"¿Cree que algún día habrá gays en el ejército? -Creo que ya los hay. Siempre los ha habido. En la Segunda Guerra Mundial, los aliados tenían catorce millones de hombres uniformados. Según cualquier probabilidad razonable, al menos un millón eran gays. Y por lo que recuerdo, la última vez que hojeé los libros de historia vi que aquella guerra la ganamos. A lo grande."

Lee Child seudónimo de Jim Grant

"(...) Creía que la ingeniería inversa era aplicable a todo. Si un grupo de humanos ensamblaba algo, otro grupo de humanos podía desmontarlo. Era un principio básico. Todo lo que se requería era empatía, reflexión e imaginación."

Lee Child


"¿Cuál es el mejor sitio para esconder un automóvil? El aparcamiento de larga estancia de un aeropuerto. Del mismo modo que una playa es el mejor lugar donde esconder un grano de arena."

Lee Child



"Cualquier estructura con un sistema de rangos tienta a uno a ascender por ella."

Lee Child




"Cuando se dice que una persona ha dormido como un bebé. ¿Quieren decir que la persona ha dormido bien? ¿O que se ha estado despertando cada diez minutos, berreando?"

Lee Child


"El análisis. La larga experiencia me había enseñado a evaluar y analizar las cosas. Cuando a uno se le viene encima lo inesperado, no conviene perder el tiempo. No hay que pararse a pensar cómo o por qué ha sucedido algo así. No hay que perder el tiempo en recriminaciones. Ni esforzarse en dar con el culpable. Ni pensar cómo vas a evitar caer en la misma trampa en el futuro. Todo eso viene después. Si sobrevives. Lo primero es analizar la situación. Identificar las posibilidades negativas. Evaluar los aspectos positivos. Trazar un adecuado plan de acción. Si haces todo esto, tienes más probabilidades de vivir para contarla y pasar a lo que viene después."

Lee Child

"El autoerotismo no es exclusivo de los homosexuales. Desde el punto de vista fisiológico todos los hombres tienen los mismos orgasmos, sean o no gays."

Lee Child


"El noventa por ciento de la tarea de formular preguntas consiste en atender a las respuestas."

Lee Child


"(...) En realidad me estás haciendo otra pregunta -prosiguió ella-. Me estás preguntando: ¿Cómo puedes abandonarnos? Me estás preguntando: ¿Ya no te preocupan nuestras cosas? ¿No quieres saber cómo nos va la vida? ¿Ya no tienes interés en nosotros?"

Lee Child


"En un mapa de Estados Unidos la ciudad parecía pequeña. Era solo un punto diminuto y amable, cerca de una carretera roja semejante a un hilo que atravesaba un centímetro de papel por lo demás vacío. Pero de cerca y sobre el terreno tenía medio millón de habitantes. Cubría más de doscientos cincuenta kilómetros cuadrados. Tenía cerca de ciento cincuenta mil hogares. Tenía más de ochocientas hectáreas de zonas verdes. El ayuntamiento se gastaba quinientos mil millones de dólares por año, y recaudaba casi la misma cantidad mediante impuestos y cobros y facturas. Era lo suficientemente grande como para que el departamento de policía tuviera mil doscientos efectivos.
Y era lo suficientemente grande como para que el crimen organizado estuviera dividido en dos caminos divergentes. El oeste de la ciudad lo controlaban ucranianos. El este lo controlaban albaneses. La línea de demarcación estaba tan manipulada como la de un distrito electoral. Nominalmente seguía la calle Center, que iba de norte a sur y dividía la ciudad por la mitad, pero hacía zigzag y entraba y salía para incluir o excluir bloques específicos y partes de vecindarios específicos, allá donde se sintiera que precedentes históricos justificaban circunstancias especiales. Las negociaciones habían sido tensas. Había habido guerras territoriales menores. Había habido algunas situaciones desagradables. Pero finalmente se había llegado a un acuerdo. El arreglo parecía funcionar. Cada lado se mantenía fuera del camino del otro. Durante mucho tiempo no había habido un contacto significativo entre ellos.
Hasta una mañana de mayo. El jefe ucraniano aparcó en un garaje sobre la calle Center y caminó hacia el este dentro del territorio albanés. Solo. Tenía cincuenta años y su porte era como el de una estatua de bronce de un viejo héroe, alto, duro y sólido. Se llamaba a sí mismo Gregory, que era a lo más cerca que los americanos podían llegar de la pronunciación de su nombre de pila. Iba desarmado, y para demostrarlo llevaba puestos unos pantalones ajustados y una camiseta ajustada. Nada en los bolsillos. Nada escondido."

Lee Child
Luna Azul


"(...) Esto era como el 13 de julio de 1943, el día crucial de la batalla de Kursk. Nosotros éramos como Alexander Vasilevsky, el general soviético. Si atacábamos ahora, en este preciso instante, deberíamos seguir adelante hasta que el enemigo pusiera pies en polvorosa y perdiese así la guerra. Si nos quedábamos atascados, nos superarían otra vez."

Lee Child




"(...) La ciudad en pleno tumulto. A Reacher le gustaba Nueva York más que la mayoría de lugares. Le agradaba su indiferencia desenfadada, las prisas frenéticas y el absoluto anonimato."

