"Al deseo, acompañado de la idea de satisfacerse, se le denomina esperanza; despojado de tal idea, desesperación."

Thomas Hobbes


“(...) Considero que toda la humanidad se siente inclinada a desear con ansias cuanto poder pueda ostentar, lo que sólo cesa con la muerte.”

Thomas Hobbes


“Cualquier cosa que sea objeto del apetito o el deseo del hombre, será la que el hombre, por su parte, llame “Bien”; y el objeto de su odio y aversión, “Mal”.”

Thomas Hobbes


"Cuando dos hombres desean la misma cosa que no pueden gozar juntos se convierten en enemigos."

Thomas Hobbes


"Cuando el mundo está sobrecargado de habitantes, el último de todos los remedios es la guerra…"

Thomas Hobbes
Tomada del libro Sombras de antepasados olvidados de Ann Druyan y Carl Sagan, página 204


"De la igualdad de habilidades surge la igualdad de esperanzas en el logro de nuestros fines."

Thomas Hobbes


"El hombre es el único animal que enseña los dientes para sonreír, de modo que sonreímos en vez de comernos a quien tenemos delante."

Thomas Hobbes



“El hombre es un lobo para el hombre.”

Thomas Hobbes



“El ocio es la madre de la filosofía.”

Thomas Hobbes



“El que renuncia a un derecho solamente se quita de en medio para poder gozar del mismo sin impedimento de su parte.”

Thomas Hobbes


"El temor de las cosas invisibles es la semilla natural de lo que cada uno llama para sí mismo religión."

Thomas Hobbes
Leviatán


“En los tiempos en que los hombres viven sin una autoridad común que les imponga respeto, se hallan en esa condición que denominamos guerra.”

Thomas Hobbes



“En la guerra, las dos virtudes cardinales son la fuerza y el engaño.”

Thomas Hobbes



"En la naturaleza del hombre encontramos tres causas principales de querella: la competencia, la difidencia y la gloria."

Thomas Hobbes



“En sus venganzas, los hombres atienden, más que a la magnitud del mal pasado, a la magnitud del bien que esperan.”

Thomas Hobbes


"Galileo […] fue quien primero nos abrió la puerta de la filosofía natural universal, que es el conocimiento de la naturaleza del movimiento […]. La ciencia que se ocupa del organismo del hombre, que es la parte más provechosa de la ciencia natural, la descubrió con admirable sagacidad nuestro paisano el doctor Harvey. La filosofía natural es, por tanto, muy joven, pero la filosofía civil lo es todavía mucho más, y no se remonta más allá […] de mi propia De Cive."

Thomas Hobbes
De Corpore Politico
Tomada del libro Por qué creemos en cosas raras de Michael Shermer, página 59





"Hay muy pocos que sean tan necios que no prefieren gobernarse a sí mismos antes que ser gobernados por otros."

Thomas Hobbes


"La base de todas las sociedades grandes y duraderas ha consistido, no en la mutua buena voluntad que los hombres se tenían, sino en el recíproco temor."

Thomas Hobbes



"La fuerza y el engaño son las dos virtudes cardinales en la guerra."

Thomas Hobbes



"La guerra no consiste sólo en la batalla sino en la voluntad de contender."

Thomas Hobbes



"La ley primera y fundamental de la naturaleza es buscar la paz."

