A la rosa secreta

Remota, secretísima e inviolada Rosa,
Abrázame en mi hora de las horas; allí donde habitan
Cuantos te buscaron en el Santo Sepulcro,
O en el tonel de vino, más allá de la agitación
Y tumulto de derrotados sueños; donde, cerrados casi
Sus pálidos párpados, vencidos por el sueño, los hombres
Han dado nombre a la belleza. Tus grandes hojas ocultan
Las antiguas barbas, los yelmos de oro y rubíes
De los Magos coronados; y a aquel rey cuyos ojos
Vieron las Taladradas Manos y el añoso Leño alzarse
En las brumas Druidas, haciendo palidecer las antorchas;
Hasta que un vano frenesí le arrebató y murió; y a aquel
Otro que encontró a Fand caminando sobre llameante rocío
En una costa gris que nunca azotó el viento,
Y perdió el mundo y a Emer p
or un beso;
Y a aquel que expulsó a los dioses de sus lares,
Y cien veces estalló roja la aurora mientras lo
Festejaba, llorando sobre los túmulos de sus muertos;
Y al rey orgulloso y soñador que desechó corona
Y desventura, y seguido de su bardo y su bufón
Marchó a vivir entre ebrios vagabundos al corazón del bosque;
Y a aquel que vendió aperos, casa y bienes,
E innumerables años buscó por tierras y por islas,
Hasta encontrar, entre risas y lágrimas,
Una mujer de tan resplandeciente belleza
Que los hombres trillaban el grano a medianoche,
Por un mechón de sus cabellos, un pequeño mechón robado.
También yo espero la hora de tu gran vendaval de amor y odio.
¿Cuándo se extinguirán en el cielo las estrellas,
Como chispas que brotan del yunque y que se apagan?
¿Acaso no ha sonado ya tu hora?, ¿no sopla ya tu huracanado viento,
Remota, secretísima e inviolada Rosa?

William Butler Yeats


"A menudo me enredo en discusiones acerca de la verdadera naturaleza de las apariciones. Pero otras veces digo lo que decía Sócrates cuando le daban una opinión erudita respecto a una ninfa del Iliso: “La opinión general es suficiente para mí”, y creo que toda la naturaleza está llena de gente invisible, y que algunos de ellos son grotescos y feos, otros malvados y estúpidos, muchos de una belleza más allá de lo que hayamos visto nunca (...); sin duda están ahí, ese pueblo divino, pues sólo los que no tienen ni sencillez ni sabiduría los han negado, y los hombres sencillos de todos los tiempos y los sabios de la época antigua los han visto e incluso han hablado con ellos..."

William Butler Yeats
Tomado del libro de Patrick Harpur Realidad Daimónica, página 122


Aceite y sangre


"En tumbas de oro y lapislázuli
Cuerpos de santos y santas exudan
Aceite milagroso, fragancia de violeta.

Pero bajo los pesados cúmulos de arcilla pisoteada
Yacen cuerpos de vampiros pletóricos de sangre;
Sus mortajas están ensangrentadas y sus labios están húmedos."

William Butler Yeats


"Al ser irlandés,él tenía un sentido pertinaz de la tragedia, lo que le sostuvo durante los breves períodos de alegría."


William Butler Yeats



“Amada, mira en tu propio corazón,
el árbol sagrado crece allí;
de la alegría surgen las ramas sagradas…”

William Butler Yeats



Ante los ojos de los niños del colegio

I

Paseando en el aula inmensa pregunto;
Y una monja linda de velo blanco contesta:
Los niños aprenden a escribir y a cantar,
Aprenden a leer y la historia escuchar,
A cortar y coser, y a trabajar con esmero
Siguiendo la modernidad – los ojos de los niños
En un momento pasajero se clavan con asombro en
Un sonriente funcionario de mediana edad.

II

Sueño con el cuerpo legendario de Leda, inclinado
Sobre un fuego desazonante, un cuento que ella
Contó de un cruel reproche, o un suceso trivial
Que transformó días de inocencia infantil en tragedia-
Contó, y sentí como si nuestros dos seres se fundieran
En una esfera de joven compasión,
Para transformar la parábola de Platón en una alegoría
De yemas y claras habitando debajo del mismo techo.

VI

Su imagen actual flota hacia mi mente –
¡Me pregunto si el dedo del Quattrocento la engendró
Con las mejillas hundidas como si se hubiera bebido el viento
Y si para matar el hambre le dieron a cambio un caos de sombras!
Yo también tuve alguna vez alas adorables
Aunque nunca como las de Leda – basta de esto,
Mejor sonreír toda esta sonrisa, y mostrar
Que allí hay una especie de agradable viejo espantapájaros.

VI

Platón pensó que la naturaleza es solo espuma que juega
Sobre un paradigma espectral de objetos;
El soldado Aristóteles jugó a las canicas
Sobre los pies del Rey de Reyes;
El famoso con su muslo de oro, Pitágoras
Tocaba con un violín o unas cuerdas
Lo que cantaban las estrellas y las indiferentes Musas escuchaban:
Ropa vieja encima de ramas viejas para espantar un pájaro.

VII

Monjas y madres, ambas adoran imágenes,
Pero aquellos que prenden las velas no son como aquellos
Que reviven los ensueños de las madres,
Pero mantienen de pie a una estatua de mármol o de bronce.
Sin embargo, también rompen corazones – ¡Oh Olam!
Que la pasión, piedad y la afección le conocen,
Y que toda la gloria del paraíso simboliza –
¡Oh burladores auto-engendradores del ser del hombre!

VIII

El esfuerzo está floreciendo y bailando en el lugar
Donde el cuerpo no se lastima para satisfacer al alma.
Ni la belleza nace de su propia desesperanza,
Ni la sabiduría soñolienta nace del combustible de la medianoche.
¡Oh castaños!, con flores de profunda raíz,
¿Eres la hoja, la flor o el tronco?
¡Oh cuerpo sometido a la música! ¡Oh centelleante mirada!
¿Cómo del baile se distingue el bailarín?"


William Butler Yeats
Traducción de Amal Haddad, Universidad de Granada


"Aquellos con quienes lucho yo no odio, los que guardo yo no amo."

William Butler Yeats


“Aunque es larga la tarea de los sepultureros,
sus palas son resistentes y sus músculos fuertes.
No hacen sino devolver a los que entierran
a la mente de los hombres.”

