"Un amante siempre muestra compasión ante las dificultades de los demás y en lugar de propagar cualquier falla que puedan tener, trata de cubrirlas. Además, tiene que tener estas cuatro cualidades: 
Primero: Actúa como si fuera sordo para no tener que escuchar nada que no sea apropiado.
Segundo: Su lengua se vuelve muda para abstenerse de hablar mal.
Tercero: Actúa como si fuera ciego para no observar las debilidades de los demás.
Cuarto: Actúa como si fuera inválido para no visitar ningún lugar que solo satisfaga sus bajos deseos."

Farīd al-Dīn Mas'ūd Ganj-i-Shakar, conocido reverentemente como Bābā Farīd o Shaikh Farīd 
Lo que contestó cuando le preguntaron una vez acerca de las características de un verdadero amante de Dios

No hay comentarios: