"A veces llego demasiado pronto, me adelanto. Y hay gente que se aferra a la vida más de lo esperado."

Markus Zusak



"Antes, las palabras la habían hecho sentirse como una inútil, pero ahora, cuando se sentaba en el suelo junto a la mujer del alcalde, experimentaba una innata sensación de poder. Ocurría cada vez que descifraba una nueva palabra o construía una frase. Era una niña. En la Alemania nazi. Qué apropiado que descubriera el poder de las palabras."

Markus Zusak


"Buscaría los lugares en que nuestros caminos se habían cruzado y me maravillaría todo lo que la niña había visto y cómo había conseguido sobrevivir."

Markus Zusak



"¿Cómo le regalas a alguien un pedazo de cielo?"

Markus Zusak





"Compartimos una última sonrisa y me alejo. Noto sus ojos clavados en mí, pero no miro atrás."

Markus Zusak



"Créeme, el mundo es una fábrica. El sol lo remueve, los humanos lo gobiernan y yo soy la que persevera. Me los llevo."

Markus Zusak





"Cuando empezó a escribir su historia, se preguntó por el momento exacto en que los libros y las palabras no sólo comenzaron a tener algún significado, sino que lo significaban todo."

Markus Zusak



"De regreso a casa, con los neumáticos desandando el camino, de vez en cuando me volvía hacia el asiento del copiloto. Estaba lleno de vacío."

Markus Zusak



"De verdad, puedo ser alegre. Amable, agradable, afable... Y eso sólo son las palabras que empiezan por "a". Pero no me pidas que sea simpática, la simpatía no va conmigo."

Markus Zusak


"¿Dónde has estado todo este tiempo? -Su voz es angustiada pero dulce-. ¿Dónde has estado? Tengo algo atascado en la garganta. Son las palabras. Finalmente las reconozco y digo: -he estado buscándote."

Markus Zusak


"Dos palabras gigantescas: "lo siento"."

Markus Zusak



"El bostezo de una chica puede ser tan bello que estremezca. Sobre todo si está de pie en tu cocina, en bragas y camisa."

Markus Zusak





"En realidad, no importaba de qué tratara el libro, lo importante era lo que significaba."

Markus Zusak



"En ti hay belleza -le digo-. Lo sabes, ¿verdad?"

Markus Zusak



"Era mágico, era hermoso, era como si todo estuviera iluminado por deslumbrantes rayos de luz reflejados por una lámpara de araña."

Markus Zusak



"Era una niña con una montaña por escalar."

Markus Zusak





"Es curioso lo silencioso que parece todo cuando miras a la gente desde lejos. Es como ver una película muda. Imaginas lo que dicen. Observas cómo se mueven sus labios e imaginas el sonido de sus pies al chocar con el suelo. Te preguntas de qué están hablando y hasta qué están pensando."

Markus Zusak



"Esa noche en el trabajo, ocurre. Encuentro las piedras de casa. O para ser sincero... ellas me encuentran a mí."

Markus Zusak


"Ese instante se dilató hasta el infinito. La eternidad de unas décimas de segundo en que se toma una decisión."

Markus Zusak





"Estaba a punto de irme cuando la vi allí, arrodillada. A su alrededor, se había escrito, proyectado y erigido una montaña de escombros. Se aferraba a un libro."

Markus Zusak





"Estaba claro que la guerra confundía los límites entre la lógica y la superstición."

Markus Zusak



"Ha dejado que la ame durante tres minutos. "¿Pueden tres minutos durar eternamente?", Me pregunto pese a conocer la respuesta. "Probablemente no -contesto-. Pero tal vez duren lo suficiente"."

Markus Zusak



"¿Hay algo peor que un chico que te odie? Un chico que te quiera."

Markus Zusak



"He odiado las palabras y las he amado, y espero haber estado a su altura."

Markus Zusak



"Intento deducir qué está pasando y quién me ha enviado por correo lo que podría ser un pedazo de destino."

Markus Zusak



"La agridulce sensación de la incertidumbre: ganar o perder."

Markus Zusak



"La calle es un horror y siempre ha sido célebre por ello. Un lugar de tejas rotas, ventanas rotas y gente rota."

