar la Historia, pero al atravesarla, por así decirlo, vemos cómo se va haciendo transparente, al recibir una luz, llegada de otra parte."

Karl Theodor Jaspers
Iniciación al método científico
Tomado del libro de Pierre Carnac, La historia comienza en Bimini, página 179



"Otra cosa nos es posible: en la conciencia de la fenomenalidad (Erscheinungshaftigkeit) de todo lo que conocemos, percatarnos de la presencia de lo Totalmente Otro, por medio de lo cual todo es y nosotros somos."

Karl Theodor Jaspers




"¡Qué fatalidad cuando el ser humano de buena fe renuncia a la violencia porque cree en la no-violencia! ¡Lo único que logra es ser superado en forma más radical por la violencia!"

Karl Theodor Jaspers



"Realidad fundamental de esa vida era la conversación socrática. Discutía Sócrates con artesanos, hombres de Estado, artistas, sofistas, hetairas. Como tantos atenienses, pasaba el día en la calle, en el gimnasio, en banquetes. Y su vida es una continua conversación con todo el mundo. Pero esta conversación posee un rasgo novedoso, totalmente desconocido para los atenienses: es conversación que sacude en lo más profundo el alma de sus interlocutores, desasosiega y avasalla. Desde siempre la conversación había sido la forma de vida del ateniense libre; ahora, como instrumento del filosofar socrático se transforma en algo diferente. Es, por naturaleza, necesaria para la verdad misma, que sólo en la comunicación de hombre a hombre se hace patente. Para estar en claro, él, Sócrates, tenía necesidad de los hombres; y estaba convencido de que ellos necesitaban, a su vez, de él. Sobre todo los jóvenes. Su propósito era educar. Para Sócrates la educación no es un quehacer incidental operado por el que sabe en aquel que no sabe, sino el ámbito donde los hombres a través del mutuo contacto llegan a sí mismos al revelárseles lo verdadero. Al pretender ayudar a los jóvenes, ellos, por su parte, lo ayudaban a él. Esto acontece del modo siguiente: descubriendo las dificultades de lo aparentemente evidente, desconcertando, forzando a pensar y enseñando a buscar, interrogando siempre y no eludiendo la respuesta, todo ello en función de la idea fundamental de que la verdad es aquello que une a los hombres. De esta realidad fundamental se desarrolló después de la muerte de Sócrates el diálogo en prosa como género literario, cuyo máximo exponente fue Platón. Sócrates no se vuelve, como más tarde Platón, contra el movimiento sofístico en su conjunto. No funda ningún partido, no hace propaganda ni formula alegatos justificativos, no crea ningún instituto educativo. No propone ningún programa de reforma del Estado, ni enseña ningún sistema del saber. No se dirige a ningún auditorio, ni al pueblo reunido en asamblea. Dice en la Apología: “Yo siempre me dirijo solamente al individuo”; y funda su actitud, en ese pasaje, irónicamente, argumentando que quien enfrenta abiertamente a la masa corre peligro de perder la vida, razón por la cual el que quiera defender lo justo pero vivir siquiera corto tiempo tiene que limitarse a tratar con individuos. Podemos tomar esto en un sentido más amplio: La no-verdad del estado de cosas existente, trátese de un régimen aristocrático, democrático o despótico, no puede ser eliminada por grandes acciones políticas. Cualquier mejoramiento presupone que el individuo se eduque, educándose a sí propio, que se despierte a su efectiva realidad la substancia aún oculta del hombre, y por ello por la vía del conocimiento que es, a la vez, obrar interior, por la vía del saber que es, al mismo tiempo, virtud. Llegar a ser un hombre virtuoso es llegar a ser un buen ciudadano. Por consiguiente todo depende del individuo en cuanto individuo, al margen del éxito y de la influencia que pudiera tener en el Estado. La independencia de quien es dueño de sí (eukrateia) , la libertad verdadera que nace de la comprensión intelectiva, es el suelo último donde el hombre se enfrenta con la divinidad."

Karl Jaspers
Los grandes filósofos


"Ser hombre es ser libre. El sentido de la historia es que nos convirtamos realmente en hombres."

Karl Theodor Jaspers


“Uno estaría tentado a hablar de una afinidad particular entre la histeria y el espíritu reinante antes del siglo XVIII, afinidad que existiría entre la esquizofrenia y el espíritu de nuestro tiempo.”

Karl Jaspers
Genio y locura



“Vivimos como si siguiéramos golpeando puertas que permanecen cerradas para nosotros.”

Karl Theodor Jaspers
Tomada del libro Hombres en tiempos de oscuridad de Hannah Arendt