"Del mismo modo que el hierro es atraído hacia la piedra imán, pero con frecuencia es repelido en sentido contrario, el saludable y racional movimiento del mundo en ocasiones atrae, concilia y aplaca ese implacable poder; luego, cuando este último se ha recuperado, derriba al otro y lo reduce a la impotencia…"

Manetón
Citado en el libro de Graham Hancock, Las huellas de los dioses, página 583



"Están ahí, pero no existen."

Manetón


"Las maravillas que Moisés narra cómo habiendo tenido lugar en el Monte Sinaí, —aquella montaña sobre la cual Jehovah se dice que entregó a Moisés muchos de los mandamientos—, son en parte una narración velada de la iniciación egipcia, la cual Moisés transmitió a su pueblo cuando estableció una rama de la Hermandad egipcia en su país.“

Manetón
Tomado del libro de William Bramley Los Dioses del Edén, página 75




"Moisés, un hijo de la tribu de Levi (una de las tribus hebrea), educado en Egipto e iniciado en Heliópolis (una ciudad egipcia), fue un Gran Sacerdote de la Hermandad bajo el reino del faraón Amenhotep (Akhnaton). Fue elegido por los hebreos como su jefe y adoptó las ideas de su pueblo, la ciencia y la filosofía que había obtenido en los misterios egipcios. Prueba de esto son encontradas en los símbolos, en las iniciaciones y en sus preceptos y mandamientos… El dogma de “un solo dios” que él enseñaba era la interpretación de la Hermandad egipcia y las enseñanzas del faraón, quien estableció la primera religión monoteísta conocida por el hombre."

Manetón
Tomado del libro de William Bramley Los Dioses del Edén, página 72