Thomas Hobbes


"La naturaleza ha hecho a los hombres tan iguales en sus facultades corporales y mentales que, aunque pueda encontrarse a veces un hombre manifiestamente más fuerte de cuerpo, o más rápido de mente que otro, aun así, cuando todo se toma en cuenta en conjunto, la diferencia entre hombre y hombre no es lo bastante considerable como para que uno de ellos pueda reclamar para sí beneficio alguno que no pueda el otro pretender tanto como él. Porque en lo que toca a la fuerza corporal, aun el más débil tiene fuerza suficiente para matar al más fuerte, ya sea por maquinación secreta o por federación con otros que se encuentran en el mismo peligro que él. Y en lo que toca a las facultades mentales, (dejando aparte las artes fundadas sobre palabras, y especialmente aquella capacidad de procedimiento por normas generales e infalibles llamado ciencia, que muy pocos tienen, y para muy pocas cosas, no siendo una facultad natural, nacida con nosotros, ni adquirida (como la prudencia) cuando buscamos alguna otra cosa, encuentro mayor igualdad aún entre los hombres, que en el caso de la fuerza. Pues la prudencia no es sino experiencia, que a igual tiempo se acuerda igualmente a todos los hombres en aquellas cosas a que se aplican igualmente. Lo que quizá haga de una tal igualdad algo increíble no es más que una vanidosa fe en la propia sabiduría, que casi todo hombre cree poseer en mayor grado que el vulgo; esto es, que todo otro hombre salvo él mismo, y unos pocos otros, a quienes, por causa de la fama, o por estar de acuerdo con ellos, aprueba. Pues la naturaleza de los hombres es tal que, aunque puedan reconocer que muchos otros son más vivos, o más elocuentes, o más instruidos, difícilmente creerán, sin embargo, que haya muchos más sabios que ellos mismos: pues ven su propia inteligencia a mano, y la de otros hombres a distancia. Pero esto prueba que los hombres son en ese punto iguales más bien que desiguales. Pues generalmente no hay mejor signo de la igual distribución de alguna cosa que el que cada hombre se contente con lo que le ha tocado."

Thomas Hobbes
Leviatán 


"La ociosidad es la madre de la filosofía."

Thomas Hobbes



"La risa no es más que la gloria que nace de nuestra superioridad."

Thomas Hobbes



"La vida es un perpetuo movimiento que, sino puede progresar en línea recta, lo hace circularmente."

Thomas Hobbes



“Las ideas estimulan la mente.”

Thomas Hobbes


"Las nociones de rectitud e ilicitud, justicia e injusticia, no tienen lugar en la guerra."

Thomas Hobbes


"(...) Las palabras Bien y Mal (...) siempre se usan con relación a la persona que se sirve de ellas, pues no existe nada que sea simple y absolutamente eso."


Thomas Hobbes



“Los niños no están dotados de razón hasta que pueden hablar; pero se les llama criaturas racionales por la posibilidad aparente de que harán uso de la razón en un tiempo futuro.”

Thomas Hobbes


“Los pensamientos secretos de un hombre atropellan todas las cosas, lo sagrado, lo profano, lo limpio, lo obsceno, lo serio, lo ligero, sin vergüenza ni culpa.”

Thomas Hobbes



"Los que aprueban una opinión, la llaman opinión; pero los que la desaprueban la llaman herejía."

Thomas Hobbes


"No buscamos la sociedad por amor a ella misma, sino por los honores o los beneficios que puede reportarnos."

Thomas Hobbes


"No fueron sus solas artes las que lo hicieron sino que contaron con el concurso de un gran número de gentileshombres que deseaban un gobierno popular en el Estado civil no menos que esos ministros lo deseaban en la Iglesia. E, igual que éstos en el púlpito atraían al pueblo a sus opiniones y le llevaban a detestar el gobierno de la Iglesia, los cánones y el Libro de la Plegaria Común-33, así los otros le hacían amar la democracia con sus arengas en el Parlamento y con sus discursos y conversaciones con el pueblo en el país, ensalzando continuamente la libertad y vituperando la tiranía, y dejando que el pueblo coligiera que esa tiranía era el actual gobierno del Estado. E, igual que los presbiterianos llevaron consigo su teología desde las universidades a las iglesias, así muchos de los gentileshombres llevaron sus teorías políticas desde las universidades al Parlamento. Pero en los tiempos de la reina Isabel ninguno de ellos lo hizo muy descaradamente. Y aunque no es muy probable que todos ellos obraran con malicia, sino muchos de ellos por error, lo cierto es que los principales cabecillas eran ministros ambiciosos y ambiciosos gentileshombres: los ministros envidiando la autoridad de los obispos, a los que tenían por menos doctos, y los gentileshombres envidiando el Consejo Privado y a los principales cortesanos34, a los que tenían por menos sabios que ellos mismos. Pues es difícil que quienes tienen un alto concepto de sus propios talentos, y más cuando han adquirido instrucción universitaria, se persuadan de que carecen de alguna de las capacidades requeridas para el gobierno de una república, especialmente si han leído las gloriosas historias y las sentenciosas teorías políticas de los antiguos gobiernos populares de los griegos y los romanos, entre los cuales los reyes eran odiados y motejados con el nombre de «tiranos», mientras que al gobierno popular se le dispensaba el nombre de «libertad», pese a que ningún tirano fue nunca tan cruel como una asamblea popular. Los ministros presbiterianos, al comienzo del reinado de la reina Isabel, no predicaron pública y abiertamente contra la disciplina de la Iglesia, porque no se atrevieron. Pero no mucho después, tal vez gracias al favor de algún cortesano importante, se lanzaron a predicar en la mayor parte de las villas de mercado de Inglaterra en las mañanas de los días laborables, como antes hacían los frailes predicadores. Y en esos sermones ellos y otros que tení­an a su cargo la cura de almas y que compartían esos mismos principios se aplicaron enteramente, tanto por la forma como por la materia de sus prédicas, a ganarse la simpatía del pueblo hacia sus doctrinas y la buena opinión hacia sus personas."