William Butler Yeats



"Cada tentación representa la conquista de un nuevo fondo de energía moral. Cada prueba soportada y resistida en el espíritu correcto hace que un alma más noble y más fuerte de lo que era antes."


William Butler Yeats




"¿Cómo podemos discernir a la bailarina de la danza?"

William Butler Yeats



"¿Cómo pueden nacer la inocencia y la belleza sino por medio de la costumbre y la ceremonia?"

William Butler Yeats



“Como una mosca de largas zancas sobre el río su mente se mueve en el silencio.”

William Butler Yeats


"Con una fría mirada a la vida, a la muerte. ¡Jinete, pasa!"



William Butler Yeats
Epitafio



"Creo que fue Heráclito quien dijo: el Daimon es nuestro destino. Cuando pienso en la vida como una lucha contra el Daimon que eternamente nos enfrentará al más duro trabajo entre los que no son imposibles, entiendo por qué hay esa profunda animadversión entre un hombre y su destino, y por qué el hombre no ama nada más que su destino (...). Estoy convencido de que el Daimon nos libera y nos engaña, y de que tejió sus mallas desde las estrellas y lanzó la red desde su hombro..."

William Butler Yeats
Tomado del libro de Patrick Harpur Realidad Daimónica, página 71



"Creo que se puede salir de las artes, superior o inferior, a la conciencia de la humanidad."


William Butler Yeats




Cuando estés vieja

“Cuando estés vieja y cansada, y vencida por el sueño,
y dormitando junto al fuego, tomes este papel,
y lentamente leas, y sueñes con la dulce belleza
que tus ojos tuvieron antaño, y también con sus sombras profundas.

Cuántos amaron tus momentos de alegre dulzura,
y amaron tu belleza con amor sincero o falso,
pero sólo un hombre amó en ti tu alma peregrina
y también las tristezas de tu rostro cambiante.

Y cuando, inclinada junto a las barras candentes,
murmures, con cierta tristeza, cómo el amor huyó
y escapó allí arriba por los montes,
y escondió su rostro entre un tropel de estrellas.”

William Butler Yeats



“…¿Cuándo se arrojarán las estrellas del cielo
y como chispas de herrería morirán? …”

William Butler Yeats


"Demasiado tiempo un mismo sacrificio puede hacer del corazón una piedra. ¿Cuándo será tiempo suficiente?"

William Butler Yeats



"Desperté y vi a las personas más encantadoras que haya visto nunca. Un chico y una chica vestidos con prendas verde oliva estaban de pie junto a mi cama. La miré a ella y me di cuenta de que llevaba el vestido fruncido alrededor del cuello en una especie de cadena, o tal vez un bordado rígido (...). Pero lo que me maravilló fue la milagrosa bondad de su rostro. No se ven rostros así (...). Era sereno como los rostros de los animales, o como los lagos de montaña al atardecer; tan sereno que era un poco triste."

William Butler Yeats
Tomado del libro de Patrick Harpur Realidad Daimónica, página 14



"Dime, castaño, grande y arraigado, hacedor de flores,
Si eres la hoja, el tronco o la flor.
Oh, cuerpo que mece la música, mirada que resplandece,
¿Cómo podemos distinguir el bailarín de la danza?"

William Butler Yeats





"¿Dónde está el pasaje que debo explicar hoy a mis alumnos? Aquí: y el libro dice que fue escrito por un mendigo en las paredes de Babilonia: “Hay dos reinos de seres vivientes, el uno visible y el otro invisible; y cuando es invierno entre nosotros, es verano en el país, y cuando los vientos de noviembre soplan entre nosotros, allí es época de parir las ovejas”."

William Butler Yeats
The Hour-Glass


Él desea las telas del cielo


"Si tuviese yo las telas bordadas del cielo, 
Recamadas con luz dorada y plateada, 
Las telas azules y las tenues y las oscuras 
De la noche y la luz y la media luz, 
Extendería las telas bajo tus pies: 
Pero, siendo pobre, sólo tengo mis sueños; 
He extendido mis sueños bajo tus pies; 
Pisa suavemente, pues pisas mis sueños."





William Butler Yeats


"El hombre puede encarnar la verdad, pero no la puede saber."


William Butler Yeats



"El odio intelectual es lo peor de todo."


William Butler Yeats



"El único negocio que está en la cima del mundo es el homenaje a inclinarse incesantemente por lo que dicta el corazón."


William Butler Yeats



“El vino entra en la boca Y el amor entra en los ojos; esto es todo lo que en verdad conocemos antes de envejecer y morir. Así llevo el vaso a mi boca, y te miro, y suspiro.”

William Butler Yeats



“Ella piensa, en parte mujer, tres parte niña, que nadie la mira; sus pies ensayan un paso de baile aprendido en la calle.”

William Butler Yeats



En el crepúsculo


"Gastado corazón de un tiempo gastado,
Líbrate de las redes de lo cierto y lo falso;
Ríe otra vez, corazón, en el triste crepúsculo,
Suspira una vez más, corazón, ante el rocío de la mañana.

Tu madre Eire es siempre joven,
El rocío siempre brillante y triste el crepúsculo;
Aunque tu esperanza colapse y el amor se desvanezca,
Ardiendo en las llamas de una lengua odiosa.

Ven, corazón, allí donde las colinas se amontonan:
Pues allí la hermandad mística
Del sol y la luna y el claro y el bosque
Y el río y la corriente construyen su deseo;

Y se alza Dios soplando su cuerno solitario,
Y el tiempo y el mundo siempre vuelan;
Y el amor es menos amable que el oscuro crepúsculo,

Y la esperanza menos querida que el rocío de la mañana."

William Butler Yeats



“En los sueños comienza la responsabilidad.”

William Butler Yeats



"Esparcí mis sueños bajo tus pies;
Pisa suavemente porque pisas mis sueños."

W. Butler Yeats



“Esta melancolía Londres. A veces me imagino que las almas de los perdidos se ven obligadas a caminar por sus calles perpetuamente. Uno siente que pasa como un soplo de aire”

William Butler Yeats



¿Estáis conformes?

Hoy llamo a aquellos que me llaman hijo,
nieto o bisnieto,
a tíos, tíos abuelos, tías abuelas
para que juzguen cuanto he hecho.
Al ponerlo en palabras,
¿acaso eché a perder lo recibido
de las viejas entrañas?
Ojos purificados por la muerte
pueden juzgar, yo no, pero no estoy conforme. 

