"¿Ahora qué? ¿Qué sucede cuando las palabras fracasan?"

Nick Hornby
Cómo ser buenos



“Cuando empecé mi carrera yo era un “escritor de futbol”, eso es lo que la gente opinaba de mí porque “Fever Pitch” era sobre futbol. Entonces escribí “High Fidelity” y me convertí en un “escritor musical de futbol”. Si pones algo más en la mezcla, como que los lectores se van confundiendo.”

Nick Hornby


"Echó a caminar por Holloway Road mientras todos los del colegio estaban..., en realidad era la hora del almuerzo, pero no pensaba volver. Pronto iría caminando por Holloway Road (o no, porque Holloway Road estaba a punto de terminarse, y el almuerzo todavía iba a durar una media hora más) durante la clase de historia, y en ese momento sí sería un alumno que faltaba a clase sin autorización. Se preguntó si todos los malos alumnos, los que faltan a clase porque sí, empezarían del mismo modo; se preguntó si habría siempre una señora Morrison que les hinchase las narices y casi los obligase a marcharse. Supuso que sí. Siempre había supuesto que los malos alumnos, los que faltaban a clase sin justificación, pertenecían a una categoría de personas que nada tenía que ver con él, como si todos ellos fuesen malos de nacimiento, pero estaba claro que se equivocaba. Él asistía a clase, escuchaba lo que los demás quisieran decir, hacía los deberes, tomaba parte en los ejercicios. Al cabo de seis meses, todo eso había cambiado poco a poco y por completo.
Se dio cuenta de que probablemente así fuesen también los vagabundos. Una noche salían de casa y se les ocurría dormir a la entrada de una tienda; la primera vez que esto ocurría, algo cambiaba en ellos y se convertían en vagabundos, en vez de ser personas que no tenían dónde dormir. ¡Y lo mismo pasaría con los delincuentes! ¡Y con los drogadictos! Y... Decidió dejar de pensar en ello. Si seguía por ese camino, empezaría a parecer que su vida había cambiado desde el instante mismo en que se había largado del despacho de la señora Morrison, y no sabía si estaba preparado para eso. No era una persona que quisiera convertirse en un mal alumno, un vagabundo, un asesino o un drogadicto. Sólo era alguien enojado con la señora Morrison. Tenía que haber cierta diferencia.
A Will le encantaba conducir por Londres. Le encantaba el tráfico, pues le permitía creer que era un hombre con prisas y le ofrecía insólitas ocasiones de sentir frustración e ira (los demás hacían determinadas cosas para desahogarse; a Will le costaba trabajo sentir ese mismo ahogo); le encantaba saber por dónde iba, le maravillaba verse engullido por el flujo vital de la ciudad. Para conducir por Londres no hace falta ni familia ni trabajo: hace falta un coche, y Will tenía un coche. A veces salía a conducir sólo por pasar el rato, y otras para oír música a un volumen que no habría sido posible en su piso sin suscitar un furioso golpe en la pared o en el techo, o un timbrazo.
En esta ocasión se había convencido de que tenía que llegar hasta Waitrose; si hubiese sido sincero consigo mismo, habría reconocido que la verdadera razón de ese viaje era que deseaba cantar «Nevermind» a pleno pulmón, lo cual era impensable en su casa. Le encantaba Nirvana, aunque eso a su edad no dejaba de constituir una especie de placer culpable. ¡Cuánta rabia, cuánto dolor, cuánto odio hacia uno mismo! Will a veces se cabreaba un poco, pero no podía fingir que era algo más que un simple cabreo pasajero. Por eso utilizaba la fuerza y la ira del rock como sustituto de los auténticos sentimientos y no como medio de expresión de los mismos. Y no le importaba demasiado. ¿De qué servían, además, los auténticos sentimientos?
La cinta acababa de dar la vuelta cuando vio a Marcus caminando por Upper Street. No lo veía desde el día de las deportivas, y tampoco había tenido especiales ganas de hacerlo, pero de pronto sintió una oleada de afecto hacia él. Marcus estaba tan encerrado en sí mismo, era tan ajeno a todos y a todo, que ese afecto quizás fuese la única respuesta posible ante su ser: el chico parecía de algún modo no pedir lo que se dice nada, y al mismo tiempo parecía necesitar lo que se dice todo.
El afecto que experimentó Will no fue tan agudo como para detener el coche ni tocar el claxon; había descubierto que era mucho más fácil mantener el afecto hacia Marcus sujetándolo en corto, tanto en sentido metafórico como literal. Pero tuvo gracia encontrárselo de paseo por la calle, a plena luz del día. Algo le fastidiaba. ¿Por qué tenía tanta gracia? Pues porque Will nunca había visto a Marcus a plena luz del día, sino en la penumbra tenebrosa de una tarde invernal. ¿Y por qué lo había visto solamente en la semioscuridad de una tarde invernal? Porque Marcus sólo lo visitaba después del colegio."

