"¿Catedral? Era lo más cerca que podía llegar a caracterizar el lugar, que notó que no era de este mundo. Sus techos abovedados estaban increíblemente altos, los pasadizos también abovedados que corrían entre sus aposentos eran innumerables. Le llevaría años explorarlos todos, y no quería otra cosa. Ni comida, ni bebida, ni amor o cualquier otro placer del que hubiera disfrutado en toda su vida. En cada nuevo aposento quedaba desgarrado entre el deseo de quedarse donde estaba, fijando cada detalle en su memoria, y el impulso incluso más fuerte de seguir, rápidamente, de una maravillosa impresión a la siguiente, para descubrir dónde llevaba cada pasadizo nuevo, para trazar un mapa de la catedral entera, si algo tan enorme se podía cartografiar. Aunque era un edificio sólo, tenía el tamaño de una ciudad, de veinte ciudades. Uno se podría pasar la vida yendo de una sala a otra, y quizá no volver nunca más a aquella en la que estaba ahora."

Richard Russo


"Conocer y saber qué hacer al respecto son dos cosas diferentes."

Richard Russo


"¿Cuántos años tiene? - Treinta y cuatro -confesé. - Claro -dijo ella-. ¿Cómo podría escribir sobre la segunda guerra mundial? - En realidad, mi padre intervino en la invasión de Normandía -dije, sin saber si mi comentario la aplacaría o la irritaría aún más. No hacía ninguna falta que me condenara por mis presuntos escritos sobre una guerra que ella consideraba suya, pero dudaba de que me creyera si se lo decía. De todos modos sospecharía que lo hacía a escondidas. - Entonces debería usted escuchar a su padre -me aconsejó-. A lo mejor aprende algo. - Estoy seguro -le dije-. Pero nunca habla de la guerra. - ¿Por qué iba a hacerlo? -Preguntó la buena mujer-. Los que la vieron, los que la hicieron, no son charlatanes. Los charlatanes son los otros. Su insinuación era clara. Yo era un charlatán."

Richard Russo


"(...) El Sam hall del que ella se había enamorado sólo estaba ligeramente basado en una persona real. La guerra, su separación, había permitido a mi madre una especie de licencia poética respecto a mi padre. Si él no hubiera vuelto a casa, habría seguido siendo el gran amor de su vida."

Richard Russo




"(...) En cómo quería que le explicara por qué unas personas tenían que pagar en la pasarela mientras otras la cruzaban gratis. Así son las cosas, contestó él; Con bastante crueldad, le pareció ahora. Y no sólo fue cruel. Fue falso. Porque al final todo el mundo paga."

Richard Russo



"Era difícil imaginarlo enamorado. Sabía que él y mi madre debieron de sentir pasión alguna vez, pues era lo que suponía el amor, pero di las gracias porque con el tiempo aquel enloquecimiento se convirtiera en algo más parecido a la amistad, o a una relación de negocios, algo de lo que yo mismo podía formar parte integral. Incluso ver a mi padre recordando la pasión resultaba desconcertante."

Richard Russo




"Es posible pasar por alto los defectos de carácter de los suegros, por la sencilla razón de que usted no se siente ni responsable de los mismos ni implicado genéticamente."

Richard Russo


"Hay muchos pecados en el mundo, ninguno de ellos el original."

Richard Russo




"La gente a veces cae en el hábito de ser leal a un error."

Richard Russo



"La hermana Ursula pertenecía a una orden casi extinta de monjas belgas que administraban sus ya escasos asuntos espirituales en una mansión decrépita adquirida por la diócesis aparentemente porque no parecía que fuese a durar más que ellas.
(…)
Cuando Linwood Hart se durmió, lo hizo agradecido y a la vez triste al saber que no era, que no había sido nunca y no sería jamás, el centro de este mundo tan distinto que acababa de descubrir."

Richard Russo
La hija de la puta



"La línea de gris del horizonte ahora es más luminosa, y con la llegada de la luz tengo una seguridad: que sólo hay, a pesar de nuestra imaginación desbocada, una vida. Las demás, por reales que parezcan, por mucho que las necesitemos, son fantasmas. La única vida que nos queda es suficiente para llenar y rellenar de alegría nuestros corazones imperfectos, y luego hacerlos añicos. Y eso nunca, nunca cesa."