Aquel que en Drumcliff, en Sligo,
alzó la vieja Cruz de piedra,
el pelirrojo párroco del condado de Down,
buen hombre de a caballo,
Sandymount Corberts, ese hombre admirable         
que fue el anciano Willian Polloxfen,
Middleton el contrabandista, Butlers,
hombres casi legendarios. 

Débil y anciano podría quedarme
con buena compañía,
yo que siempre detesté el trabajo
sonriendo frente al mar; también podría
acaso demostrar con mi existencia
aquello a que aludía Robert Browning
con lo del viejo cazador que habló con Dioses;
pero no estoy conforme.

William Butler Yeats



"Escribí muchas obras buenas en verso y en prosa, y reescribí casi todas esas obras después de que fueron representadas, a veces una y otra vez, y todas las modificaciones que funcionaron sobre el escenario fueron adiciones al elemento masculino, fortalecimientos de la estructura ósea."

William Butler Yeats


“… Estoy seguro de encontrar mi fin
en un alto lugar sobre las nubes;
odio no tengo a aquellos que combato,
amor no tengo a aquellos que defiendo."


William Butler Yeats



    "Fue en el mes de junio, y Hanrahan iba por la carretera de Sligo, pero no quiso entrar en la ciudad, sino que se volvió para el Ben Bulhen porque los recuerdos de un tiempo antiguo le volvían a la mente y no tenía deseo de encontrarse con gentes vulgares. Y mientras caminaba iba cantando para sí una de las canciones que le vinieran al espíritu en la época de las ensoñaciones:

    El huesudo dedo de la Muerte
    nunca sabrá encontrarlos allá
    en la ciudad llana y elevada,
    donde damos y prescindimos del amor;
     En donde las ramas portan frutos y flores
    en todas las estaciones del año;
    En donde los ríos no cesan de correr
    arrastrando cerveza rubia y negra.
    Un viejo rústico toca la gaita
    en un bosque de plata y oro;
    Y reinas de ojos azul hielo
     allí bailan entre los otros.
    La pequeña zorra se puso a murmurar;
    "¡Oh! ¿Qué hay del veneno del mundo?"
     Y el sol sonreía con dulzura
    mientras la luna venía pegada a mis espaldas.
    Pero la pequeña zorra murmuró:
    "No voy yo pegada a sus espaldas,
          alla va él cabalgando hacia la ciudad
          que es el veneno del mundo. "
         Cuando sus corazones tan altos están
          que les es necesario emprenderse a golpes,
          ellos descolgaron sus pesadas espadas
         de las ramas de plata y oro.
          Pero todos los que en batalla sean muertos
          resucitarán a la vida de nuevo.
          Es una suerte que su historia
          no sea conocida entre los hombres,
          porque qué de campesinos fuertes
         abandonarían enseguida sus palas,
         y sus corazones serían entonces como una copa
         que alguien apurase hasta agotada.
         Miguel descolgaría su trompeta
         de una de las ramas sobre su cabeza
         y emitiría un breve toque
        cuando la cena fuera servida.
         Gabriel surgiría de las aguas
         con la cola de un pez, y hablaría
         de los milagros acaecidos
         en mojados caminos por donde pasaban hombres,
         y levantará un cuerno antiguo
         de plata martelada, y beberá
          hasta que llegue a quedarse dormido
        contra el reborde estelar.

         Por entonces Hanrahan había iniciado la ascensión de la montaña, de modo que dejó de cantar, pues la cuesta le resultaba dura y de trecho en trecho se veía obligado a sentarse para reposar un rato. En un momento en que estaba descansando, descubrió un arbusto de brezos que tenía muchas flores y que crecía pegado a los muros de una ciudadela, y le trajo aquello
a la memoria las rosas salvajes que acostumbraba a llevarle a Mary Lavelle, cosa que no hizo con ninguna otra mujer después. Arrancó una ramita del arbusto, que tenía capullos y flores abiertas a la vez, y continuó sir cantar:

        La pequeña zorra se puso a murmurar:
       ¡Oh! ¿Qué hay del veneno del mundo?
       Y  el sol sonreía con dulzura
        mientras la luna venía pegada a mis espaldas.
       Pero la pequeña zorra murmuró:
       "No voy yo pegada a sus espaldas,
       allá va él cabalgando hacia la ciudad
        que es el veneno del mundo. "

