“Dos de los mayores abusos relativos a la política interior de las naciones consiste en el traspaso irregular de la propiedad, con violencia y con engaño.”

William Godwin




“El hombre (…) deja de vivir intelectualmente desde el momento en que se cierra a sí mismo el camino de la investigación. Ya no es un hombre, sino un espectro”

William Godwin


“El hombre esclavizado por la vergüenza, la superstición o la superchería siempre estará expuesto a un conflicto interno de opiniones que desaprueba con involuntaria censura la conducta que fue obligado a adoptar.”


William Godwin



“El tirano no goza de santidad alguna y se lo puede matar sin escrúpulos como a cualquier otra persona, si ello responde a la necesidad de repeler una violencia inmediata. En todos los demás casos, la eliminación de un culpable por parte de una autoridad auto-designada, no es el procedimiento más adecuado para contrarrestar la injusticia.” 


William Godwin




“En ningún pueblo el enemigo de la libertad es la gente, sino sus estratos más altos, que se aprovechan del sistema. Démosle opiniones justas en relación con lo social a una cantidad de personas libremente educadas y hagámoslas reflexionar. Que tengan guías y maestros y todo estará resuelto. Pero es un proceso a cumplir de forma gradual. El error no está en tolerar por un tiempo las malas formas de gobierno, sino en suponer que no puede llevarse adelante un cambio y en no avanzar en su cumplimiento.” 


William Godwin




“El que me coacciona pretende hacerlo porque sus razones son fuertes; pero realmente lo hace porque son débiles.”

William Godwin



“El resultado del sistema de propiedad es establecido el espíritu de opresión, el de servilismo y el de dolo. Y es tan hostil al progreso intelectual como al progreso moral.” 

William Godwin


“El tema de la convivencia es importante porque abarca al matrimonio. Tenemos que ampliar nuestras reflexiones al respecto. Convivir permanentemente es repudiable porque impide el desarrollo libre del intelecto y es incompatible con las tendencias e imperfecciones humanas. Las propensiones y deseos de dos personas no suelen durar indefinidamente, y obligarlos a una vida eterna en compañía mutua es condenarlos a discutir, discrepar, y ser infelices para siempre.”

William Godwin




“En verdad, no hay tiempo más perdido que el que se gasta leyendo compendios.”

William Godwin



“Es injusto que un ser humano trabaje hasta perder la salud o la vida, mientras otro nada en la abundancia.”

William Godwin



“Es sabio estimular al hombre a obrar por sí mismo y no lo es mantenerlo en estado de eterno tutelaje.”


William Godwin


“Esta será la etapa más brillante del progreso humano. Mirar hacia delante y ver el momento gloriosos en que se disuelvan los gobiernos políticos, en que finalice ese bárbaro y depravado instrumento cuyos infinitos males esenciales, solo pueden eliminarse con su plena destrucción.”

