Arrabal amargo

Arrabal amargo
metido en mi vida,
como la condena
de una maldición.
Tus sombras torturan
mis horas sin sueño,
tu noche se encierra
en mi corazón.
Con ella a mi lado
no vi tus tristezas,
tu barro y miserias,
ella era mi luz.
Y ahora, vencido,
arrastro mi alma,
clavao a tus calles
igual que una cruz.

Rinconcito arrabalero,
con el toldo de estrellas
de tu patio que quiero.
Todo, todo se ilumina,
cuando ella vuelve a verte
y mis viejas madreselvas
están en flor para quererte.

Como una nube que pasa
mis ensueños se van,
se van, no vuelven más.

A nadie digas
que ya no me quieres.
Si a mí me preguntan
diré que vendrás.
Y así cuando vuelvas,
mi almita, te juro,
los ojos extraños
no se asombrarán.
Verás cómo todo
te esperaba ansioso:
mi blanca casita
y el lindo rosal...
Y cómo de nuevo
alivia sus penas
vestido de fiesta
mi viejo arrabal.

Alfredo Le Pera Sorrentino



"Guitarra, guitarra mía, por los caminos del viento vuelan en tus armonías coraje, amor y lamento."

Alfredo Le Pera Sorrentino



Soledad

Yo no quiero que nadie a mí me diga
que de tu dulce vida
vos ya me has arrancado.
Mi corazón una mentira pide
para esperar tu imposible llamado.
Yo no quiero que nadie se imagine
cómo es de amarga y honda mi eterna soledad,
en mi larga noche el minuto muele
la pesadilla de su lento tic-tac.

En la doliente sombra de mi cuarto, al esperar
sus pasos que quizás no volverán,
a veces me parece que ellos detienen su andar
sin atreverse luego a entrar.
Pero no hay nadie y ella no viene,
es un fantasma que crea mi ilusión.
Y que al desvanecerse va dejando su visión,
cenizas en mi corazón.

En la plateada esfera del reloj,
las horas que agonizan se niegan a pasar.
Hay un desfile de extrañas figuras
que me contemplan con burlón mirar.
Es una caravana interminable
que se hunde en el olvido con su mueca espectral,
se va con ella tu boca que era mía,
sólo me queda la angustia de mi mal.

Alfredo Le Pera Sorrentino




"Solo en la ruta de mi destino sin el amparo de tu mirar, soy como un ave que en el camino rompió las cuerdas de su cantar."

Alfredo Le Pera Sorrentino


Volver

Yo adivino el parpadeo
de las luces que a lo lejos
van marcando mi retorno,
son las mismas que alumbraron
con sus pálidos reflejos
hondas horas de dolor,
y aunque no quise el regreso
siempre se vuelve al primer amor;
la vieja calle, donde el eco dijo,
tuya es tu vida, tuyo es tu querer
bajo el burlón, mirar de las estrellas
que con indiferencia hoy me ven volver.​

Volver con la frente marchita
las nieves del tiempo, platearon mi sien
sentir que es un soplo la vida,
que 20 años no es nada
que febril la mirada,
errante en la sombras
te busca y te nombra...
Vivir...
con el alma aferrada
a un dulce recuerdo
que lloro otra vez.​

Tengo miedo el encuentro con el pasado
que vuelve a enfrentarse con mi vida,
tengo miedo de las noches que pobladas
de recuerdos,
encadenen mi soñar,
pero el viajero que huye,
tarde o temprano detiene su andar
mas el olvido que todo destruye,
haya matado mi vieja ilusión,
guardo escondida una esperanza humilde,
es toda la fortuna de mi corazón.​

Volver con la frente marchita​

las nieves del tiempo, platearon mi sien
sentir que es un soplo la vida,
que 20 años no es nada
que febril la mirada,
errante en la sombras
te busca y te nombra...
Vivir...
con el alma aferrada
a un dulce recuerdo
que lloro otra vez.

Alfredo Le Pera (Letra) / Carlos Gardel (música)
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