     Continuó la ascensión del monte, alejándose de aquellas ruinas de ciudadela, y le venían a la mente algunos otros poemas que hablaban de enamorados, buenos y malos, y de alguno que fue despertado del sueño supremo de la tumba por la fuerza del amor de otro, y vuelto a la vida en algún lugar de sombras, donde estarán aguardando a que llegue el día del Juicio Final, lejos de la Faz de Dios.
    Al fin, hacia el final del día, llegó al Despeñadero de los Extranjeros, y allí se dejó caer junto a un cerco de rocas y se puso a mirar hacia el profundo valle, que parecía lleno de una neblina gris que se extendía de una montaña a la otra.
    Y le pareció, mientras estaba mirando, que la niebla se transformaba en fantasmales formas de hombres y de mujeres, y su pecho se puso a latir con el pánico y el gozo simultáneos de la visión. Sus manos, que siempre estaban agitadas, se ocuparon en arrancar los pétalos de las flores de la ramita del brezo, y las miraba mientras revoloteaban hacia las profundidades del valle, formando una cadena vacilante.
   De repente comenzó a percibir una música en sordina, una música que tenía más de llantos y de risas que de melodía terrena. Y su corazón se elevo al oír aquello, y comenzó a reír fuerte, porque sabía que esta música venía de gentes que tenían mayor belleza y grandeza que las gentes del mundo. Y le pareció que aquellos humildes pétalos de rosa silvestre, al irse
revoloteando hacia el valle, comenzaron a cambiar sus formas, hasta que pudo reconocer en ellos a una banda de hombres y de mujeres, lejanos en la niebla, pero que conservan los colores de las flores. La primera tonalidad de color uniforme se tomó en multitud de olores, y lo que acabó viendo fue una larga fila de apuestos jóvenes y mujeres. Reinas que ya no se alejaban de él, sino que avanzaban hacia él y cruzaban de largo, y sus rostros expresaban ternura a través de sus miradas altivas y buscaban cosas elevadas y dolorosas. Brazos vaporosos y fantasmales se extendieron desde la niebla como para agarrar a estos seres, pero no llegaron a tocarlos, porque la paz que parecía envolverlos totalmente era algo que no podía ser roto. Tras ellos e incluso por delante, manteniéndose sin embargo a distancia, como por reverencia, había otras formas que subían y bajaban e iban y venían, y Hanrahan reconoció en su vuelo de torbellino que eran los Sidhe, aquellos antiguos dioses derrotados. Los brazos vaporosos no se alzaron para atrapar a los Sidhe, ya que son seres que no pueden ni pecar ni obedecer. Y todos fueron a fundirse en la distancia, y todos parecían dirigirse hacia una puerta blanca que existía en el costado de la montaña.
   Después la niebla se extendió ante él como un océano solitario que lamiese las montañas con largas olas grises, pero mientras lo miraba todo aquello comenzó a llenarse de nuevo de la fluyente vida rota y descabellada que le es consustancial, y melenas y brazos y cabezas pálidas cubiertas de cabellos flotantes aparecieron en medio de la masa gris difusa. Luego se elevó más y más el mar de niebla, hasta emparejarse con el filo de la pared de roca, y allí las formas no parecieron ya otra cosa sino cuerpos sólidos, y aquella nueva procesión casi perdida en la densidad de la niebla cruzó muy lentamente, con paso desigual, y en el centro de cada una de las sombras había algo que brillaba con fulgor de estrella. Se acercaron más y Hanrahan pudo ver que eran también amantes y que llevaban en el pecho espejos en forma de corazón en lugar del corazón auténtico, y que se iban mirando el rostro eternamente cada uno reflejado en el espejo del otro.
   Pasaron más allá, buceando hacia la profundidad a medida que lo rebasaban, y otras formas se dibujaban en lugar de las primeras. Éstas no iban en parejas, una junto a otra, sino que se seguían, extendiendo a los lados brazos en furiosa llamada. Y se dio cuenta de que las formas seguidas eran mujeres, y que todas tenían rostros de una belleza indescriptible, mientras que sus cuerpos tenían apariencia de meras sombras desprovistas de vida. Las larguísimas cabelleras se agitaban con movimiento estremecido, envolviéndolas, como seres dotados de vida propia. En ese momento se elevó la niebla, y casi al mismo tiempo un ligero viento la hizo correr hacia el noroeste y dejó simultáneamente a Hanrahan envuelto por completo en un ala nubosa.
   Se puso en pie, titubeante, y se disponía  ya a marcharse del valle cuando percibió dos formas oscuras que estaban semiescondidas y que parecían erguirse en el aire un poco más allá de la roca. Una de ellas tenía la mirada triste de un mendigo, y le habló con voz femenina:
   -¡Háblame tú, ya que desde hace siete años nadie me ha dirigido la palabra, ni en este mundo  ni en el otro!
  -¡Explícame quiénes son esos que han pasado! -dijo Hanrahan.
  -Los primeros que pasaron -dijo la mujer- son aquellos amantes del tiempo antiguo que gozaron de mayor fama: Blanaid, Deirdre, Grania, y sus correspondientes amados, más otros muchos que no son conocidos, pero que se amaron también con la misma fuerza.
  "Y porque precisamente no fue el florecer de la juventud lo único que fueron buscando los unos en los otros, sino esa belleza igual de durable que la noche o las estrellas, la noche y las estrellas mismas los cobijan para siempre en su seno, preservándolos de todo conflicto y de todo perecimiento, a pesar de la sangre y la amargura que su amor ha traído al mundo.
  " Los que has visto después -dijo-, y que aún van respirando el aire dulce y llevan espejos en sus pechos, nunca han sido descritos por las canciones de los poetas, porque lo único que desearon fue triunfar el uno sobre el otro y demostrar así la fuerza y belleza de alma, y construyeron a partir de este sentimiento otro tipo de amor.
   Por último, las mujeres con cuerpo nebuloso no desearon ni tener triunfo, ni amar activamente, sino sólo ser amadas, y no tienen en el cuerpo ni sangre ni corazón, hasta que no les sea llevado, en el momento en que les den un beso, y sus vidas durarán sólo un instante. Todas éstas son desgraciadas, porque soy la más desgraciada, porque soy Dervorguilla, y éste de aquí es Diarmuid, y fue nuestro pecado lo que hizo que los normandos ambicionasen Irlanda. Así, las maldiciones de todas las generaciones pesan sobre nosotros, y nadie tiene castigos tan duros como nuestro castigo. Nosotros somos de los que sólo supimos amar uno en el otro el florecimiento carnal de hombre y mujer; así, después de muertos, no quedó en torno a nosotros esa quietud que dura inquebrantablemente, y la amargura por los combates que causamos a Irlanda se ha vuelto nuestro castigo constante. Eternamente condenados a errar; mas Diarmuid, mi enamorado, ve en mí siempre un cuerpo que ha sido arrastrado
largo tiempo por el suelo, y yo sé que es así como me ve. ¡Pregúntame más, pregúntame más, que todos estos años han pasado depositando sabiduría en mi corazón, pero nadie me ha escuchado desde hace setecientos años!
   El pánico se apoderó del corazón de Hanrahan, y levantando los brazos por encima de su cabeza, lanzó tres veces un fuerte alarido, y los animales que pastaban en el valle levantaron las cabezas y mugieron, y los pájaros que anidaban en el precipicio de la montaña se despertaron de su sueño y revolotearon entre las hojas. Un poco por debajo del reborde de piedra la banda de hojas color rosa aún se mecía en el aire, porque las puertas que llevan a la Eternidad se entreabrieron y volvieron a cerrarse entre dos palpitaciones del corazón."

William Butler Yeats

La visión de Hanrahan, en La rosa secreta y Leyendas de Hanrahan el rojo, Barcelona, Altaya, 1995, pp.137-143.



"Fuera de Irlanda hemos llegado, llenos de odio, habitación pequeña, mutilados desde el principio. Yo llevo desde el vientre de mi madre un corazón fanático."


William Butler Yeats



"Fui al bosque de avellanos, porque había un fuego en mi cabeza."

William Butler Yeats

Aengus


"Hacemos de la pelea con los demás, la retórica, y de la pelea con nosotros mismos, la poesía."


