"Joven, joven, tu brazo es demasiado corto para boxear con Dios."

James Weldon Johnson



La creación

                                                   (Sermón Negro)
                                                            Y Dios salió al espacio, 
                                                            miró a su alrededor y dijo: 
                                                           Estoy solo 
                                                           Voy a hacer un mundo. 


"Y hasta donde el ojo de Dios podía ver
las tinieblas cubrían todas las cosas,
más negras que cien medias noches
allá abajo en un pantano de cipreses.

Entonces Dios sonrió
y la luz brotó
y las tinieblas se enrollaron por un lado,
y la luz quedó brillando por el otro lado,
y Dios dijo: Está muy bueno.

Entonces Dios alargó un brazo y tomó la luz con la mano,
y Dios le dio vueltas a la luz con las dos manos
hasta que hizo el sol,
y puso ese sol lanzando rayos en el cielo.
Y la luz que sobró después de hacer el sol
Dios la amasó en una bola brillante
y la arrojó a las tinieblas,
laminando el cielo con la luna y las estrellas.

Entonces allá abajo
entre las tinieblas y la luz
arrojó el mundo;
y Dios dijo: Está muy bueno.

Entonces el propio Dios vino bajando
Y el sol estaba en su mano derecha,
y la luna estaba en su mano izquierda;
y las estrellas en ronda alrededor de su cabeza,
y la tierra estaba debajo de sus pies.
Y Dios caminaba y donde quiera que pisaba
sus pisadas iban hundiendo los valles
y levantando las montañas.

Entonces Él se paró y miró y vio
y la tierra estaba caliente y vacía.
Y Dios caminó hasta el borde de la tierra
y escupió los siete mares;
y parpadeó y resplandeció el relámpago;
y golpeó las manos y retumbó el trueno
y las aguas cayeron encima de la tierra,
las refrescantes aguas cayeron.

Entonces la verde hierba brotó,
y las florcitas rojas florecieron,
el pino señaló al cielo con su dedo,
y el palo borracho abrió sus brazos,
los lagos se acurrucaron en los huecos de la tierra
y los ríos corrieron hasta el mar;

y Dios sonrió otra vez
y el arco iris apareció
y se le enrolló en los hombros.

Entonces Dios levantó el brazo y agitó su mano
sobre el mar y sobre la tierra
y dijo: ¡Produzcan! ¡Produzcan!
y antes que Dios bajara la mano,
peces y aves
y bestias y pájaros
nadaron en los ríos y en los mares,
vagaron en las selvas y en los bosques,
y rompieron el aire con sus alas.
Y Dios dijo: Está muy bueno.

Entonces Dios caminó alrededor,
y Dios miró alrededor
sobre todo lo que había hecho.
Miró su sol,
y miró su luna,
y miró sus estrellitas;
miró todo su mundo
con todas sus criaturas vivientes
y Dios dijo: Todavía estoy solo.

Entonces Dios se sentó
en el borde de un cerro donde podía pensar;
junto a un río ancho, profundo, se sentó;
con su cabeza entre las manos,

Dios pensó y pensó,
hasta que pensó: ¡Me voy a hacer un hombre!

Y de la ribera del río
Dios extrajo el barro
y en la orilla del río

Dios se puso de rodillas
y allí el gran Dios Todopoderoso,
el que encendió el sol y lo colgó en el cielo,
el que arrojó las estrellas hasta el último rincón de la noche,
el que redondeó la tierra en el hueco de sus manos
este gran Dios,
como una mamá agachada sobre su nene,
se arrodilló en el polvo
sudando sobre una pelota de barro
hasta que la formó a su propia imagen;
entonces le sopló el aliento de la vida,
y el hombre se volvió un alma viviente.

Amén. Amén."

James Weldon Johnson
Versión Lino Mondino



 Levanten todos la voz y canten

 Levanten todos la voz y canten
De la tierra hasta el anillo de los cielos,
Que repique con las armonías de la Libertad;
Que nuestra alegría se eleve
Tan alto que el cielo escuche,
Que resuene fuerte como el mar agitado.
Canta una canción llena de la fe que el oscuro pasado nos ha enseñado,
Canta una canción llena de la esperanza que el presente nos ha traído,
De cara al sol naciente de nuestro nuevo día, comenzó
Vamos a marchar hasta la victoria, está ganada.

El camino que recorrimos es pedregoso,
Amarga, la vara de castigo,
Experimentada en los días en que la esperanza no nació, había muerto;
Sin embargo, con un tiempo estable,
No tenemos los pies cansados
¿Vamos al lugar para que nuestros padres suspiren?
Hemos recorrido un camino final que con lágrimas ha sido regado,
Hemos venido pisando nuestro camino a través de la sangre de los sacrificados,
Salida desde el pasado sombrío,
Hasta ahora nos encontramos por fin
Cuando el destello blanco de nuestra estrella brillante está echado.

Dios de nuestros años cansados,
Dios de nuestras lágrimas silenciosas,
Tú, que nos has traído hasta aquí por el camino;
Tú, que nos tienes en Tu poder
Llevanos a la luz,
Mantennos siempre en el camino, te lo pedimos.
Para que nuestros pies extraviados de los lugares, de nuestro Dios, en los que te conocimos,
No sea que, con el corazón embriagado con el vino del mundo, Te olvidemos;
Bajo la sombra de tu mano,
Podemos soportar por siempre.
Fieles a nuestro Dios,
Fieles a nuestra tierra natal."


James Weldon Johnson



"Pensé en París como un lunar en la faz de la tierra, y de Londres como un gran peca."


James Weldon Johnson


Un soñador a mediodía

"Me encanta sentarme solo, y soñar,
Soñar y soñar;
En una barca de lujo que se desliza suavemente
A lo largo de algún riachuelo
Donde palacios de oro de hadas 
Y de cristal brillante
Erguidos a lo largo de la costa reluciente:
Una vista maravillosa.

Mi nave está construida de marfil,
Con los remos de plata,
Las velas tejidas en hilos de oro,
Y los pertrechos de incalculable valor
Piedras preciosas adornan su proa,
Y alrededor de su mástil
Cien cordones de seda se establecen
Para aferrarse.

Mis galeotes son alegres duendes
Quién, como ellos rema,
Y como los remos brillantes se balancean
De aquí para allá,
A la vez se mantenía la música flotando en
El aire perfumado,
Hecha por las sirenas como si se peinaran
Su cabello dorado.

Y mientras yo tendido ociosamente de espalda,
Sueño, y sueño,
Y dejan de remar donde será
El riachuelo responsable."


James Weldon Johnson