“Al igual que el rocío en la montaña, al igual que la espuma en el río, al igual que la burbuja en la fuente, eres pasado, ¡y para siempre!”

Sir Walter Scott


"Al tímido e indeciso todo le es imposible porque así se lo parece."

Sir Walter Scott


“Algo de pobreza es buena como compañía.”

Sir Walter Scott


"Así, para calmar el dolor del cacique,
lejos de la doncella que tanto ama,
surge la canción,
y suave y lenta
que le parecía estar escuchando los suspiros de ella.
La forma nacarada de esa sirena
era más blanca que el sedoso rocío
y sobre su pecho brillan sus rubios tirabuzones.
Nacida en la espuma de una ola,
alcanzó la predestinada proa,
abrazó fuerte al bravo cacique
y saltó con él en busca de las profundidades."

Sir Walter Scott
Minstrelsy of the Scottish Border


“Cada Era ha considerado al naciente año nuevo el mejor momento para la alegría festiva.”



Sir Walter Scott


"Descansar demasiado es oxidarse."

Sir Walter Scott


“El amor es lo más sublime cuando se envuelve en llanto.”

Sir Walter Scott


“El amor propio es el más grande de todos los aduladores.”

Sir Walter Scott


"El amor y la razón son dos viajeros que nunca moran juntos en el mismo albergue. Cuando el uno llega, el otro sale."

Sir Walter Scott



"El dinero ha aniquilado más almas que el hierro cuerpos."

Sir Walter Scott



El infeliz

"El infeliz concentrado en sí mismo
viviendo perderá su humanismo
y doblemente muriendo
quedará sufriendo,
volverá a la mísera tierra de la que surgiera, sin oír llantos,
ni alabanzas, ni cantos."

Walter Scott



“El infierno está empedrado de buenas intenciones.”

Sir Walter Scott



"El molinero se disponía a partir en aquel momento en dirección a su casa, después de prometer que enviaría con un criado un hermoso salmón. Elspeth, viendo su casa invadida por tantos huéspedes, estaba arrepentida de la invitación que había hecho a Mysie, y buscaba un medio decoroso de hacerla montar a la grupa del caballo de su padre, sin perjuicio de aplazar para mejor ocasión sus proyectos matrimoniales; pero este acto de generosidad inesperada por parte de Hob Miller desvaneció el pensamiento de desembarazarse de la hija, de modo que el molinero tomó solo el camino de su casa. Este proceder tuvo en seguida su recompensa.
Mysie vivía demasiado cerca de la abadía para ser novicia en el noble arte culinario. La excelente muchacha, que se había hecho un tocado más sencillo, y lucía sus brazos, blancos como la nieve, desnudos hasta los codos, ayudó a la dueña de la casa en todos los trabajos, revelando un talento sin igual y una incansable habilidad, distinguiéndose principalmente en la preparación de los hojaldres, de las jaleas y de otras muchas golosinas en las que ni Elspeth ni su cocinera Tibb habrían podido pensar siquiera.
Dejándola en la cocina, y sintiendo que la educación recibida por María Avenel no le permitiera encargarse de otra cosa más que de cubrir de hojas el piso de la sala grande, y de adornarla con flores de la estación, la viuda de Glendinning fue a vestirse de gala. Luego salió a la puerta de la torre con el corazón palpitante, a esperar a su reverencia. Eduardo, al lado de su madre, experimentaba las mismas emociones, y su filosofía buscaba inútilmente la explicación de ellas. No comprendía aún cuán difícilmente aprende la razón a vencer la fuerza de las circunstancias exteriores ni cuán embotadas están por la costumbre nuestras sensaciones aguzadas por la novedad.
A la sazón contemplaba con sorpresa no exenta de respeto a aquellos diez jinetes sobre dóciles corceles, y vestidos con largos sayales, cuyos escapularios blancos hacían resaltar el color negro de sus hábitos; avanzaban con lentitud, como si siguieran un cortejo fúnebre. Sir Piercie Shafton era el único que se distinguía en la marcha regular de la pacífica cabalgata."

Walter Scott
El monasterio


“El niño conoce instintivamente a su amigo y a su enemigo.”