William Butler Yeats



"He conocido a más hombres destruidos por el deseo de tener esposa e hijos y mantenerlos en la comodidad de lo que he visto hombres destruidos por el alcohol y las prostitutas."


William Butler Yeats



"He creído lo mejor de cada hombre. Y he visto que creer es suficiente para hacer que un hombre lleno de maldad muestre su mejor versión, o incluso un buen hombre sea incluso más bueno."


William Butler Yeats




"La alegría es de la voluntad que labora, que supera obstáculos, que conoce el triunfo."


William Butler Yeats




La canción de Aengus el 

vagabundo


Eché a andar por el bosque de avellanos

porque sentía un fuego en la cabeza,
y corté y descortecé una rama
y le até una baya con un hilo;
y cuando echaron a volar mariposas blancas
y se alejaron como estrellas titilantes,
la dejé caer en un arroyo
y pesqué una pequeña trucha plateada.

tras haberla dejado en el suelo

fui a avivar con mi aliento la llama,
pero algo crujió en el suelo
mientras alguien pronunciaba mi nombre.
Se había convertido en una joven resplandeciente,
y con flores de manzano en el cabello,
que me llamó por mi nombre y echó a correr
perdiéndose en el aire destellante.

Aunque envejezca en mis vagabundeos

por hondonadas y colinas,
alguna vez volveré a encontrarla,
y tomándola de las manos, la besaré en los labios,
y caminaremos entre largas hierbas multicolores,
y cosecharé hasta el final del tiempo
las plateadas manzanas de la Luna
y las manzanas doradas del Sol."

William Butler Yeats





“La educación no es el relleno de un cubo, sino la iluminación de un incendio.”

William Butler Yeats



La fascinación por lo que es difícil
ha secado la savia de mis venas
y ha expulsado la auténtica alegría
y el innato placer del corazón.
Algo inquieta a mi potro, cual si fuese
de sangre impura, inepto para el salto
de una nube a la otra en el Olimpo;
tiembla bajo la fusta, tira, suda
y, como si arrastrara lastre, brega.
Malditas obras, siempre mal montadas;
la lucha diaria contra el tonto, el pillo,
el negocio del teatro y su gestión.
Juro que antes de que comience el día
iré al establo y quitaré el pestillo.

William Butler Yeats


"La felicidad no es ni virtud, ni placer, ni presente, sino crecimiento. Simplemente somos felices cuando crecemos."

William Butler Yeats



"La inocencia y la belleza no tienen enemigo, excepto el tiempo."


William Butler Yeats



La máscara

“Quítate esa máscara de oro en llamas
con ojos de esmeralda”.
“Oh, no, querido, te atreves tanto
para ver si es sabio o salvaje el corazón
Y no es frío sin embargo”.

“Solo quiero encontrar lo que allí hay,
Si el amor o el engaño”.
“Fue la máscara lo que ocupó tu mente
Y puso a latir tu corazón después,
no lo que hay tras ella”.
“Pero a menos que seas mi enemiga,
yo debo indagar”.

“Oh, no, querido, olvida todo eso.
¿Qué importa que haya solo fuego
en ti, en mí?”

William Butler Yeats

Traducción de Nicolás Suescún






La muerte

"Ni miedo ni esperanza
acompañan al animal que muere;
el hombre aguarda su final
temiendo y esperando todo;
muchas veces murió,
muchas se levantó de nuevo.
Un gran hombre con su orgullo
al enfrentar asesinos
hunde en el escarnio
la cesación del aliento.
Él conoce la muerte a fondo —
el hombre creó la muerte."

William Butler Yeats
Traducción de Gerardo Gambolini



La segunda venida

"Girando sin cesar en la espira creciente
el halcón ha dejado de oír al halconero;
todo se desmorona; el centro se doblega;
arrecia sobre el mundo la anarquía,
arrecia la marea rebosante de sangre, y en todas partes
la ceremonia de la inocencia es anegada;
los mejores carecen de toda convicción, mientras que los peores
están llenos de brío apasionado.

Sin duda una revelación es inminente;
sin duda la Segunda Venida es inminente.
¡La Segunda Venida! Apenas digo estas palabras
cuando una vasta imagen del Spiritus Mundi
perturba mi visión: oculta en las arenas del desierto
una forma con cuerpo de león y cabeza de hombre,
de pupilas vacías y crueles como el sol,
mueve sus lentos muslos, mientras en torno fluyen
las sombras indignadas de las aves del yermo.
Cae de nuevo la oscuridad;
pero ahora sé que veinte siglos de pétreo sueño
fueron mortificados hasta la pesadilla por el mecerse de una cuna,
¿y qué bestia escabrosa, llegada al fin su hora,

se arrastra hacia Belén para nacer?"


William Butler Yeats



“La vida es una bengala roja de sueños.”

William Butler Yeats


"La vida es una larga preparación para algo que nunca sucede."


William Butler Yeats






"Las cosas se desmoronan, el centro no puede sostenerse; la anarquía se ciñe sobre el mundo, la marea de sangre se ha desatado, y en todas partes la ceremonia de la inocencia es ahogada; los mejores carecen de toda convicción, mientras que los peores están llenos de apasionada intensidad. Seguramente alguna revelación está presta."


William Butler Yeats



"Las personas que se apoyan en la lógica y la filosofía y la exposición racional terminan dejando morir de hambre a la mayor parte de la mente."


William Butler Yeats




"Lo peor es que algunos hombres cuando no están borrachos están sobrios."

William Butler Yeats



"Los griegos, según me ha contado cierto estudioso, consideraban que los mitos son las actividades de los Dáimones, y que los Dáimones dan forma a nuestros caracteres y nuestras vidas. A menudo he tenido la fantasía de que hay un mito para cada hombre y que, si lo conociéramos, nos permitiría entender todo lo que éste hizo y dijo."

William Butler Yeats
Tomado del libro La Realidad Daimonica de Patrick Harpur, página 355



Los hombres mejoran con los años


"Estoy cansado de sueños; 
Un tritón de mármol, gastado por el clima 
En los riachuelos; 
Y durante todo el día observo 
La belleza de esta dama 
Como si hubiese hallado en un libro 
Una belleza imaginada, 
Satisfecho de tener repletos mis ojos 
O mis oídos que perciben, 
Encantado de no ser más que sabio, 
Pues los hombres mejoran con los años; 
Pero aún así, aún así, 
¿Es ese mi sueño, o la verdad? 
Oh, ¡cómo quisiera que nos hubiésemos conocido 
Cuando yo tenía mi ardiente juventud! 
Pero envejezco entre sueños, 
Un tritón de mármol, gastado por el clima 

En los riachuelos."

