Balada para mí misma y mis amigas

fuimos
siempre jóvenes
fragantes
a veces hasta
rubias
hemos leído
armarios de libros
terminábamos escuelas
y nos preocupábamos
de la contracepción
por ese poco 
reconocimiento
siempre estuvimos 
en el lugar justo
exactamente a tiempo
amamos con entrega 
y dimos a luz calladamente
escuchamos con curiosidad
y con alegría 
lo entendimos todo
traduciendo de muchos idiomas
publicamos
libros
hicimos tartas mágicas 
presentábamos
a nuestra patria 
y tejíamos 
mejor que la araña
no exigíamos nada
nada nos fue 
demasiado grande
ni estrecho
y siempre 
sonreímos

pero
él no
nos 
quiso

Ana Horvat
Traducción: Željka Lovrenčić


No hay comentarios: