"Tú y yo debemos aprender
en esas largas noches que siguen a los días,
que no son todo campanas replicando a fiesta,
que hay que abrir los dedos, cual sarmientos secos y buscar,
hasta en el sufrimiento, los tesoros que encierran nuestras arcas.
Y así, tal vez, el horizonte se abrirá sin mares,
sin montañas, sin abismos y hasta sin oro y sin plata.
Y solo quedará un trabajo,
un esfuerzo para encontrar en tu huerto...
las raíces que puedan unirte al Universo."

Luis Garrido