Markus Zusak



"-La carpeta -digo. Me levanto y entro rápidamente en la sala. Con la carpeta sobre las rodillas, la reviso, hurgo y escudriño entre las hojas sueltas. - ¿Qué haces? -Pregunta Audrey. Ha entrado y se detiene detrás de mí. Me vuelvo y la miro. -Estoy buscando esto -le digo señalándonos a los dos con la mano-. Nos estoy buscando a ti y a mí juntos. Audrey se arrodilla a mi lado y posa su mano en la mía para hacerme soltar las hojas. -No creo que esté ahí -me dice con dulzura-. Yo creo, Ed... -posa las manos suavemente sobre mi cara. La luz anaranjada del atardecer la baña-. Creo que esto nos pertenece a nosotros."

Markus Zusak





"La luna se desgaja de las nubes y de pronto me siento desnudo, como si el mundo pudiera verme."

Markus Zusak



"La noche está iluminada de estrellas y cuando me tiendo y contemplo el cielo, me pierdo en él. Tengo la sensación de caer pero hacia arriba, hacia el abismo celestial."

Markus Zusak



"Las bombas cayeron, y las nubes no tardarían en arder ni las frías gotas de lluvia en convertirse en cenizas. Nevarían abrasadores copos de nieve."

Markus Zusak





"Las chicas bonitas pueden matar y salir impunes."

Markus Zusak



"Le preparo cereales y empieza a comer. No he tenido que preguntarle si quería. Hay cosas que, simplemente, uno sabe."

Markus Zusak



"Lo que más me gusta es pasear con las manos en los bolsillos, tener a Doorman a un lado e imaginar que tengo a Audrey al otro. Siempre nos imagino vistos por detrás. La luz se atenúa hasta dar paso a la oscuridad. Está Audrey. Está Doorman. Estoy yo. Y sostengo los dedos de Audrey en los míos."

Markus Zusak



"Lo único que hago es caer de rodillas, derribado por unas palabras capaces de asestar un golpe fulminante."

Markus Zusak


"Me siento fatal porque no tengo ningún regalo para ella. -Discúlpame... -empiezo a decir, pero me silencia enseguida con un gesto de la mano. -El hecho de que hayas venido a buscarme es suficiente regalo."

Markus Zusak





"Mi vida no es una partida de cartas."

Markus Zusak



"No es gran cosa, pero supongo que es cierto eso de que las grandes cosas no son más que pequeñas cosas en las que uno se fija."

Markus Zusak


"No puedes quedarte ahí sentado esperando que el nuevo mundo se adapte a ti, eres tú el que tiene que adaptarse...A pesar de los errores pasados."

Markus Zusak





"Ojalá pudiera usar este cuchillo para abrir el mundo de un tajo."

Markus Zusak



"Personalmente, pienso que el sexo debería ser como las matemáticas. A nadie le importa ser un desastre en matemáticas. La gente incluso alardea de ello. Va por ahí diciendo: "ciencias e inglés no se me dan mal, pero soy un auténtico negado para las matemáticas". Otros se ríen y dicen: "yo también. No tengo ni idea de qué va toda esa mierda de los logaritmos". Tendríamos que poder decir eso mismo con respecto al sexo."

Markus Zusak




"Pienso que vive sola, como yo, que nunca ha tenido una familia de verdad y que con los hombres sólo tiene sexo. Nunca deja que el amor se interponga en su camino. Creo que en una ocasión tuvo una familia, pero de esas donde todo son gritos y guantazos. Hay mucho de eso por aquí. Creo que ella los quería y ellos sólo le hacían daño. Por eso se resiste a amar. Supongo que se siente más segura así, y no puedo reprochárselo. Mientras ella duerme en mi sofá reflexiono sobre todo eso. En cada ocasión. La tapo con la manta y después me voy a la cama y sueño. Con los ojos abiertos."