William Butler Yeats





"Los mejores carecen de toda convicción, mientras que los peores están llenos de apasionada intensidad."

William Butler Yeats


"Maldito quien saca a la luz del día los escritos que he desechado."

William Butler Yeats


"Me pregunto si alguien hace algo más que soñar y recordar en Oxford, ya que el lugar es tan hermoso. Uno casi espera a que la gente cante en vez de que hable. Todo es como una ópera allí."

William Butler Yeats


“Mi amor, dices que no hay amor a menos que dure para siempre. Tonterías, hay episodios mucho mejores que la obra entera.”

William Butler Yeats

  

Mosca de patas largas

Que la civilización no se hunda,
perdida su gran batalla,
haz callar el perro, amarra el potrillo
a un poste distante;
Nuestro maestro César está en la tienda
con mapas esparcidos,
sus ojos fijos en nada,
una mano bajo su cabeza.

(Como una mosca de patas largas sobre la corriente
su mente se mueve sobre el silencio)

Que las torres sin capitel sean quemadas
y los hombres recuerden ese rostro,
muévete muy suavemente si moverte debes
en este solitario lugar.
Piensa ella, una parte mujer, tres partes niña,
que nadie mira; sus pies
ensayan el paso del deshollinador
recogido en una calle.

(Como una mosca de patas largas sobre la corriente
su mente se mueve sobre el silencio)

Que las niñas en la pubertad encuentren
el primer Adán en su pensamiento,
cierra la puerta de la capilla del Papa,
mantén a los niños afuera.
Allá en ese andamio se reclina
Miguel Ángel.
Sin otro sonido que el que hacen los ratones
su mano avanza y retrocede.

(Como una mosca de patas largas sobre la corriente
su mente se mueve sobre el silencio)

William Butler Yeats



“Mucho tiempo sacrificándose puede hacer piedra el corazón.”

William Butler Yeats


“Muere el toque final de medianoche.
Todo el día en la misma silla
de sueño en sueño y rima en rima he deambulado…”
  
William Butler Yeats


"Nacer mujer es conocer -aunque no hablan de ello en la escuela- mujeres que busquen ser bellas."

William Butler Yeats



Navegando hacia Bizancio

I

"Aquel no es un país para hombres viejos. Los jóvenes 
Tomados del brazo, las aves en los árboles 
- Las generaciones que mueren - cantando, 
Las cascadas de salmón, los mares repletos de atún, 
Peces, animales, aves, encomian todo el verano 
Todo aquello que se produce, nace, y muere. 
Atrapado en esa música sensual todo ignora 
Monumentos de intelecto que no envejece.

II


Un hombre viejo no es más que una cosa miserable, 
Un abrigo andrajoso sobre un bastón, a menos 
Que el alma aplauda y cante, y cante más fuerte 
Por cada arruga en su traje mortal. 
Ni hay otra escuela de canto que el estudio 
De monumentos de magnificencia única; 
Y por eso he navegado los mares y he venido 
A la santa ciudad de Bizancio.

III


Oh sabios que estais en el fuego sagrado de Dios 

Y en el dorado mosaico de un muro, 
Venid del fuego sacro, girad hasta mí, 
Y sed los maestros de canto de mi alma. 
Consumid mi corazón; enfermo de deseo 
Y atado a un animal agonizante 
No sabe ya lo que es; y llevadme 
A la ilusión de la eternidad.

IV

Una vez fuera de la naturaleza, no he de tomar 

Mi forma de ninguna cosa natural, 
Sino una forma como la que los herreros griegos hacen 
De oro repujado y esmalte dorado 
Para mantener despierto a un somnoliento Emperador; 
O ponen en una rama dorada para que cante 
A los señores y las damas de Bizancio 
Sobre lo pasado, lo presente, o lo por venir."

William Butler Yeats


"Ni temor ni esperanza hay en un animal moribundo; un hombre espera su fin temiendo y esperando a todos."

William Butler Yeats


"No esperes a golpear hasta que el hierro esté caliente; pero ponlo caliente golpeándolo."

William Butler Yeats

"No hay extraños aquí, sólo amigos que aún no has conocido."
William Butler Yeats


"No hay que perder los estribos, a menos que uno quiera conseguir estar más y más furioso al final."
William Butler Yeats



“…No sabemos que aquello que perturba nuestra sangre
es sólo su nostalgia de la tumba.”

William Butler Yeats


"Oí a los viejos muy viejos decir todo lo que es hermoso se desvanece, al igual que las aguas."

William Butler Yeats



“Percibe las diferencias de talento, el genio de la unidad.”

William Butler Yeats



"Pero ¿hubo alguna vez algún perro que elogió sus pulgas?"


William Butler Yeats


  
“Piensa como un hombre sabio pero comunícate con el lenguaje de la gente.”

William Butler Yeats


"Piensa dónde la gloria del hombre mayormente comienza y termina, y di que mi gloria era gracias a que tenía eso, amigos."


William Butler Yeats




"¿Por qué debemos honrar a aquellos que mueren en el campo de batalla? Un hombre puede mostrar con un temerario coraje para entrar en el abismo de sí mismo."


William Butler Yeats




"¡Qué lejos parecen las estrellas, y qué lejos está nuestro primer beso, y ah, qué viejo mi corazón!"


William Butler Yeats



"Querida, contempla tu propio corazón,

el árbol sagrado está creciendo allí.
De alegría las ramas sagradas crecen
y también todas las hojas que llevan."

William Butler Yeats




¿Quién soñó que la belleza pasa cómo un sueño?

"¿Quién soñó que la belleza pasa como un sueño?
Por estos rojos labios, con todo su cansado orgullo,
tan tristes ya, que ninguna maravilla pueden presagiar,
Troya se nos fue con destello fúnebre y violento,
y los hijos de Usna nos han abandonado.

Desfilamos, y desfila con nosotros el mundo atareado
entre las almas de los hombres, que se despiden y ceden su puesto
como las pálidas aguas en su glacial carrera;
Bajo estrellas que pasan, espuma de los cielos,
sigue viviendo este rostro solitario.