Sir Walter Scott


“El orgullo de madre, la alegría de padre.”

Sir Walter Scott



“El que sube una escalera debe empezar por el primer peldaño.”

Sir Walter Scott


"En cuanto a las letras mayúsculas embellecidas con florituras que adornan el principio de cada párrafo ¿no expresan, acaso, con intensidad el orgullo y sentido de la propia importancia con que el autor emprendió y realizó sus tareas?"



Sir Walter Scott



“En qué poca cosa se convierten los “reyes de la creación” bajo un acceso de fiebre o un ataque de bilis.”

Sir Walter Scott


“La biografía es quizás, la más interesante rama de la composición.”

Sir Walter Scott



“La feliz combinación de circunstancias fortuitas.”

Sir Walter Scott



"La parte más importante de la educación del hombre es aquella que él mismo se da."

Sir Walter Scott



"La rosa es más bella bañada por el rocío de la mañana y el amor es más hermoso humedecido por las lágrimas."

Sir Walter Scott



"La venganza es el manjar más sabroso condimentado en el infierno."

Sir Walter Scott



La verdad de la mujer

La fe de la mujer y su confianza:
escriben sus caracteres en el polvo;
los estampa en la corriente del arroyo,
los imprime en el rayo pálido de la luna,
y cada símbolo evanescente
será más claro, más firme, mejor,
y más permanente, así lo creo,
que lo que esas letras significan.

Sir Walter Scott



“Los gatos son misteriosos; pasa más por su mente de lo que nunca podríamos imaginarnos.”

Sir Walter Scott


“Mantén el corazón y la cerveza negra siempre a mano.”

Sir Walter Scott



"Mira hacia atrás y ríete de los peligros pasados."

Sir Walter Scott


"Se dedican a trepar colinas y bajar valles, golpeando y rompiendo piedras con unos martillos como los de los peones camineros, para descubrir cómo se hizo el mundo."



Sir Walter Scott


“Sucede A veces que una flecha disparada al azar alcanza el blanco que el arquero no apuntaba; a menudo una palabra desgarra al corazón desdichado, partido entre el placer y el temor.”

Sir Walter Scott


"Todos los hombres que han demostrado valer algo han sido los principales artífices de su educación."

Sir Walter Scott


“Un abogado sin historia o literatura es un mecánico, un simple albañil de trabajo, si posee algún conocimiento de estos, puede atreverse a llamarse arquitecto.”

Sir Walter Scott


"Un silencio sepulcral reinó pronto sobre aquella gran hueste que sitiaba a Lieja. Durante largo tiempo los gritos de los soldados, repitiendo sus contraseñas y tratando de unir sus diferentes banderas, sonaron cual aullidos de perros asustados buscando a sus amos. Pero al fin, dominados por el cansancio producido por las fatigas del día, los dispersos soldados se aglomeraron bajo el primer abrigo que encontraron, y los que no encontraron ninguno, se tendieron bajo las paredes, setos y otros objetos similares de protección para esperar la mañana, una mañana que algunos de ellos nunca habían de contemplar.
(...)
La escena había llegado al máximo grado de interés y dramatismo. A la izquierda, el arrabal, después de un fiero combate, había sido incendiado, y una faja de llamas ancha y pavorosa no era obstáculo para que aun se disputasen las ruinas que ardían. En el centro, las tropas francesas, aunque luchando con fuerzas muy superiores, mantenían un fuego tan nutrido y constante, que la casita de recreo resultaba iluminada con los relámpagos de los disparos y semejaba un mártir coronado de llamas. A la derecha, la batalla fluctuaba con avances y retrocesos de suerte varia, según que llegasen nuevos refuerzos de la ciudad, o los que se traían procediesen de la retaguardia de las huestes borgoñesas; y la lucha continuó con furia sin igual durante tres mortales horas, que al fin trajeron la aurora, tan deseada por los sitiadores."

Walter Scott
Quentin Durward


“Una hora completa de gloriosa vida, vale más que una vida sin nombre.”

Sir Walter Scott


“Ven el viento venir, cuando caen los árboles del bosque. Ven las olas venir, cuando se hunden los navíos.”

Sir Walter Scott