Markus Zusak


"Por favor, a pesar de las amenazas anteriores, conserva la calma.
Sólo soy una fanfarrona.
No soy violenta.
No soy perversa.
Soy lo que tiene que ser.
Sí, era blanco.
Daba la impresión de que todo el planeta se había vestido de nieve, que se la hubiera puesto como tú te pones un jersey. Las pisadas junto a las vías del tren se hundían hasta la rodilla. Los árboles estaban cubiertos con mantos de hielo.
Como debes de imaginar, alguien había muerto.
No podían dejarlo tirado en el suelo. Por el momento no era un gran problema, pero la vía pronto quedaría despejada y el tren tenía que continuar la marcha.
Había dos guardias.
Había una madre con su hija.
Un cadáver.
La madre, la niña y el cadáver estaban quietos y en silencio.
—¿Y qué quieres que haga?
Uno de los guardias era alto y el otro bajo. El alto siempre hablaba primero, aunque no era el jefe. Miró al bajo y rechoncho, de cara rubicunda.
—No podemos dejarlos así, ¿no crees? —respondió.
El alto estaba perdiendo la paciencia.
—¿Por qué no?
El más bajito estuvo a punto de estallar.
—Spinnst du?! ¡¿Eres tonto o qué?! —gritó a la altura de la barbilla del alto. La repugnancia le inflaba las mejillas, la piel se le tensaba—. Vamos —ordenó, avanzando con dificultad por la nieve—. Si hace falta, cargamos a los tres. Ya informaremos en la siguiente parada.
En cuanto a mí, ya había cometido el más elemental de los errores. No encuentro palabras para describir cuánto me enfadé conmigo misma. Hasta ese momento lo había hecho todo bien. Había estudiado el cielo cegador, blanco como la nieve, al otro lado de la ventanilla del tren en movimiento. Prácticamente lo había inhalado, pero aun así vacilé, me dejé doblegar: la niña llamó mi atención. La curiosidad pudo conmigo y, resignada, me quedé el tiempo que me permitió mi apretada agenda, y observé.
Veintitrés minutos después, cuando el tren ya se había detenido, bajé con ellos.
Llevaba en brazos una pequeña alma.
Me quedé un poco apartada, a la derecha.
El eficiente dúo de los guardias se volvió hacia la madre, la niña y el pequeño cadáver. Recuerdo con claridad que ese día podía oír mi respiración, alta y fuerte. Me sorprende que los guardias no advirtieran mi presencia al pasar a su lado. El mundo se estaba hundiendo bajo el peso de la nieve.
La pálida y famélica niña estaba a unos diez metros a mi izquierda, aterida.
Le castañeteaban los dientes.
Tenía los brazos cruzados y congelados.
Las lágrimas se habían helado sobre el rostro de la ladrona de libros."

Markus Zusak
La ladrona de libros



" "¿Por qué no puede oírlo el resto del mundo?" -Me pregunto. En pocos segundos me lo pregunto muchas veces-. Porque no le importa -me respondo al fin, y sé que estoy en lo cierto. Tengo la sensación de haber sido elegido-. Pero ¿Elegido para qué? -Me pregunto. La respuesta es simple: "para que me importe"."

Markus Zusak



"Por un momento tengo la sensación de que todo se detiene para observar cómo introduzco la mano en el sobre y saco un naipe viejo. El as de diamantes."

Markus Zusak


"Primero los colores. Luego los humanos. Así es como acostumbro a ver las cosas. O, al menos, así intento verlas."

Markus Zusak


"Reímos y corremos y el momento es tan denso que me dan ganas de zambullirme en él, de dejarme llevar. Me encanta la risa de esta noche. Nuestros pies corren y no quiero que se detengan. Quiero correr y reír y sentirme así eternamente. Nos sumergimos en la risa de la noche."

Markus Zusak



"Si su madre la quería, ¿Por qué la había abandonado en la puerta de unos desconocidos? ¿Por qué?"

Markus Zusak



"Todas son un intento, un extraordinario intento de demostrarme que vosotros, y la existencia humana, valéis la pena."

Markus Zusak


"Todo el mundo sabe que una bola de nieve en la cara es el comienzo perfecto de una amistad duradera."

Markus Zusak


"Un mar de almas. ¿Fue el destino? ¿La mala suerte? ¿Eso los dejó pegados al suelo? Por supuesto que no. No seamos estúpidos. Seguramente las bombas, arrojadas por humanos escondidos entre las nubes, tuvieron algo que ver."

Markus Zusak