Nick Hornby
Un gran chico



“El rock siempre fue muy importante para mí desde la adolescencia, y aunque a veces mi relación con la música es menos intensa, siempre está presente.”

Nick Hornby




“Esta idea de que la ‘Literatura’ puede sobrevivir de alguna manera sin los lectores contemporáneos es nueva, y mucho me temo, equivocada. Hay un tipo de escritura literaria especialmente aburrida que claramente se dirige a la posteridad y no me interesa leerla.”

Nick Hornby



“Los aficionados del Arsenal hoy están malcriados. Cuando comencé a ir al estadio no habíamos ganado nada en 17 años y luego no hubo nada entre 1971 y 79, y otra vez nada entre 1979 y 1987.”

Nick Hornby




“Me enamoré del futbol así como después me enamoré de las mujeres: de manera repentina, inexplicable y acrítica, sin pensar en el dolor o la perturbación que me traería.”

Nick Hornby



“Me parece obvio que la cultura popular es una parte importante de nuestras vidas y que debería verse reflejada en los libros que leemos. Nunca he entendido por qué los escritores no describen, o ni siquiera mencionan, los programas de TV que la gente está viendo. Siempre he tenido la sospecha de que tiene algo que ver con tener un ojo puesto en la posteridad.”

Nick Hornby



"Me preocupa la perspectiva de morir a mitad de temporada."

Nick Hornby
Fiebre en las gradas



“Mi definición personal de “arte” es que, si tu considera que es arte, entonces lo es. No creo que sea posible construir ninguna otra teoría que tenga sentido.”

Nick Hornby



“Mi inspiración literaria es la escritora norteamericana Anne Tyler. Pienso que es una gran escritora: escribe de manera simple, con humor y con alma.”

Nick Hornby



“Mis propios héroes y modelos literarios, la gente que hizo que quisiera escribir, fueron todos americanos: Tyler, Lorrie Moore, Tobias Wolff, Raymond Carver, Richard Ford, Phillip Roth…”

Nick Hornby



“Muchos novelistas intentan retratar personajes reales, pero se cruzan sus prejuicios y terminan con caricaturas. Limitan las opciones de sus protagonistas a cambio de bromas baratas. No sólo es empobrecedor para la ficción; también es mal periodismo.”

Nick Hornby


"Nada de esto conducía a nada, pero tampoco podía librarme de ello. Seguía y seguía en mí. Me sentía como uno de esos tipos que trabajan en los parques de atracciones: saltaba de un cubilete y me metía de un salto en el siguiente, hacía dar vueltas a la barraca y asustaba a todo el mundo (es decir, también a mí), y así sucesivamente. A la hora del almuerzo fui con unos compañeros de clase al local de fish and chips, pero no comí nada. No pude. Tuve la sensación de que no volvería a comer nada en toda mi vida. O hasta que hubiera nacido Pierre-Luc y Alicia hubiera dejado de hacer aquellos ruidos.
Al salir del colegio vi a Alicia en la acera de enfrente. Me empezó a entrar el mal genio al ver que no confiaba en mí, pero teniendo en cuenta que había desaparecido ya una vez no podía reprochárselo demasiado. Y además se la veía contenta de verme, y sonreía, y me acordé de por qué habíamos salido juntos. Pero aquello parecía ahora muy lejano. Ella parecía mucho mayor, para empezar. Mayor y más pálida. Estaba muy blanca.
[...]
Diréis que era mucho peor para ella que para mí. Yo estaba muerto de miedo, y ella también. Pero no podría decir que estuviera más asustado que ella. De hecho, teniendo en cuenta que yo tenía más miedo de decírselo a mi madre que a sus padres, entendía perfectamente que ella estuviera pasando un calvario ante lo que estábamos a punto de hacer. Y, por si fuera poco, tenía náuseas. Podríamos haber ido a Starbucks a tomarnos un frappuccino de caramelo, con nata encima, pero me daba cuenta de que si Alicia intentaba tomar uno le vendrían las arcadas en cuestión de segundos. Y cuando pensé en ello, a mí también se me quitaron las ganas de tomarme uno.
Fuimos en autobús hasta su casa, y nada más entrar subimos a su cuarto, porque no había nadie en casa. Se sentó en la butaca, y acabé sentándome entre sus pies. No había estado en su cuarto desde que estuve en el futuro, y en el futuro era diferente. (Suena extraño, ¿no? Decirlo así. Debería ser: «En el futuro será diferente», ¿no? Pero si lo digo así, significaría que lo que vi cuando fui proyectado era ciertamente el futuro, y no estoy ciento por ciento seguro de que eso sea cierto. Así que seguiré hablando del futuro como si fuera el pasado.) En fin, el póster de Donnie Darko que no estaba en el futuro volvía a estar allí, no lo habían quitado aún. Y me alegró verlo."