Inclinaos, arcángeles, en vuestra sombría morada:
Antes de que existierais y antes de que ningún corazón latiera,
rendida y amable permanecía junto a su trono;
la Belleza hizo que el mundo fuera una senda de hierba

para que Ella posara sus pies errantes."


William Butler Yeats




“…¿Quién soñó que la belleza pasa como un sueño?
Por estos labios rojos, con todo su triste orgullo,
tan tristes ya, que ninguna maravilla pueden presagiar,
Troya se nos fue con destello fúnebre y violento
y murieron los hijos de Usna.”


William Butler Yeats




Recuerda la olvidada belleza

"Al ceñirte en mis brazos,
estrecho contra mi corazón esa belleza
que del mundo hace mucho se marchara:
coronas engastadas que reyes arrojaron
en charcas fantasmales, huyendo los ejércitos;
cuentos de amor tejidos con hebras de seda
por soñadoras damas en telas que nutrieron la polilla asesina:
rosas de tiempos idos
que las damas tejieron en sus pelos;
lirios fríos de rocío que las damas portaron
por tanto corredor sagrado,
adonde tales nubes de incienso se elevaban
que sólo Dios estaba con los ojos abiertos:
ya que el pálido pecho, la mano demorada,
nos llegan de otras tierras más pesadas de sueño,
y también de otra hora más pesada de sueño.
Y cuando tú suspiras entre besos
escucho la blanca Belleza también suspirando
por aquella hora cuando todo
deberá consumirse cual rocío.
Mas llama sobre llama y hondura sobre hondura,
y trono sobre trono y medio en sueños,
posadas sus espadas en sus férreas rodillas,
tristemente cavilan sobre grandes misterios solitarios."


William Butler Yeats



Sangre y luna

"Bendito sea este lugar 
Y aún más bendita esta torre; 
Un poder sangriento y arrogante 
Se levantó de la raza 
Para expresarla, para dominarla, 
Se alzó como los muros 
De estas cabañas azotadas por la tormenta. 
Como burla he construido 
Un emblema poderoso 
Y lo canto verso a verso, 
Como burla de una época 

Medio muerta en la cima."

William Butler Yeats


"Sé discreto y exultante, porque de todo lo conocido eso es lo más difícil."

William Butler Yeats




"Sé que me encontraré con mi destino en algún lugar entre las nubes."


William Butler Yeats




“Seguí la voluntad del dragón hasta que tú viniste
Pues había imaginado el amor
una improvisación casual; un juego establecido
Que ocurría si dejaba caer mi pañuelo:
Eran mejores los actos que al instante daban alas,
y música celestial si tal vez daban ingenio;
Y entonces estuviste en los anillos del dragón.
Moféeme, siendo loco, más tú lo dominaste
Y rompiste los grillos, liberaste mis piernas,
San Jorge o tal vez un Perseo pagano;
Y ahora, asombrados miramos el mar,
Y un ave extraña y milagrosa hacia nosotros clama.”

W. Butler Yeats
Su Triunfo



“... Sería excelente
que pudiéramos entregarnos totalmente a los sueños,
y penetrar en su mundo, que para los sentidos
son tinieblas, sin perder desdichadamente nuestro tiempo
en cosas baladíes; pues los sueños
son los que nos elevan hacia el mundo fluido y mutable
que el corazón anhela.”

W. Butler Yeats
Las aguas tenebrosas


"Si el sufrimiento y el dolor traen la sabiduría, me gustaría ser menos sabio."

William Butler Yeats




"Sigo siendo de la opinión de que sólo dos temas pueden ser de interés para un ambiente serio y estudioso -el sexo y la muerte."

William Butler Yeats


“Somos felices cuando nuestro interior está correspondido por nuestro exterior.”

William Butler Yeats



Sueños rotos

Hay gris en tus cabellos;
los jóvenes ya no se quedan sin aliento
a tu paso;
acaso te bendiga algún vejete
porque fue tu plegaria
la que lo salvó en el lecho de muerte.
Por tu bien  -que ha sabido de todo dolor del corazón,
y que ha impartido todo el dolor del corazón,
desde la magra niñez acumulando
onerosa belleza-  por tu solo bien
el cielo desvió el golpe de su sino,
tan grande su porción en la paz que estableces
con sólo penetrar dentro de un cuarto.

Tu belleza no puede sino dejar entre nosotros
vagos recuerdos, recuerdos nada más.
Cuando los viejos se cansen de hablar, un joven
le dirá a un viejo: «Háblame de esa dama
que terco en su pasión nos cantaba el poeta
cuando ya su sangre debiera estar helada por los años».

Vagos recuerdos, recuerdos nada más.
Pero en la tumba todos, todos se verán renovados.
La certidumbre de que veré a esa dama
reclinada o erecta o caminando
en el primor inicial de su feminidad 
y con el fervor de mis ojos juveniles, 
me ha puesto a balbucear como un tonto. 

Era más bella que cualquiera
no obstante tu cuerpo tenía una tacha; 
tus manos pequeñas no eran bellas,
y temo que has de correr
y las hundirás hasta la muñeca
en ese lago misterioso, siempre rebosante
donde todos los que cumplieron la ley sacra
se hunden y resurgen perfectos. Deja intactas 
las manos que besé, 
por bien del viejo bien.

Muere el último toque de media noche.
Todo el día, en la misma silla
de sueño a sueño y rima a rima he errado,
en charla incoherente con una imagen de aire:
vagos recuerdos, recuerdos nada más.

William B. Yeats
Versión de Hernando Valencia Goelkel



"Todas las almas vacías tienden hacia opiniones extremas."


William Butler Yeats




"Tú que me juzgas, no juzgues solo este libro o aquél, ven a este lugar sagrado donde los retratos de mis amigos cuelgan y míralos; rastrea la historia de Irlanda en sus lineamientos; piensa en la gloria del hombre, empieza y termina en sus amigos."


William Butler Yeats




"Un hombre viejo no es más que una cosa miserable."