Lee Child


"La gente se gasta miles de dólares en equipos de sonido de alta fidelidad, decenas de miles a veces. En Estados Unidos hay una industria especializada en fabricar equipos de sonido de una calidad asombrosa. Amplificadores de válvulas que cuestan más que una vivienda. Altavoces más altos que yo. Cables más gruesos que una manguera de jardín. En el ejército había tipos que tenían cosas así. Una maravilla. Pero estaban tirando el dinero. Porque el mejor equipo de sonido que hay en el mundo te sale gratis. Es el que tienes en la cabeza. Y suena todo lo bien que tú quieras que suene. Al volumen que tú quieras."

Lee Child


"La necesidad que tienen los hermanos Reacher de la cafeína convierte la adicción a la heroína en una entretenida actividad banal de tómalo o déjalo."

Lee Child


"(...) Le gustaba la presión. Le gustaban las fechas límite. Le gustaba tener un marco temporal breve y limitado para resolver un problema. Le gustaba trabajar en un lugar tranquilo y le gustaba trabajar junto a una cabeza pensante."

Lee Child

"Los aviones y los helicópteros son muy chulos, pero no ganan nada ellos solos. Nunca lo han hecho y nunca lo harán. Se gana pisando el terreno. Sonreí. En parte eso respondía al orgullo de la Infantería de combate, pero también era verdad en parte."

Lee Child


"Los planes nunca funcionan como uno ha previsto. Siempre se van a pique en cuanto se dispara el primer tiro."

Lee Child


"Los que llevan gafas tienen un aspecto distinto sin ellas, más despistado, más vulnerable. Como si de pronto estuvieran al descubierto."



Lee Child




"Los tíos de Operaciones Especiales solían ser pequeños: esbeltos, rápidos y flexibles. De constitución resistente y vigorosa, llenos de astucia e ingenio. Como zorros, no como osos."

Lee Child


"Me enseñaron que las inhibiciones podían matarme. Golpea el primero y golpea con fuerza. Que el primer golpe sea mortal. Sé el primero en vengarte. Miente y engaña. Los caballeros decentes no estaban adiestrando a nadie porque llevaban tiempo muertos y enterrados."

Lee Child


"Me he pasado trece años trabajando, y no me ha servido de nada. Intenté hacerlo todo tal como ellos querían, pero ahora por mí pueden irse al infierno. Ahora voy a intentar hacer las cosas a mi manera."

Lee Child


"Me sentí como un hombre que despierta solo en una isla desierta y descubre que el resto del mundo se ha escabullido por la noche en unos botes. Me sentí como si estuviera en la orilla, contemplando en el horizonte pequeñas formas alejándose. Y como si hubiera estado hablando mi lengua de siempre y ahora me diera cuenta de que los demás habían utilizado una lengua completamente distinta. El mundo estaba cambiando. Y yo no quería eso."

Lee Child


"No estaba sorprendido. La sorpresa era estrictamente de aficionados y Reacher era un profesional. Tampoco estaba preocupado. Había aprendido, hacía mucho tiempo, que el único modo de controlar el miedo y el pánico era concentrarse en el trabajo."

Lee Child


"No hay motivos para buscar complicaciones. Si oyes un galope, buscas caballos, no cebras."

Lee Child


"No queda mucho de lo que hablar. Lo que ve es lo que hay."

Lee Child

"No soy más que un viejo, pero los viejos nos acordamos muy bien de ciertas cosas. Puede que no nos acordemos de algo que pasó ayer, pero nos acordamos muy bien de todo lo que sucedió mucho tiempo atrás. La memoria es como un viejo cubo, no sé si me explico. Una vez que está lleno de viejos recuerdos, no hay manera de meter dentro los recuerdos recientes. Imposible. Por eso no me acuerdo de lo que hice esta mañana, porque tengo el cubo a rebosar de viejos recuerdos de hace mucho tiempo."

Lee Child


"No soy un vagabundo, soy un trotamundos. Es distinto."

Lee Child


"Nunca había creído en la suerte. Nunca había tenido razones para creer en ella. Nunca había confiado en ella, porque nunca había tenido ocasión de hacerlo. Pero la suerte ahora me acompañaba por completo."

Lee Child


"Otra cosa que recordaba de las clases de química tenía que ver con la presión. La presión transforma el carbón en diamante. La presión ejerce unos efectos precisos. Y ahora estaba ejerciendo su efecto sobre mí. (...) Tenía que decidir qué haría con esa presión. Tenía que decidir si iba a aplastarme y hundirme o si iba a convertirme en un diamante."

Lee Child



"Tengo que elegir los encargos con mucho cuidado, lo que en cierto modo es una pesadez, pero también un placer, pues la elección es muy gratificante. Son decisiones mías y sólo mías."

Lee Child


"Un soldado sabe que un punto de observación satisfactorio proporciona una vista sin obstrucciones al frente y una adecuada seguridad en los flancos y la retaguardia. Sabe que le protege de los elementos y le oculta de los observadores. Sabe que ofrece garantías razonables de ocupación sin incidentes durante la duración completa de la operación."

Lee Child


"Uno cree que se ha visto con la mierda al cuello antes, hasta que descubre que no tenía ni idea de lo profunda que la mierda puede llegar a ser."

Lee Child