"… inmediatamente fui sobrecogido por algún poder que cayó totalmente sobre mí y tenía una extraña influencia sobre mí tal que trabó mi lengua como para que yo no pudiera hablar. Una oscuridad creció a mi alrededor; me pareció por un momento como que estuviera destinado a una inmediata destrucción."

 Joseph Smith 2:15
 fundador de la Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días 



"… una columna de luz exactamente sobre mi cabeza, encima de la luz brillante del Sol, la cual descendió gradualmente hasta que cayó sobre mí. Nada más al aparecer esto que yo me sentí liberado del enemigo que me mantenía atado. Cuando la luz se detuvo encima de mí, vi dos personajes, cuyo brillo y gloria desafiaban toda descripción, suspendidos en el aire por encima de mí. Uno de ellos habló dentro de mí, llamándome por mi nombre y dijo señalando al otro: ‘Éste es mi hijo amado. Escúchalo’."

Joseph Smith 2:16-17
 fundador de la Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días

"Descubrí una luz que aparecía en mi cuarto la cual aumentaba en intensidad hasta que el cuarto estaba más iluminado que un mediodía, cuando súbitamente apareció un personaje a mi lado, suspendido en el aire, porque sus pies no tocaban el piso. Él tenía una capa holgada de la más exquisita blancura, más allá de cualquier cosa que yo hubiese visto sobre la Tierra; yo no podía creer que existiese una cosa terrestre que estuviera hecha de tan excesiva blancura y brillantez."


Joseph Smith 2:30-31
 fundador de la Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días

"… Yo vi como la luz en el cuarto comenzó a disminuir inmediatamente alrededor del personaje que me había estado hablando, y así continuó hasta que el cuarto quedó otra vez oscuro, excepto alrededor suyo; cuando al instante vi como un conducto abierto directo en el cielo por donde subió hasta desaparecer totalmente…"

Joseph Smith 2:43
 fundador de la Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días


"Él comenzó y volvió a relatar las mismas cosas que había dicho en la primera visita, sin la menor variación después de hacerlo, me informó del gran juicio que le llegaría a la Tierra, con gran desolación, hambruna, pestilencia y espada; y que ese cruel juicio llegaría la Tierra en esta generación (la de Joseph). Habiendo relatado esas cosas, otra vez ascendió como lo había hecho antes."

Joseph Smith 2:45
 fundador de la Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días


"… en el tercer y cuarto año, en el primer mes, en el cuarto día del mes, allí surgió una gran tormenta, tal que, como nunca habíamos conocido sobre la Tierra. Y también había una grande y terrible tempestad (vientos violentos); y había truenos terribles, además de que esto hacía sacudir la tierra toda como si fuera a dividirse en pedazos. Y había relámpagos intensos y en exceso, tales como nunca se conocieron en la Tierra. Y también la ciudad de Zarahemla se incendió. Y la ciudad de Moroni se hundió en las profundidades del mar, y fueron arrastrados con ella todos sus habitantes. Y la Tierra se derrumbó sobre la ciudad de Moronihah que en el lugar de la ciudad se formó una gran montaña. Y había una terrible y gran destrucción en las tierras hacia el Sur. Pero he aquí, que había una más grande y terrible destrucción en las tierras hacia el Norte, porque he aquí, que la faz de la Tierra fue cambiada totalmente, porque debido a la tempestad y el remolino y los truenos, y a los relámpagos, y a la enorme cantidad de terremotos en toda la Tierra, los caminos se rompieron y los pasos a nivel se estropearon y muchos lugares apacibles y llanos se convirtieron en abruptos. Y muchas de las grandes y notorias ciudades fueron hundidas y muchas fueron quemadas, y muchas fueron sacudidas hasta que los edificios se caían a tierra; y los habitantes de éstas morían y los lugares quedaban desolados. Y había algunas ciudades que resistían, pero el daño en ellas era demasiado grande y había muchas de ellas que perecían. Y había algunas ciudades que resistían, pero el daño en ellas era demasiado grande y había muchas de ellas que perecían. Y había algunas que eran arrastradas por el viento y llevadas a una condición no conocida por el hombre, salvo que ellos se daban cuenta de que estaban siendo arrastrados. Y así la faz de la totalidad de la Tierra fue deformada como consecuencia de la tempestad y de los truenos y relámpagos y de los movimientos de la tierra. Y he aquí que las rocas fueron desgarradas en pedazos; ellas fueron rotas sobre toda la faz de la Tierra, a tal grado que ellas se encontraban en fragmentos rotos y en grietas por toda la faz de la Tierra. Y pasó todo esto, cuando las explosiones y los relámpagos, la tempestad y los movimientos sísmicos terminaron; porque ellos se prolongaron por espacio de tres horas; y algunos dijeron que el tiempo fue mayor; no obstante, todas esas grandes y terribles cosas fueron hechas en el lapsos de tres horas y algunos dijeron que el tiempo fue mayor; no obstante, todas esas grandes y terribles cosas fueron hechas en el lapso de tres horas y entonces, he aquí que apareció una oscuridad por toda la faz de la Tierra. Y sucedió que había una espesa oscuridad por toda la faz de la Tierra a tal grado que los habitantes de ésta que no habían muerto sentían el vapor en la oscuridad. Y ahí no había luz debido a la oscuridad, ni velas, ni antorchas, ni podía haber fuego encendido con buena y abundante madera seca, así que no podía haber ninguna luz en absoluto. Y no había ninguna luz a la vida, ni fuego, ni luz tenue, ni el Sol, ni la Luna, ni las estrellas, por ser tan grande la niebla de la oscuridad, la cual estaba sobre la faz de la Tierra. Y llegó a pasar que esto terminó por espacio de tres días que no había visto luz; y hubo un amanecer y aullidos y llanto entre toda la gente continuamente; sí, grande era el gemido de la gente debido a la oscuridad y a la gran destrucción que había caído sobre ellos." 

 Libro del Mormón
3 NEPHI 8 : 5-23


"Porque el hombre es espíritu. Los elementos son eternos y el espíritu y el elemento, inseparablemente conectado, recibe una plenitud de júbilo y cuando se separan, el hombre no puede recibir la plenitud de júbilo."

 Libro del Mormón
 LECTURAS Y CONVENIOS 93 : 33 – 34