"Cada parte de esta tierra es sagrada para mi gente. Cada colina, cada valle, cada llanura y cada huerto han sido bendecidos por algún suceso triste o feliz ocurrido en tiempos desaparecidos hace mucho. Hasta las piedras, que parecen sordas y muertas quemándose bajo el sol en la silenciosa playa, se estremecen con los recuerdos de sucesos conmovedores ligados a las vidas de mi gente. Y el polvo mismo que ahora pisas responde más amorosamente a nuestras pisadas que a las tuyas, porque está enriquecido con la sangre de nuestros ancestros, y nuestros pies desnudos están conscientes de su benévolo contacto."

Jefe Indio Seattle




"Conocemos la savia que circula dentro de los árboles como conocemos la sangre que corre por nuestras venas. Somos parte de la tierra y la tierra es parte nuestra. Las flores perfumadas son nuestras hermanas. El oso, el ciervo, la gran águila, son nuestros hermanos... La tierra no pertenece a los hombres, son los hombres quienes pertenecen a la tierra. Todas las cosas están conectadas como la sangre que nos une a todos. No fue el hombre quien tejió la tela de la vida, él es sólo una hebra de ella. Lo que le haga al tejido se lo estará haciendo a sí mismo."

Jefe Indio Seattle


"El ser humano no ha tejido la red de la vida, somos un hilo dentro de ella, cualquier cosa que hagamos a la red, nos lo hacemos a nosotros mismos, todo está enlazado, todo está conectado."

Jefe Indio Seattle


"No existe la muerte, sólo un cambio de mundo."



Jefe Indio Seattle


"¿Qué es el hombre sin las bestias? Porque si se fuera toda la bestia, el hombre moriría de una gran soledad del espíritu."


Jefe Indio Seattle


"Ustedes caminan hacia su destrucción rodeados de gloria, inspirados por la fuerza del Dios que les trajo a esta tierra y que, por algún designio especial, les dio dominio sobre ella y sobre el piel roja. Ese destino es un misterio para nosotros, pues no entendernos por qué se exterminan los búfalos, se doman los caballos salvajes, se saturan los rincones secretos de los bosques con el aliento de tantos hombres y se atiborra el paisaje de las exuberantes colinas con cables parlantes. ¿Dónde está el matorral? destruido. ¿Dónde está el águila? Desapareció. Termina la vida y empieza la supervivencia."

Seattle, jefe Indio de las tribus Dwamish y Suquamish