William Godwin


"Estimulado por estos sentimientos, yo era lo que el señor Forester necesitaba: un oyente ávido y entusiasta. Soy enormemente sensible a las impresiones; y las que me llegaban sucesivamente al espíritu se volvían visibles en mi semblante y mis gestos. Las observaciones que el señor Forester había hecho en sus viajes, las opiniones que se había formado, todo me divertía e interesaba. Su manera de contar un suceso o explicar sus pensamientos era vigorosa, clara y original; su estilo de conversación tenía una gracia especial. Todo lo que decía me encantaba; a cambio, mi simpatía, mi ansiosa curiosidad y mi sincero entusiasmo me convertían en un oyente deseable para el señor Forester. No es extraño, por tanto, que nuestra relación se volviera más íntima y cordial de día en día.
El señor Falkland estaba destinado a ser eternamente infeliz; era como si no pudiera ocurrir nada sin que sirviese para alimentar esta imperiosa inclinación. Estaba cansado de la monotonía, y sentía un rechazo invencible hacia todo lo nuevo. Veía con desagrado la visita del señor Forester; apenas era capaz de mirarle sin un estremecimiento, emoción de la que su invitado se daba cuenta, y la atribuía al hábito y a la enfermedad más que a su juicio. Nada de lo que el señor Forester hacía le pasaba inadvertido; el detalle más insignificante le producía inquietud y temor. Las primeras muestras de amistad entre el señor Forester y yo despertaron probablemente sentimientos de celos en él; el carácter desigual y variable de su huésped tendía a aumentárselos, dado que confería una apariencia de enigma y misterio. Fue entonces cuando me anunció que no veía con agrado que tuviera demasiado trato con este caballero.
¿Qué podía hacer yo? Joven como era, ¿podía esperarse que me comportase como un Filósofo y pusiera freno a mi inclinación? Aunque había sido imprudente, ¿podía voluntariamente someterme a una penitencia eterna, y abstenerme de la sociedad humana? ¿Podía rechazar una franqueza tan en consonancia con mis deseos, y recibir con descortesía una amabilidad que me cautivaba el corazón?
Además, no estaba dispuesto a plegarme a la sumisión servil que el señor Falkland me exigía. En la primera etapa de mi vida me había acostumbrado a ser dueño de mí mismo. Al principio de entrar al servicio del señor Falkland, la novedad de mi situación había frenado mis hábitos, y las cualidades de mi patrono habían conquistado mi afecto. A la novedad y su influencia había sucedido la curiosidad. La curiosidad, mientras duró, fue un principio más fuerte en mi pecho que incluso el amor a la independencia. A ella habría sacrificado mi libertad y mi vida; para satisfacerla, me habría sometido a la condición de un negro de las Indias Occidentales o a las torturas que infligen los salvajes norteamericanos. Pero ahora se me había calmado la turbulencia de la curiosidad.
Mientras las amenazas del señor Falkland fueron vagas y genéricas, las soporté. Me daba cuenta de la acción indigna que había cometido, y eso me volvía humilde. Pero cuando decidió ir más lejos, y trató de dictarme mi propia conducta, perdí la paciencia. Consciente antes de la posición infortunada en que mi imprudencia me había colocado, ahora tenía una visión más cercana y alarmante de las circunstancias del caso. El señor Falkland no era ningún anciano; era un hombre vigoroso, aunque de aspecto estropeado quizá; podía vivir tanto como yo. Era su prisionero: ¡y de qué modo! Observaba todos mis actos, vigilaba todos mis gestos. No podía moverme a derecha o izquierda sin que los ojos de mi guardián estuviesen sobre mí. Me vigilaba; y su vigilancia me resultaba opresiva. Se había acabado la libertad para mí, se había acabado la alegría, la despreocupación, la juventud. ¿Era ésta la vida que había iniciado yo con tan cálidas esperanzas? ¿Iba a consumir mis días en esta melancolía gris; me había convertido en un galeote en manos del orden natural a quien sólo la muerte, la mía o la de mi implacable superior, podía liberar?
Había sido atrevido a la hora de satisfacer una curiosidad infantil y absurda, y lo sería igualmente, si era preciso, defendiendo todo lo que puede hacer la vida valiosa. Estaba dispuesto a llegar a una transacción: me comprometería a que el señor Falkland no sufriese jamás daño alguno a través de mí; a cambio, esperaba que no se entrometiese en mi vida, sino que me dejase seguir mi propio criterio."

William Godwin
Las aventuras de Caleb Williams



“Hay hartos motivos para suponer que las leyes no se basan en razones equitativas y tienen como objetivo beneficiar a un grupo.”

William Godwin



“La ambición de ganar territorios, someter o amedrentar a Estados vecinos, de tener más armas que ellos o una mejor industria, es un deseo basado en el error y el prejuicio. Poder no es lo mismo que felicidad. Paz y seguridad son bienes más deseables que un comportamiento capaz de hacer sentir miedo a otras naciones.”

