"Consideramos los hechos sociales como cosas, pero como cosas sociales. El tercer rasgo característico de nuestro método es el de ser exclusivamente sociológico. Con frecuencia ha parecido que estos fenómenos, a causa de su gran complejidad, o bien eran refractarios a la ciencia, o bien no podían entrar en ella más que reducidos a sus condiciones elementales, sean físicas, sean orgánicas, es decir, despojados de su naturaleza propia. Nos hemos dedicado, por el contrario, a establecer que era posible tratarlos científicamente sin quitarles nada de sus caracteres específicos. Incluso nos hemos negado a identificar esta inmaterialidad sui generis que los caracteriza con la ya compleja de los fenómenos psicológicos; con mayor razón nos hemos prohibido subsumirla, como la escuela italiana, en las propiedades generales de la materia organizada. Hemos hecho ver que un hecho social sólo se puede explicar por otro hecho social y al mismo tiempo hemos mostrado cómo es posible este tipo de explicación, señalando el medio social interno como el motor principal de la evolución colectiva. Por lo tanto, la sociología no es aneja de ninguna otra ciencia; es ella en sí misma una ciencia distinta y autónoma; el sentimiento de lo que tiene de especial la realidad social es incluso tan necesario al sociólogo que sólo una cultura especialmente sociológica puede preparar para la comprensión de los hechos sociales."

Émile Durkheim
Las reglas del método sociológico



"El derecho represivo permite, como ningún otro, cerrar filas alas conciencias rectas: gracias a él, les es dado separar el trigo de la cizaña. De donde se desprende [...] que el establecimiento, imposición y ejecución de la pena se dirige, de hecho, más a la gente de orden que a los infractores de la norma."

Émile Durkheim
Las reglas del método sociológico



"El sentimiento es objeto de la ciencia, pero no criterio de la verdad científica." 

Émile Durkheim


“El suicidio varía en proporción inversa al grado de integración de los grupos sociales a los que pertenece el individuo.”

Émile Durkheim


“Hay que elegir entre la sociedad y Dios.”

Émile Durkheim


"La conciencia colectiva es la forma más alta de la vida psíquica, pues es una conciencia de conciencias."

Émile Durkheim
Tomada del libro He visto cosas que no creerías de Jesús Callejo, página 218




“La religión no es sólo un sistema de ideas, es ante todo un sistema de fuerzas.” 

Émile Durkheim



“La sociedad es para sus miembros lo que Dios para sus fieles.”

Émile Durkheim


“No hay que decir que un acto ofende la conciencia común porque es criminal, sino que es criminal porque ofende la conciencia común.”

Émile Durkheim


“No nos sometemos a la ley porque la hemos creado, porque ha sido querida por tantos votos, sino porque es buena, es coherente con la naturaleza de los hechos, porque es todo lo que tiene que ser, porque tenemos confianza en ella.”

Émile Durkheim



"Y, en efecto, ¿qué es el matrimonio? Una reglamentación de las relaciones de los sexos, que se extiende no sólo a los instintos físicos que este comercio pone en juego, sino también a los sentimientos de toda clase que la civilización ha injertado, poco a poco, sobre la base de los apetitos materiales. Porque el amor es, en nosotros, un hecho mucho más mental que orgánico. Lo que el hombre busca en la mujer no es simplemente la satisfacción del deseo genésico. Si esa inclinación natural ha sido el germen de toda la evolución sexual, se ha complicado, progresivamente, con sentimientos estéticos y morales, numerosos y variados, y ya no es hoy más que el menor elemento del proceso total y complejo a que ha dado nacimiento. Al contacto de estos elementos intelectuales, el hombre se ha libertado parcialmente del cuerpo. Las razones morales le sugieren tanto como las intelectuales. No tiene ya la periodicidad regular y automática que presenta en el animal. En cualquier época puede despertarlo una excitación psíquica; es de todas las estaciones. Pero precisamente porque estas diversas inclinaciones, así transformadas, no están directamente colocadas bajo la dependencia de las necesidades orgánicas les es indispensable una reglamentación social. Puesto que no hay nada en el organismo que las contenga, es preciso que sean contenidas por la sociedad. Tal es la función del matrimonio. Regula toda esta vida pasional, y el matrimonio monogámico más estrechamente que cualquier otro, porque, al obligar al hombre a no ligarse sino a una mujer, siempre la misma, asigna a la necesidad de amar un objeto rigurosamente definido y cierra el horizonte."

Émile Durkheim
El suicidio