Thomas Hobbes
Behemoth


"Obtenemos derecho sobre las criaturas irracionales del mismo modo que sobre las personas humanas, es decir, mediante la fuerza y el poder natural. Porque si en el estado de naturaleza es legal para cualquiera, por razón de esa guerra de todos contra todos, someter e incluso matar hombres siempre que esto parezca redundar en nuestro bien, con mucha mayor razón será también legal, en el caso de los brutos, reducir a éstos a servidumbre haciéndolos útiles mediante el arte de la doma o persiguiéndolos y destruyéndolos en guerra perpetua si son peligrosos y nocivos. Por lo tanto, nuestro dominio sobre las bestias tiene su origen en el derecho de naturaleza, no en el derecho divino positivo. Pues si tal derecho no hubiera existido antes de que se hiciesen públicas las Sagradas Escrituras, ningún hombre podría con derecho haber matado una bestia para alimentarse, excepto aquellas que hubieran sido designadas por expresa disposición divina; lo cual, ciertamente, hubiera sido muy duro para hombres a quienes las bestias podían devorar sin injuria, sin dárseles a ellos el poder de destruirlas. Así pues, si procede del derecho natural el que una bestia pueda matar a un hombre, de ese mismo derecho procede también el que un hombre pueda matar a una bestia."

Thomas Hobbes
De Cive


"Para un hombre, cuando su deseo ya ha alcanzado el fin, resulta la vida tan imposible como para otro cuyas fantasías estén paralizadas, ya que la felicidad es un continuo progreso."

Thomas Hobbes


“Por su naturaleza, los hombres se preguntan por las causas de los acontecimientos que ven, unos más, otros menos; pero todos los hombres, sienten al menos curiosidad por averiguar las causas de su buena o mala fortuna.”

Thomas Hobbes



“(...) porque aunque un hombre haya visto siempre que tras la noche llega el día, no puede deducir que siempre vaya a ocurrir así, o que eso haya ocurrido desde siempre: la experiencia no concluye a nada universalmente.”

Thomas Hobbes



“Primero vivir, después filosofar.”

Thomas Hobbes


“Todo placer del ánimo, toda alegría reside en que haya alguien en comparación con el cual uno pueda tener un alto concepto de sí mismo.”

Thomas Hobbes


"Un hombre libre es aquel que, teniendo fuerza y talento para hacer una cosa, no encuentra trabas a su voluntad."

Thomas Hobbes


"Una democracia no es en realidad más que una aristocracia de oradores, interrumpida a veces por la monarquía temporal de un orador."

Thomas Hobbes


"Yo y el miedo somos gemelos."

Thomas Hobbes

"Y viendo que los sueños son causados por las perturbaciones de ciertas partes internas del cuerpo, distintas perturbaciones deben ocasionar diferentes sueños. Y de ahí que tener frío genera sueños de miedo, y provoca pensamientos e imágenes de objetos temibles (porque son recíprocos los movimientos del cerebro a las partes internas y de las partes internas al cerebro); y lo mismo que la ira causa calor en algunas partes del cuerpo cuando estamos despiertos, cuando estamos durmiendo el recalentamiento de las mismas partes causa ira, y hace que el cerebro se imagine un enemigo. De igual manera, así como la amabilidad natural, cuando estamos despiertos, causa deseos, y el deseo ocasiona calor en ciertas otras partes del cuerpo, también el excesivo calor de esas partes, mientras estamos durmiendo, hace que el cerebro se imagine demostraciones de amabilidad. En suma, los sueños son el reverso de lo que imaginamos en la vigilia; cuando estamos despiertos, el movimiento comienza en un extremo, y cuando soñamos, en el otro."

Thomas Hobbes