William Godwin



“La coerción constituye una lamentable necesidad incompatible con el genio y la esencia del espíritu humano. Nada más ridículo que plantearla como medio de mejoramiento para la sociedad.”

William Godwin




“La democracia es un sistema de gobierno dentro del cual todo integrante de la sociedad es considerado exclusivamente hombre. Pero existen desventajas que parecen ser consecuencia necesaria de la igualdad democrática. Es razonable suponer que en toda comunidad, los ignorantes serán más que los sabios y a partir de ahí, deducir que la suerte del conjunto estaría a merced de la ignorancia y la necedad. Ciertamente el ignorante suele dejarse conducir por el sabio, pero su propia ignorancia le impedirá evaluar el mérito de sus guías. El demagogo astuto y violento, frecuentemente tendrá más probabilidades de impresionarle que un hombre de intenciones más puras y de talento menos brillante.” 

William Godwin



“La dirección que ejerce el gobierno sobre la educación pública es el medio del cual se vale para influir sobre la opinión general” 

William Godwin


“La humanidad  nunca alcanzará un alto nivel de felicidad y virtud hasta que cada persona o disponga de las distinciones que legítimamente le corresponden por sus méritos personales.”
William Godwin

“La institución política es muy fuerte en el punto en que la eficacia de la educación es deficiente y su campo de acción es externo.”


William Godwin






“La legislación de cada país, en general, favorece al rico contra el pobre. Ese es el carácter del juego legal por el cual el trabajador sin educación tiene prohibido destruir al que devora las esperanzas de su futura subsistencia o de proveerse de alimento que encuentra, sin buscarlo, en su camino.” 


William Godwin



“La monarquía se basa en la impostura. No es cierto que los reyes sean dueños de la distinción que detentan. Carecen de toda superioridad intrínseca sobre sus súbditos. Los privilegios que heredan provienen del engaño, de medios desleales utilizados para lograr algunos propósitos y no tiene nada en común con la virtud.”

William Godwin



“La riqueza se adquiere, por lo general, engañando al semejante y se gasta infiriéndole injurias.”

William Godwin


“Las opiniones y por consiguiente, los deseos de los hombres, serán siempre relegados por las opiniones de la comunidad. Pero las costumbres que perviven en muchos países están conformadas de modo idéntico entre si para dar la convicción de que la integridad moral, la virtud, la inteligencia y la diligencia no son nada, y que la opulencia es todo.” 


William Godwin



“Las religiones son una componenda con prejuicios y debilidades humanas. Quienes las crean hablan al mundo con palabras que este quiere escuchar. Ya es tiempo de dejar de lado enseñanzas destinadas a mentalidades infantiles.”

William Godwin

“Mientras investigamos si el gobierno puede mejorar, sería bueno pensar en sus efectos presentes. Desde hace mucho tiempo se sabe que la historia del género humano no es más que el registro de sus crímenes. La guerra se consideró hasta el momento, como aliada de la institución política.”



William Godwin




“No hay ciencia alguna que no tenga adicciones, ni arte que no pueda perfeccionarse. Si esto es cierto para todas las ciencias, también lo será para la ética. Si es cierto para todas las artes, ha de serlo para la institución social.”


William Godwin



“Para que un objeto sea calificado como de mi propiedad, debe ser necesario para mi bienestar. Mi derecho es inherente a esa necesidad. Es realmente mío lo que requiero para mi uso, el resto, aunque lo consiga trabajando, no me pertenece y retenerlo es una usurpación.” 

William Godwin


“¿Puede un hombre cuyo aspecto exterior nuestra indigencia, esperar buen recibimiento dentro de la sociedad, en particular por quienes se propusieron dirigir a los demás? ¿Se imagina necesitar ayuda y favor? De inmediato se le informa que ningún merecimiento está a tono con su apariencia humilde. Se le dará la lección de ir a casa, enriquecerse por el método que fuere y conseguir lo que se considera de valor. Y a partir de entonces se podrá estar seguro de ser afablemente recibido.”