William Butler Yeats



".... una civilización aristocrática en su más completa forma, cada detalle de su vida jerárquico, la puerta de cada gran hombre apiñada al alba con peticionarios, gran riqueza por todas partes en las manos de pocos hombres, todos dependientes de unos pocos, hasta el Emperador mismo, quién es un Dios dependiente en un Dios mayor y por todas partes, en la Corte, en la familia, una desigualdad hecha ley. "

William Butler Yeats

tomado del libro de David Icke, El mayor secreto, pág. 256



Una oración por mi hija


Nuevamente aúlla la tormenta, y semioculta
Bajo el velo de su cuna, mi niña duerme aún.
No hay obstáculo alguno, salvo el bosque de Gregory y la colina desnuda,
Donde el viento que arrasa los silos y los tejados,
Nacido en el Atlántico, pueda aquietarse;
Y toda una hora he caminado y rezado
Pues una gran oscuridad nubla a mi mente.

Una hora he caminado y rezado por esta pequeña niña
Y oía al viento marino aullar sobre la torre,
Y bajo los arcos del puente, y entre los olmos del arroyo inundado,
Imaginando en furiosos ensueños
Que todo el porvenir había llegado,
Al son de un frenético tambor,
Surgido de la asesina inocencia del mar.

Que belleza le sea concedida, mas no la belleza
Que acongoja la mirada de un extraño,
O la suya ante su espejo, pues aquellas
Que viven criándose demasiado hermosas
Consideran la belleza fin suficiente,
Pierden la bondad natural y tal vez
El íntimo pálpito del corazón
Que siempre elige bien, y nunca conocen la amistad.

Helena, la elegida, halló su vida tediosa y sin brillo
Y, posteriormente, muchos problemas tuvo por culpa de un tonto,
Mientras aquella gran Reina
Surgida de la espuma
Que sin padre bien pudo haber hecho lo que quisiera
Eligió, sin embargo, por esposo a un herrero patizambo.
Es bien cierto que las mujeres hermosas comen
Una loca ensalada con su carne
Por la que el Cuerno de la Abundancia se deshace.

En cortesía la quisiera, principalmente, instruida;
Los corazones no se dan como un regalo, sino más bien son ganados
Por aquellos que no son totalmente hermosos;
A pesar de todo,
Muchos, que han desempeñado el papel de necios
Por la belleza en sí, el encanto los ha vuelto sabios.
Y muchos pobres hombre que vagaron,
Amaron y amados se creyeron,
De unas dulces formas no pueden apartar los ojos.

Puede que se convierta en oculto árbol floreciente,
Que todos sus pensamientos sean como zorzales
Sin otra preocupación que regalar a su entorno
Los prodigios de su canto,
Que sólo en regocijo inicie una disputa,
Que sólo en regocijo inicie una caza,
O puede que viva como un verde laurel
Enraizada perpetuamente en un lugar querido.

Mi mente, porque las mentes que he amado,
El tipo de belleza que he aprobado,
Poco prosperan, se ha secado en los últimos tiempos,
Sin embargo, sabe que asfixiarse en el odio
Bien puede ser de todos el mal mayor.
Si no hay odio en la mente
El asalto y la agresión del viento
Jamás podrá arrancar al zorzal de la rama.

El odio intelectual es el peor,
Así, mejor que crea a las opiniones detestables.
¿No he visto a la mujer más bella
Nacida de la boca del Cuerno de la Abundancia,
A causa de su opinatriz mente
Cambiar ese Cuerno y cada bien
Que las personas calmas comprendían
Por un viejo fuelle lleno de viento airado?

Tomando en cuenta que, expulsado todo el odio,
El alma recupera su radical inocencia
Y aprende al final que a sí misma se deleita,
Que a sí misma se inquieta y se apacigua,
Y que su propio deseo es el mismo del Cielo;
Ella puede, aunque cada rostro deba ajarse,
Y aúlle cada región el viento
O cada fuelle reviente, ser aún feliz.

Y que su esposo la lleve a una casa
Donde habite la costumbre y la ceremonia
Pues la arrogancia y el odio son la mercancía
Que se puede comprar en cualquier calle.
¿Cómo si no, fuera de costumbre y ceremonia,
Podrán nacer la belleza y la inocencia?
Ceremonia es el nombre de donde vienen todos los dones
Y costumbre el del árbol de frondoso laurel.

William Butler Yeats



"Una pena más allá de todo relato está escondida en el corazón del amor."


William Butler Yeats




"Una vez que estableces la legislación sobre bases religiosas, se abre el camino para todo tipo de intolerancia y persecución religiosa."


William Butler Yeats





"Venid Hadas, sacadme de este mundo aburrido,"


William Butler Yeats



¿Y ahora qué?

"En la escuela imaginaron sus camaradas preferidos 
que él llegaría a ser hombre famoso; 
y él lo mismo pensó y vivió en esa idea, 
sus veinte años repletos de trabajos: 
«¿Y, ahora, qué? -cantaba el espectro de Platón-. ¿Y, ahora, que?» 

Todo lo que escribía se leía, 
y años más tarde ganó 
dinero suficiente para lo necesario, 
amigos que en verdad fueron amigos; 
«¿Y, ahora, qué? -cantaba el espectro de Platón-. ¿Y, ahora, que?»

Sus sueños más felices se realizaron 
-una vieja casita, mujer, hija e hijo, 
y un terreno donde crecían el repollo y el ciruelo-, 
y poetas e ingenios congregaba; 
«¿Y, ahora, qué? -cantaba el espectro de Platón-. ¿Y, ahora, que?»

«El trabajo está hecho -pensó ya viejo-
de acuerdo con mi plan juvenil; 
y que rabien los necios, en nada me aparté de ese orden, 
algo que se llevó a la perfección»; 
mas cantaba el espectro aún más alto: «¿y, ahora, qué?»."

William Butler Yeats
Versión de Enrique Caracciolo Trejo


“Y cuando tú suspiras entre besos, escucho la blanca Belleza también suspirando por aquella hora cuando todo deberá consumirse cual rocío.”

William Butler Yeats


Yo, que soy pobre, tengo sólo mis sueños;
he extendido mis sueños bajo tus pies;
pisa con suavidad porque pisas sobre mis sueños.

William Butler Yeats



 "Yo sé ahora que la revelación viene del yo, de aquel secular yo recordado. y que el genio es una crisis que por un momento une a aquel yo soterrado con nuestra mente trivial cotidiana."

William Butler Yeats
En su  autobiografía
Tomado del libro de Donald Tyson, El Necronomicon, página 28


"Yo soy de una raza saludable con larga vida, y nuestras mentes mejoran con la edad."

William Butler Yeats