"El problema bastante delicado del libre albedrío, esta embarazosa cuestión, difícil de delimitar y que ha desconcertado los pensadores occidentales, no parece haber rozado a los Sumerios. Convencidos de que no habían sido engendrados más que para servir de esclavos a los dioses, ellos se inclinaban delante de las voluntades de éstos, aún cuando resultaran inexplicables o injustificables. Los Sumerios constataban que la maldad, la bajeza, las calamidades y las penas de los Hombres habían sido introducidas en este bajo mundo por los dioses, pero no se interrogaban sobre el lado excéntrico o caprichoso de estos seres divinos. La dote del Hombre era la de sufrir… Tal Job cargado con un fardo inmerecido, el Sumerio estaba educado en la idea de que no debía quejarse, sublevarse ante infortunios incomprensibles; se tenía que persuadir que no era más que un ser depravado pues, según la palabra de un sabio: «Jamás mujer había parido un niño sin pecado original»…»(3) De hecho, la ideología contemporánea no ha cambiado mucho, si no es que los pueblos de la Tierra no sirven ya a “dioses”, sino a un sistema de desigualdad implacable edificado a partir de una religión monoteísta. En el seno mismo de los creacionistas cristianos, el discurso es a la vez seguro y constante: “La fe del cristiano no debe reposar en la ciencia. El testimonio de la Biblia es la verdadera base de la fe cristiana… La Biblia es un conjunto de libros; el rechazo de un elemento pone todo el conjunto en cuestión. O bien la Biblia es la palabra de Dios, verídica y digna de confianza en lo que concierne todos sus relatos, o bien ésta es solamente literatura pía. La Biblia ella misma, no deja ninguna duda sobre esta cuestión. El apóstol Pablo escribe que «toda escritura está inspirada por Dios y útil para enseñar, para convencer, para corregir, para instruir en la justicia»." 

Samuel Noah Kramer
Del libro El Secreto de las Estrellas Oscuras de Anton Parks, página 6
(2Tim. 3,16)


 "Primero, y el más importante, es el papel que desempeñé en la recuperación, restauración y resurrección de la literatura sumeria, o al menos de una sección representativa ... A través de mi esfuerzos, varios miles de tablillas y fragmentos literarios sumerios se han puesto a disposición de los cuneiformistas, un depósito básico de datos no adulterados que perdurarán durante muchas décadas. En segundo lugar, me esforcé ... para hacer disponibles traducciones razonablemente fiables de muchos de estos documentos a los comunidad académica, y especialmente al antropólogo, historiador y humanista. En tercer lugar, he ayudado a difundir el nombre de Sumeria al mundo en general y a concienciar a la gente del papel crucial que desempeñaron los sumerios en el ascenso del hombre civilizado."

Samuel Noah Kramer