Nick Hornby
Todo por una chica


"Ningún hombre es una isla."

Nick Hornby


"No quería ir a casa de Maureen con Martin y Jess porque después de lo de la periodista necesitaba tiempo para pensar. Me habían hecho un par de entrevistas en el pasado, pero eran periodistas musicales fans del grupo, gente estupenda que conectaban totalmente contigo en cuanto les regalabas un CD-demo y les dejabas que te invitaran a una copa. Pero esa otra gente, como la periodista que había llamado a la puerta de mi casa y hablaba de «inspirar» a los lectores... Tío, de esa gente yo no sabía nada de nada. Lo único que sabía era que se habían enterado no sé cómo de mi dirección en veinticuatro horas, y que si eran capaces de hacer eso, ¿qué no iban a ser capaces de hacer? Era como si tuvieran el nombre y la dirección de todas y cada una de las personas que vivían en Gran Bretaña, por si acaso un día una de ellas hacía algo que pudiera interesar a los lectores.
En fin, me puso totalmente paranoico. Si quería, podía enterarse de lo del grupo en cinco minutos. Y entonces se pondría en contacto con Eddie, y con Lizzie, y entonces se enteraría de que no tenía ninguna enfermedad que me estuviera matando —o, en caso de tenerla, que no se lo había dicho a nadie—. Además, se enteraría de que la enfermedad que no me estaba matando era una enfermedad inexistente.
Dicho de otro modo, estaba tan escamado que me daba la impresión de estar metido en un buen lío. Cogí un autobús para ir a casa de Maureen, y en el trayecto decidí que iba a sincerarme con ellos, a decirles la verdad, y si no les gustaba que se fueran a la mierda. Pero no quería que acabaran leyéndolo en los periódicos.
Nos llevó un buen rato acostumbrarnos al sonido de la respiración del pobre Matty, que era alto y sonaba como si le costara un gran esfuerzo. Todos estábamos pensando lo mismo, creo: todos estábamos preguntándonos si habríamos aguantado, de haber estado en la piel de Maureen; todos intentábamos imaginar si hubiera habido algo capaz de convencernos de que bajáramos de aquella azotea."

Nick Hornby
En picado


“Para mi Elvis Presley es más grande como artista que Virginia Woolf, por todo tipo de razones, pero su habilidad para filosofar y dar una nueva forma al monólogo interno de cada uno no es una de esas razones. La cuestión es que ciertamente se necesita a ambos en la vida.”

Nick Hornby


“Quería escribir sobre cómo nuestro consumo de música ha cambiado en los últimos años, porque desde que se publicó “High Fidelity” todo ha cambiado.”

Nick Hornby


Sobre su novela Julieta, desnuda

Nick Hornby




“Ser fan tiene algo que ver con la fe. La estrella de rock está vista como un santo y lo que toca como una reliquia. Nick Cave hizo una lectura en una librería de Londres y los libreros le permitieron fumar en el interior. Cuando quisieron vaciar el cenicero, ¡no había más colillas! ¡Los fans se las habían llevado!”

Nick Hornby


“Si se sometiera a muchas de las novelas contemporáneas al alto grado de escrutinio por el que pasa un guión – a veces por parte de las personas equivocadas, financieros y productores que no sienten simpatía por el material – y si fueran lectores interesados quienes lo hicieran, esas novelas mejorarían enormemente.”

Nick Hornby



"Todo es complicado, incluso aquellas cosas que parecen sosas en su desolación o tristeza."

Nick Hornby


“¿Un día en la vida de Nick Hornby? Voy a mi oficina, un pequeño departamento justo a la vuelta de mi casa, dando rodeos. Fumo, navego en internet, mando correos electrónicos y, eventualmente, me pongo a escribir. Usualmente esto sucede cuando llega la hora de ir a recoger a mi hijo a la escuela.”

Nick Hornby