"Amo mi país, lo amo, es mi país... Aquí quería vivir para siempre, y entonces me fui, así pasan las cosas, amas y aún así te vas. Iba a dejar para siempre a mi madre. Eso es un dolor. Un dolor terrible irse y tu madre atrás."

Arnaldo Calveyra

"Aquí están los amigos de la vida, aquí están los muertos de uno. Están enterrados acá, no son muchos, pero cuando alguien querido está enterrado en un sitio, ahí estás tú también de alguna manera buscando la forma de estar con ellos... Y no, no hay reposo de ser argentino. Estás lejos y estás acá, eso es así, querido."

Arnaldo Calveyra


Caminaba el hombre

Caminaba el hombre
llevado por su estrella,
no diferente al yuyo
que al agacharse
toca con la mano

hombre
atendido por su estrella,
forma dulce de tierra
por cuestas de retama

de loma en loma
hablado por los pájaros

herido por cinco pies de
tierra

como las nubes errantes
busca arroyos
donde aliviarse,
reflejarse

y la vara de nardo
de la luz
que lo conversa

brillante de verde
de hondonada

olías a
lentamente tierra,
la tierra curva
de Entre Ríos

llegada de su noche
una lumbre siempre pronta
que lo entibia

el hombre, el doble de su estrella
atraído por su sol

¿dónde los cinco pies
de tierra
que lo exaltan
en la voz de la calandria?

creencia dulce de senderos.

Arnaldo Calveyra


"¿Cuánto perdura una imagen en el agua?"

Arnaldo Calveyra


"Deja abierto tu poema siempre acudirá una trompeta."



Arnaldo Calveyra


"¿Empezaste a ser palabras de tu río?"

Arnaldo Calveyra


"En el ferry fue tan lindo mirar el agua. ¿Y sabes? No supe que estaba triste hasta que me pidieron que cantara."

Arnaldo Calveyra


"Entre Ríos es mi fuente de inspiración, es un lugar geográficamente privilegiado. Estas tierras fueron el fondo de un mar, no sé en qué época el mar, retirándose, dejó este paisaje, estos ríos extraordinariamente bellos (...) Nací entonces, en el campo y cuando era chico pensaba que jamás iba a dejare ese lugar. Pero a los nueve años tuve que pasar de la escuela de campo a una escuela en el pueblo, a siete kilómetros de allí, y esta es una cesura en mi vida, porque yo no creía que se pudiera dejar, si quiera por cuatro horas, ese paraíso en que vivía."

Arnaldo Calveyra


"Hay una repetición en la muerte. También la casa, cuando todos ellos estaban en la tierra, permanecía abierta, y con los días festivos hasta el humo de la chimenea despachaba limpieza. Ahora que la muerte recata la puerta y la entreabre sólo, todos duermen la siesta campesina."

Arnaldo Calveyra


Instantes de un castillo de arena

"Lo teníamos con una mano. Sin caer superficie apagada por las
orillas tornasoleadas de la lengua. Por hablarnos casi, murallita
entretenida en el sol demasiado. Te abriré una puerta, una ventana,
una bajamar de aldea.

El mar, la carretera nacional. Ni parada ni tiesa. A tocar con
estos ojos.

En vano unos niños se lo han pedido al mar. Entra, se instala.
Napoleón paralítico que destroza. Canta. La sal, el torreón, la
bandera.

Escúchalo.
Nosotros.

Una niñita basta, consigue atravesarlo, encuentra las cocinas.

Cantamos una marsellesa en el desastre. No lo para. Se cae en
pedazos el puente levadizo.

Difícil tiempo.

Encuentro aquel esqueleto del sol extraviado en los años.

No, no volveremos.

El agua vertical de la ola color viento. Lejos, ¿por qué no todo
el mar?

Una escoba siete mares, el mar.

La bandera era lo que más queríamos, lo que más nos gustaba,
la bandera incolor en la luz.

Mañana por la mañana.

Arnaldo Calveyra




"Los únicos escritos capaces de abarcar sin pérdida alguna la palabra ciudad y la palabra campo, esas guías que se escriben con el propósito de permanecer atentos a ladridos."

Arnaldo Calveyra


"Me fui de Entre Ríos gracias a mi madre; era pobre, inventaba la plata, mandaba el cheque, los huevos de gallina en cajas de madera. Ella vivía en el campo, mi padre era campesino, ella era maestra. Una maestra en el campo, ¿imagina esa experiencia? Éramos doce, murieron dos, quedamos siete chicos y dos chicas."

Arnaldo Calveyra


"Morir será encender una lámpara en la casa desconocida."

Arnaldo Calveyra


"No hay una alegría que dure, en el caso de un trabajo así, de un trabajo, de cualquier trabajo. Porque siempre hay que ir a otra parte. Hay que vestirse de nuevo para salir de viaje. (...) A la excelencia hay que ir y golpearle la puerta, es un trabajo de todos los días."

Arnaldo Calveyra




"No me has encontrado, me anduve empapando de rocío. Temprano irisado. Iba cantando, iba contándome, iba abriendo maizales con el canto al canto. Los perros lo toreaban a Dios de tan visible."

Arnaldo Calveyra




"¡No queda nadie en casa! ¡No duermas más, despierta, el agua no tiene imágenes, los caballos no imaginan!"

Arnaldo Calveyra


"Palabras a no dudarlo, palabras, no otra cosa. Palabras en lugares, las mismas en diferentes textos, palabras vueltas del revés desde la primera letra. A punto de poema. Halladas en ocasiones, en lindes de un olvido, en manos aún torpes de aprendices de sol y de sombra, ¿Poesía qué, cuándo, poesía cómo? Acentos tales. Palabras que quieren decirnos algo oculto desde siempre por las parcas de los sueños, escondido entre los pliegues."

Arnaldo Calveyra


"(Sobre Argentina) Es que este país está preso. Preso por la gente mediocre. La gente mediocre ha tomado el poder. Un país mediocre que tiene cinco o seis poetas. Eso, querido, es así. Es un misterio por qué ha sido poseído por la mediocridad. La gente es simpática, viene a la feria, va a escuchar poesía, necesita una valencia, están enfermos de carencia... Pero de pronto tienen en la cabeza como una revelación perversa y entienden que no se puede gobernar sin robar... Preso, un país preso por eso."

Arnaldo Calveyra


"(Sobre Julio Cortázar) Me piden que haga un análisis intelectual de aquel hombre. No puedo. Era un verdadero amigo, jamás hubo una cosa fuera de lugar. Todo perfecto. Un amigo: más que eso y nada menos que eso."

Arnaldo Calveyra




"Sobre nuestro país se podría escribir un cuento, una de esas "féeries" a las que tan aficionados somos. Su protagonista: un gigante sin nombre que mantuviera presa a la doncella..."

Arnaldo Calveyra


"Un gorrión confunde el vidrio de la ventana con mi alma."

Arnaldo Calveyra


"Y ahora que ya es de noche, estoy contento de parecerme al mar, y caigo también sobre la hoja con este hermoso destino de continuar ese mar y este viento y tocar el poblado allá en la guardia inquietada de los álamos."

Arnaldo Calveyra