Richard Russo


"Lo más molesto era la crueldad de mi memoria perversamente selectiva. ¿Qué sentido tenía que recordara cada gesto y cada ademán del padre de la chica a la que yo amaba, cuando el rostro de ella se volvía cada día más impreciso? No importaba."

Richard Russo


"Los dos sabemos lo que es la buena vida, Sam -dijo Jack Ward en tono confidencial-. La buena vida consiste en que no te disparen. Dinero. Todo lo demás. Todo lo bonito que quieras. Y no despertarte en el bosque Hürtgen, con hemorroides y sin sentirte los pies. Eso es la buena vida."

Richard Russo


"Mi madre había comentado en más de una ocasión que mi padre era una de las víctimas de la guerra, que el Sam hall que volvió de Europa no era el mismo que se había marchado, aquel del que ella se había enamorado. No me cabía ninguna duda de que ella creía aquella verdad tan simple, o incluso de que aquello fuera verdad, hasta cierto punto. Pero era una agradable manera de ignorar otra simple verdad: que la gente cambia, con o sin guerras, y que a veces no conocemos a la gente tan bien como creemos, que los peores errores de juicio suelen ser resultado de imaginar que entendemos lo que no entendemos en absoluto."

Richard Russo



"Miles lo recordaba, sí, aunque había ocurrido hacía más de veinte años. Durante mucho tiempo había servido para estimular una vivida fantasía adolescente en la que Miles, a la sazón pinche y lavaplatos, salía por detrás con una bolsa de basura para el contenedor, interrumpiendo el intento de violación y ahuyentando heroicamente al agresor de Charlene, que además empuñaba un cuchillo. En realidad, el agresor no llevaba ningún arma, pero Miles le había proporcionado una para dar dramatismo a la situación. Ya entonces se había dado cuenta de que su fantasía no era del todo inocente, ni decente siquiera, pese a su estructura moral y su heroico desenlace. Recordaba con gran exactitud el momento en que había descubierto la pelea. Miles no llegó antes de que el agresor hubiera hecho progresos significativos, suficientes, por ejemplo, para exponer los blancos senos de Charlene. Si Miles se hubiera topado con semejante escena en la parte de atrás del Empire Grill, lógicamente, no hubiera podido ver nada en la negrura, pero su imaginación había dotado a la escena de la luz indispensable para sus propósitos. La primera vez que tuvo aquella fantasía, apenas veía un instante el torso desnudo de Charlene, pero en sucesivas representaciones se había demorado en aquella imagen hasta que, asqueado, renunciaba por completo al guion, consciente de que aun cuando se hubiera adjudicado el papel de galán, de hecho se había identificado con el agresor de Charlene, compartiendo el desconsuelo de aquél por saber que ninguna chica tan guapa se le entregaría jamás voluntariamente."

Richard Russo
Empire Falls



"No hace mucho, continuaba Sarah, Lou me preguntó si yo creía que había torcido mi auténtico destino al casarme con él. Le dije la verdad, que le quería y no tenía que lamentar nada de nuestra vida juntos. Pero ¿Decimos alguna vez "la verdad, toda la verdad y nada más que la verdad, y que dios me ayude", como decía mi padre, a los que queremos... ¿Y a nosotros mismos? ¿La mejor y más afortunada de las vidas no insinúa otras posibilidades, un diferente tipo de cariño y, sí, también amargura? ¿No es por eso por lo que no podemos evitar sentirnos estafados, incluso cuando sabemos que no lo hemos sido?"

Richard Russo


"¿No podría ser que lo que nos da de comer sea precisamente lo mismo que nos envenena? ¿Quién ha considerado esa terrible posibilidad?"

Richard Russo




"-No tiene sentido -dijo Lou el grande, haciendo que a Noonan se le encogiese el corazón, porque siempre decía eso cuando algo era horrible, o injusto, o inesperado, algo que no se adaptaba a su esquema de las cosas ni se ajustaba a cómo creía él que debería funcionar el mundo."