William Godwin




“Se comprende cada vez con mayor claridad que el gobierno no tiene importancia secundaria, sino que es el vehículo principal de un mal completo y permanente que sufre la humanidad” 

William Godwin


“Se instituyó el gobierno porque los hombres se sentían propensos a actuar mal y tenían temor de que la justicia fuera pervertida por seres sin escrúpulo al solo fin de sacar ventajas. Como las naciones son proclives a caer en la misma debilidad y como no encuentran un árbitro a quien acudir ante los conflictos, inventaron la guerra. Los hombres fueron inducidos a matarse mutuamente y a solucionar las diferencias de modo alejado de la razón y la justicia, y muy cercano al éxito que cada bando obtuviera en actos de devastación y asesinato. Al comienzo, la guerra tuvo origen en la ira. Luego se transformó en oficio. Una parte de la nación le paga a otra para que mate y se haga matar en su lugar. Y las causas más elementales, los impulsos debidos a la ambición siempre fueron suficientes para inundar todo de sangre.”

William Godwin



“Ser fiel a la ley es compromiso complicado que aterroriza al espíritu reflexivo.”

William Godwin



“Si la justicia tiene algún sentido, es inicuo que un hombre posea lo superfluo, mientras existan seres humanos que no dispongan adecuadamente de los elementos indispensables.”

William Godwin



“Si la sociedad se gobernara de acuerdo con las reglas naturales de la justicia y no se arrogara el derecho de forzar dichas reglas con la suma de normas superfluas y contradictorias, no sería necesaria legislación alguna. Las reglas de la justicia se comprenden cuando se comunican directamente a los hombres, sin las trabas del prejuicio y no mediante códigos y catecismos.”

William Godwin




“Si los tribunales dejaran de sentenciar y se limitaran a sugerir, si la fuerza se eliminara paso a paso y la reemplazara la razón, ¿no descubriremos un día que los jurados y demás instituciones públicas pueden dejarse de lado por innecesarios?”
William Godwin



“Si una nación no está madura para la libertad, el hombre que asuma la responsabilidad de hacer justicia con violencia, mostrara el fervor de su alma y ganara un grado de notoriedad. No conseguirá fama, pues la mayor parte de los hombres contempla con horror esos actos y por consiguiente, causara desgracias a su país. Si falla en su intento, el tirano se volverá mucho más sanguinario, cruel y feroz. Si tiene éxito y la tiranía es restaurada, esos sucesores harán lo mismo. En medio del despotismo tal vez brote una virtud solitaria. Pero rodeados por conspiraciones y acechanzas, no existen la verdad, ni la confianza ni el amor a los hombres.” 


William Godwin




“Si un gobierno debe su estabilidad a la ignorancia, es una maldición para los hombres. Cuanto más conscientes sean estos de sus intereses verdaderos, más juiciosa será su conducta, tanto en acciones propias como en la tolerancia hacia sus semejantes. Y ello constituirá un bien para todos. El hombre con un espíritu educado según lo que indica la razón, nunca se convertirá en agresor del bien común.”


William Godwin



“Siempre que un gobierno pretende evitar a los ciudadanos la molestia de pensar por su cuenta, consigue aumentar la torpeza e imbecilidad colectivas.”

William Godwin




“Un hombre que no osa confiar en su imaginación, en su temor ha de ser necesariamente una persona pusilánime, afeminada y vacilante.”

William Godwin



“Un resultado de la institución de leyes es que, una vez puestas en vigor, no admiten término. Siguen sumándose edictos y códigos, especialmente dentro de los gobiernos más populares y deliberativos.”


William Godwin



“Un sistema que se basa en la caridad y la clemencia en vez de la justicia, da demasiado al rico e inspira gratitud servil al pobre, acostumbrándolo a recibir las migajas que se le otorgan y a no darse cuenta de que se le adeudan. Que no son graciosos donativos de los opulentos.”

William Godwin