"El trabajo psicológico que se hace en los sueños es disfrazar esos impulsos para que no resulten inquietantes y evitar que el durmiente se despierte... En las pesadillas, el disfraz no es el apropiado; el material inquietante sobresale y la persona se despierta... Los sueños son útiles para la terapia, porque albergan las claves de los temas psicológicos y conflictos del pasado de una, persona."

Morton Reiser