"Para mí fue algo natural. De niña no me interesaban las mismas cosas que a las otras chicas: nunca encontré encanto alguno en las muñecas. No le veía sentido a abrazar trocitos de porcelana con rostros absurdos: lo que yo deseaba era una navaja, una barrena y trozos de madera. Me llamaban marimacho, pero no me importaba. A veces suspiraba, por no ser como las otras chicas, pero sabiamente llegué a la conclusión de que no lo podía evitar y busqué consuelo en mis herramientas. Siempre estaba haciendo cosas para mis hermanos. Era famosa por mis cometas; y mis trineos eran motivo de envidia y admiración para todos los chicos de la ciudad. No me sorprendí de lo que he hecho. Solo me apena no haber tenido oportunidades tan buenas como las de los chicos y no haber podido dedicarme a mis cosas con regularidad."

Margaret Eloise Knight


"No malgastes ni la cosa más pequeña creada, porque los granos de arena hacen montañas y los átomos el infinito."

Margaret E. Knight