“Despertamos en el cuerpo de Cristo
cuando Cristo despierta nuestros cuerpos,
y mi pobre mano es Cristo,
todo El está en mi pie, y es infinitamente mío.
Muevo mi mano, y de forma maravillosa
mi mano se torna Cristo, se vuelve todo El.”

Simeón, Abad de St. Marcos



“Oh Luz que nadie puede nombrar; pues es enteramente innombrable.
Oh Luz de muchos nombres, pues se encuentra en todas las cosas...
¿Cómo te mezclas con la hierba?
¿Cómo, mientras sigues inmodificable, enteramente inaccesible,
mantienes la naturaleza de la hierba incombustible?”

Simeón, Abad de St. Marcos
Hymnos de amor divino