Richard Russo


"Notó que Joy le agarraba la mano por debajo de la mesa, puede que compadeciendo que tuviera que habérselas entendido con su madre, pero más probablemente porque Laura y Andy se habían unido a los demás en la pista de baile, donde parecían lo que eran, dos jóvenes que esperaron lo que parecía una eternidad para encontrarse el uno al otro. Ahora bailaban muy unidos al darse cuenta de la suerte que tenían, pues en otro guion igual de plausible no se habrían conocido, todavía estarían solos, todavía estarían buscando. Era difícil apartar la vista de ellos, y para Griffin el placer de mirarlos habría sido perfecto y suficiente del todo si Sunny no hubiera estado también en su campo de visión. Trató de no mirarle, al menos no directamente, intentando no pensar en él como en el chico que estaba solo en aquella fiesta de cumpleaños de hacía tanto, haciendo como que no estaba solo. Pero por algún motivo eso abrió la puerta a otro pensamiento desagradable sin ninguna relación. ¿Era posible que su madre tuviera razón, que a Peter Browning lo hubieran matado en Vietnam? Griffin notó algo parecido al pánico ante esa posibilidad, una sensación física al fondo de la garganta. Pero en realidad, era muy poco probable, se dijo. Era hijo de dos profesores, habría ido a la universidad y conseguido una prórroga por estudios, como el propio Griffin. Para cuando a él se le acabó la prórroga, la guerra había terminado, y habría pasado lo mismo con Peter. Su madre había sonado segura por teléfono, pero siempre sonaba así, y nunca más que cuando estaba completamente equivocada. Si mañana le preguntara alguien cuál era el nombre del hijo de los Browning, respondería que Steven, y estaría segura también de eso. ¿Era posible que recordara que había pasado levantada toda la noche en aquella casa tratando de consolarle? ¿Cuándo había hecho ella algo así? Y era indudable que aquella noche no fueron al Blue Martini. Lo que recordaba su madre era que ese sitio era al que tenían pensado ir ella y su padre antes de que él les estropeara las cosas. Aunque lo del asma de la hermana de Peter sonaba a cierto, y supuso que podría haber muerto. Pero ¿le había escrito de verdad Peter como aseguraba su madre? Eso era lo que ahora le pasaba a ella con todos sus recuerdos. Conservaba los detalles suficientes para hacerte dudar de tus propios recuerdos, pero al final sus historias nunca encajaban. Se parecían al relato del alumno que todavía no había leído, y del que ahora había perdido unas páginas.
Cuando el pinchadiscos pasó sin transición de la primera pieza lenta a una canción ensordecedora de Bon Jovi, las lesbianas, soltando alaridos de risa, como si aquello fuera el mejor chiste de todos, saltaron de sus sillas y se fueron dando saltos, con los brazos girando, a la pista de baile."

Richard Russo
El verano mágico en Cape Cod


"Pasión e independencia, parecía estar diciendo, estaban bien, sin duda, pero en definitiva necesitaban un apoyo. Al final dependían del compañerismo, amistad, sacrificio, compromiso."

Richard Russo




"¿Por qué se me venía el suelo encima? No había duda de que se trataba del suelo, especialmente después de mi segunda y desesperada embestida, que esta vez inicié con los brazos extendidos ante mí, hasta que mis manos dieron contra una sólida pared de denso barro. En aquel momento me pareció que sólo había una cosa absolutamente cierta: que estaba a punto de morir. Sin saber."

Richard Russo



"Su sinceridad cuidadosamente calculada es casi indistinguible de la cosa real."

Richard Russo


"¿Te has fijado alguna vez en que cuando la gente usa la expresión "tengo que decir", normalmente lo que sigue no es necesario decirlo?"

Richard Russo


"Y así empezó la última etapa de mi infancia en mohawk. Más adelante, de adulto, volví de vez en cuando. Pero como visitante, y nunca más como verdadero residente. Aunque tampoco fijé mi residencia en ningún otro sitio, sino que me uní a la multitud de americanos errantes, muchos de los cuales tienen un mohawk en su pasado, cuyo recuerdo los impulsa hacia no saben muy bien dónde, mientras sea lejos. Regresan, pero sólo para tomar impulso hacia su próximo destino, cada vez más lejano, aunque ya no queda elasticidad, nada que los atraiga al hogar."

Richard Russo