"Con el fin de inducir el proceso de descomposición, el agua es necesaria. Creo que, en el caso de las mujeres, los hombres son el agua."

Natsuo Kirino


"Cuando despertó al atardecer, Masako se sentía un poco triste. El hecho de que con la llegada del otoño anocheciera antes era bastante deprimente. Sin moverse de la cama, observó cómo el sol desaparecía paulatinamente para dar paso a la oscuridad. En esos momentos, trabajar en el turno de noche se le antojaba insoportable. No era de extrañar que muchas de las mujeres en su misma tesitura acabaran neuróticas. Con todo, lo que las llevaba a la depresión no era tanto la oscuridad como la sensación de vivir con el paso cambiado, de ir siempre a contracorriente."

Natsuo Kirino



"Las gentes de una isla pueden ser apacibles y sin embargo, en la isla de enfrente, tener fama de agresivos. Dos islas pueden ser muy dispares a pesar de que sólo las separe un pequeño trayecto en barca. Por eso creo que, al igual que los humanos, cada isla tiene su propia personalidad."

Natsuo Kirino



"Los amigos son una cosa extraña. Parece que ellos saben todo acerca de ti, pero entonces no te entienden en absoluto."

Natsuo Kirino


"Masako estaba preparada para recibir el impacto, pero al ver el cadáver se mantuvo sorprendentemente serena. Quizá porque no había visto nunca antes a Kenji, su cadáver no le pareció más que el cuerpo inerte de un hombre con un rostro ridículamente relajado. Sin embargo, aún no había logrado hacerse a la idea de que Yayoi, a quien siempre había considerado una madre y esposa modélica, había asesinado a su marido."

Natsuo Kirino



"No se trata de ninguna venganza. Debes saber que los vivos no pueden entrar en el Mundo de Ultratumba. Ahora eres un hombre, y has quebrantado la ley. No has cambiado, sigues siendo un egoísta. Sólo piensas en ti, sin que apenas te importe perturbar el orden de otros mundos. Y yo, como diosa, he decidido castigarte a ti, un hombre."

Natsuo Kirino


"(...) No tenía a nadie que la ayudara. Lo único que la mantenía en pie era su amor propio. Hacía tiempo que había decidido ocultar sus sentimientos en lo más profundo de su corazón y había hecho de la diligencia su única obsesión. Su truco para salir adelante no era otro que apartar los ojos de la realidad."

Natsuo Kirino



"Pulsó con fuerza el botón del ascensor. Compraría un billete de avión. La libertad que buscaba era suya y sólo suya, (...), y estaba convencida de que la encontraría. Si se le cerraba una puerta, encontraría otra que poder abrir. El ascensor gemía como el viento mientras se dirigía a su encuentro."

Natsuo Kirino



" "Quiero irme a casa", pensó al percibir el olor. Sin embargo, no sabía a qué casa quería irse. Por supuesto, no se refería a la que acababa de dejar. ¿Por qué no quería volver ahí? ¿Adónde quería ir? Se sentía completamente perdida."

Natsuo Kirino



"-Quizá no quieras oírme, pero vas a hacerlo. ¿Me entiendes? Yo cogí los trozos de tu marido y los metí en varias bolsas. ¿Sabes lo asqueroso que ha sido? ¿Lo sabes? -Sí, lo sé...-No, tú no sabes nada -le espetó cogiéndole el otro brazo. - ¡Basta! -gritó Yayoi, pero Kuniko la agarró aún con más fuerza. -Sabes lo que hicieron con él, ¿Verdad? Lo descuartizaron. ¿Sabes lo que significa eso? ¿Lo que costó hacerlo? Tú no las has visto en plena faena. Pero yo sí. Vomité varias veces. Era asqueroso. Apestaba. Era horrible. Nunca podré volver a ser la misma."

Natsuo Kirino





"Tenía una depresión auto inducida. Bienvenido a mi mundo real."

Natsuo Kirino


"Una mujer que no se conoce a sí misma no tiene más remedio que vivir con las evaluaciones de otras personas. Pero nadie puede adaptarse perfectamente a la opinión pública. Y aquí radica la fuente de su destrucción."

Natsuo Kirino