"Comenzaba a comprender que en la observación paciente de los seres radica la sabiduría respecto a ellos. Tarde o temprano la verdad asoma tras sus gestos, sus miradas, o simplemente tras los hechos que cometen cuando se creen solos, a salvo de los demás."

 Cristina López Barrio




"Como Clara era analfabeta, cada dos o tres meses recibía cartas del hacendado andaluz, que en vez de párrafos de amor, llevaban papeles empapados en aceite de oliva secados al sol y flores de azahar y jazmines envueltos con papel de seda. Ella le contestaba con hojas duras de encina, corteza de sus troncos, pétalos de rosa amarilla, agujas de pino y mechones de pelo con aroma de hechizo, en unos sobres de color azul, cuyo remite rellenaba con una caligrafía de terremoto."

 Cristina López Barrio




"De todas formas, compartían para siempre un solo corazón, que les proporcionaría la dicha o la desgracia. Eran cautivos de su condena. Pasará el tiempo que pasase, permanecieran juntos o no, se hallaban unidos por el placer y el dolor de pertenecerse, de no ser dueños de sus voluntad."

 Cristina López Barrio



"De una mujer con el don de la muerte nacerá una niña con el don de la vida. Ella abrirá las puertas del presente eterno cuando sean a un tiempo las cuatro estaciones del mundo, y en sus manos florecerá el medicamento celeste."

 Cristina López Barrio




"Durante el proceso de creación escribo para mí y para mis personajes, así ellos pueden vivir en plenitud."

 Cristina López Barrio




"El anhelo de libertad agudiza el ingenio."

 Cristina López Barrio




"El aprendizaje del dolor es un arte que nunca se olvida: marca el corazón como herrero con el fuego de su fragua, y el hierro que un día quemó toda bondad deja serpiente en cicatriz negruzca."

 Cristina López Barrio



"El destino juega con la vida de los hombres, los separa para reunirlos de nuevo cuando se le antoja y en el lugar más insospechado."

 Cristina López Barrio


"El diluvio había convertido la rosaleda en un cementerio multicolor."

 Cristina López Barrio



"En su familia los hombres se morían centenarios, pero no de viejos sino de aburrimiento."

 Cristina López Barrio



"Érase una vez quien no quería ser, esa soy yo: Aurora. Qué horror de nombre tengo, parece el de la princesa de un cuento de hadas.
Esta tarde ha desaparecido mi hermana Clara. Han encontrado abierta la puerta del torreón, como la otra vez, y un trozo de cinta roja enganchado en la valla. Todo ha ocurrido igual que hace doce años, solo que en esta ocasión no ha desaparecido mi hermana gemela. Nacimos el 5 de junio de 2003 en este mismo pueblo; dicen que mamá casi se desangra en el jardín, la encontraron desmayada entre las rosas. Muy de mamá, nada de desmayarse en un sitio vulgar. En el reparto de nombres, y solo en esto, mi hermana tuvo más suerte: Alba, la llamaron. Aurora y Alba.
Mi padre me contaba que Alba y yo llegamos a este mundo cuando aún no es de día, pero ya ha comenzado a irse la noche, lo que se llama amanecer, para no ponerme rebuscada, la noche se muere al tiempo que nace el día, eso es. Quizá en ese instante quedó escrito el destino de mi hermana y el mío. Una debía caminar hacia la oscuridad, otra hacia la luz. Cuando me asalta esta idea siento
que mi corazón se pone blando y se estira, como si fuera chicle, por todas las partes de mi cuerpo. Tengo el corazón en la cabeza, en la punta de los dedos, en los tobillos. Lo siento palpitar mientras desea algo que no sucede. Quizá en esta ocasión sea diferente y Clara no corra la misma suerte que Alba y aparezca.
Hace unas horas que ya es de noche. Por la ventana de mi dormitorio, donde estoy encerrada por orden de mamá, no sea que yo también me evapore, distingo el triángulo de la sombra del bosque. Tengo el corazón en la pantorrilla derecha. La izquierda está sepultada en una escayola desde hace meses, no puedo curarme. Para detener los latidos enciendo mi cámara de vídeo, una vieja Panasonic que perteneció a mi padre: ON. Voy a ser directora de cine. Cuando miro a través de ella todo es perfecto como en las películas de Tim Burton. Desde que murió papá la vida me resulta bastante rara sin la cámara. En el porche descubro a mi madre y a Ricardo. Me gusta observarlos en la pantalla, atrapados en los límites del encuadre. Aquí están más vivos y dicen quiénes son. A la cámara no le puedes mentir. Ella fuma, aunque lo había dejado; él gesticula con las manos, se las lleva a la cabeza, luego la señala con el dedo. No puedo oírlos, pero imagino lo que mamá le dice, o lo que me gustaría que le dijera: «Nunca quise regresar a esta casa y me obligaste, me obligaste y ahora ha vuelto a suceder…»."

Cristina López Barrio
Rómpete, corazón




"Escribo porque la literatura, como toda pasión, es adictiva, y no sabría vivir sin ella."

 Cristina López Barrio




"Ese mar no creció. Tampoco crecieron los marineros, pero sí lo hizo Manuela al calor de los cuentos, con la imaginación llena de espuma y de olas, de gaviotas y acantilados que los montes y encinares nunca supieron comprender."

 Cristina López Barrio




"La belleza es objeto de mayores tragedias que la fealdad."

 Cristina López Barrio




"La codicia de los hombres, señorías, es como un velo que ciega sus conciencias."

 Cristina López Barrio


"Las noches alumbradas por la chimenea y el sabor de los cuentos."

 Cristina López Barrio




"Las ramas de las madreselvas que descansaban dócilmente unas sobre otras parecían guardar una ausencia, parecían esperar un regreso que las secaba y las hacía florecer de nuevo. Vivían y morían esperándolo, una y otra vez, en una condena perpetua en un círculo de nieve, hojas secas y lamentos solares."

 Cristina López Barrio




"Lo más importante para sobrevivir es querer hacerlo. La pasión por la vida esconde unos misterios que sólo Dios conoce."

 Cristina López Barrio


"Mi receta mágica es el trabajo, el esfuerzo, éste abre las puertas de la imaginación y la historia con sus personajes cobra vida."

 Cristina López Barrio


"No se puede renegar del destino que nos está dado."

 Cristina López Barrio




"Pocas veces el hombre tolera lo que no entiende, así que lo destruye."

 Cristina López Barrio




"¿Por qué la curiosidad lleva al hombre tanto a la gloria como a la perdición?"

 Cristina López Barrio




"Siempre quise escribir. Yo no sabía si iba a poder publicar o no, pero lo que sí sabía era que primero no podía vivir sin leer y segundo, sin escribir."

 Cristina López Barrio




"Soy de la opinión que un escritor refleja en sus textos aquello que lee, y que nos gusta, claro. Todo lo que me ha marcado y me ha hecho disfrutar está ahí, el poso como lector se refleja en el escritor."

 Cristina López Barrio




"Toda sabiduría tiene un precio... Y tarde o temprano hay que pagarlo."

 Cristina López Barrio


"Tomó mi mano entre las suyas y las besó. Me estremecí al sentir de nuevo el peso de sus labios. Echó a andar callejón abajo. Contemplé su figura hasta que se deshizo entre las sombras. Entonces comencé a llorar, mientras el perfume de los dondiegos me envenenaba el pecho para siempre."

 Cristina López Barrio




"Uno no debería matarse por amor, sino sufrir por él. Eso es mucho más valiente."

 Cristina López Barrio