Parabolanoi

"Borinquen llama a sus hijos a la libertad."

Ramón Emeterio Betances y Alacán

"Como si pudiera ningún pueblo conquistar su libertad sin derrumbar palacios, sin quemar bohíos y sin derramar sangre."

Ramón Emeterio Betances y Alacán

“Cooperen los norteamericanos, en buena hora, a nuestra libertad; pero no ayude el país a la anexión.”

Ramón Emeterio Betances y Alacán

"Cuatro siglos de opresión y servidumbre no han abolido nuestro

derecho a ser libres."

Ramón Emeterio Betances y Alacán

“El pueblo que quiere libertades, las coge; y no las espera de nadie, de gracia y merced.”

Ramón Emeterio Betances y Alacán

"Es difícil que me engañen miserablemente porque yo no creo sino en lo que veo."

Ramón Emeterio Betances y Alacán

“Esos anexionistas caducos, ricos hombres (…) olvidándose de las generaciones futuras y sin pensar más, se echan a soñar que el manzano daría sabroso frutos en La Habana y la palma jugosos cocos en Washington, como si bajo climas para ellos mortales ambos árboles no estuvieran condenados a perecer.”

Ramón Emeterio Betances y Alacán

"He sido, soy y moriré separatista. Oiré siempre con júbilo el grito que lanzaron mis compañeros y que los ha de guiar por el camino del triunfo: iViva la revolución! iViva Borinquen libre e independiente!"

Ramón Emeterio Betances y Alacán

"Las Antillas atraviesan hoy por un momento que jamás han atravesado en la historia: se les plantea ahora la cuestión de ser o no ser. Rechazamos este dilema. Es este el instante preciso de obrar en una defensa unida. Unámonos los unos con los otros para nuestra propia conservación. Será en vano que un mandatario impío intente traficar con el país, como en Santo Domingo, sacrificando a sus conciudadanos; será inútil para España que trate de acabar con la insurrección de Cuba vendiendo la isla a los Estados Unidos y dar comienzo así a la absorción de todas las Antillas por la raza anglosajona. Unámonos. Amémonos. Formemos todos un pueblo de verdaderos masones, y entonces podremos elevar un templo sobre bases tan sólidas que todas las fuerzas de la raza sajona y la española reunidas no podrán sacudirlo; templo que dedicaremos a la independencia, y en cuyo frontispicio grabaremos. Grabaremos esta inscripción, imperecedera como la Patria, que nos dictan a la vez nuestro interés y nuestro corazón, la más generosa inteligencia y el más egoísta instinto de conservación: Las Antillas para los hijos de las Antillas."

Ramón Emeterio Betances y Alacán

Las Antillas para los antillanos

"Lo mismo da ser colonia española que colonia yanqui."

Ramón Emeterio Betances y Alacán

"Los hombres pasan pero los principios quedan y triunfan."

Ramón Emeterio Betances y Alacán

"Mándeme, pues, un himno que hará salir fusiles, nada más (no pido hombres) de la tierra, que arrastre las piedras y sople fuego sobre los déspotas."

Ramón Emeterio Betances y Alacán

"Mi patria es Puerto Rico, cuyo recuerdo me obsesiona."

Ramón Emeterio Betances y Alacán

"No estoy hecho para conformarme con la injusticia."

Ramón Emeterio Betances y Alacán

"Nuestros enemigos no son tan grandes, lo que sucede es que nosotros estamos de rodillas."

Ramón Emeterio Betances y Alacán

"Para la desgracia no hay lágrimas bastantes para llorar."

Ramón Emeterio Betances y Alacán

"Patria de nuevo encadenada, que pide la vida a nadie más que nosotros, y nos llama a la defensa de la inmortalidad que quieren quitarle."

Ramón Emeterio Betances y Alacán

Plegaria al sol

"¡Oh, sol, eterna luminaria,

riente en el nido y el portal

de los palacios, incendiaria

chispa que fulges inmortal!;

¡oh, tú el del fuego innumerable,

que brillas en el universo

y traspasas la sombra insalvable

dando luz al cautivo allí inmerso!;

que bendices, fecundas y puedes

despertar al arbusto dormido;

que de lo alto, en redes de oro,

tienes los mundos suspendidos.

Tu esplendor dulce y bienhechor

crea calor, dilata el día;

pero no tiene, yo diría,

la fuerza de un rayo de amor."

Ramón Emeterio Betances

Proclama: Diez Mandamientos de los Hombres Libres

Proclama de los Diez Mandamientos de los Hombres Libres

Puertorriqueños:

El gobierno de Da. Isabel II lanza sobre nosotros una terrible acusación.

Dice que somos malos españoles. El gobierno nos calumnia. Nosotros no queremos la separación; nosotros queremos la paz, la unión con España; más es justo que pongamos nosotros también condiciones en el contrato.

Son muy sencillas. Helas aquí:

1. Abolición de la esclavitud

2. Derecho a votar todas las imposiciones

3. Libertad de cultos

4. Libertad de la palabra

5. Libertad de imprenta

6. Libertad de comercio

7. Derecho de reunión

8. Derecho de poseer armas

9. Inviolabilidad del ciudadano

10. Derecho de elegir nuestras autoridades

Esos son los diez mandamientos de los hombres libres.  

Si España se siente capaz de darnos y nos da esos derechos y esas libertades, podrá entonces mandarnos un capitán general, un gobernador... de paja, que quemaremos en los días de Carnestolendas, en conmemoración de todos los Judas que hasta hoy nos han vendido. Y seremos españoles. Si no, ¡NO! Puertorriqueños -¡PACIENCIA!- os juro que seréis libres.

Ramón Emeterio Betances y Alacán

“Puerto Rico está en una borrachera completa. Allí están borrachos con las reformas que no les han dado (…) Es el espectáculo más raro y triste de todo un pueblo… celebrando las libertades que cree tener y no tiene (…) Tal vez el baile no dure mucho tiempo (…) Desde que vuelvan la vista hacia la orquesta, todos tienen que ver que no hay violines.”

Ramón Emeterio Betances y Alacán

"Puertorriqueños: ¡Basta de opresora tutela y de despotismo español! ¡A las armas!

La riqueza de nuestra isla, su población densa y valiente, la ilustración de sus hijos, sus relaciones con las dos Américas, todo os da el derecho de aspirar a la independencia.

De Méjico a Chile, toda la América ha arrojado de su seno a la España ignorante, terca y explotadora. Cuba, la isla heroica como la llama hoy el mundo entero, se liberta ya de oprobiosa dominación.

Cuatro siglos de obediencia pasiva y de humildes súplicas no han logrado convencer a los gobiernos metropolitanos de nuestro derecho de ser libres. La guerra sólo nos hará tales. 

¡A las armas!”

Ramón Emeterio Betances y Alacán

"¡Seamos la generación del sacrificio, y firmes y constantes en nuestros propósitos, para nosotros esperemos solamente la lucha nefanda, incansable, los dolores sin tregua, el destierro, el martirio, la muerte! Más para nuestros hijos; el hecho venturoso de su independencia indomable -legado nuestro-, la gloria inefable de no pertenecer al extranjero, de ser dueños de sí mismos, lo que es la felicidad suprema, inclinados ante el sólo imperio de la Justicia y bajo el cielo dulcísimo de la Patria Libre e Independiente." 

Ramón Emeterio Betances y Alacán

"Si hasta hoy he cumplido mi deber, sirviendo, como he podido, al País, no puedo dejar de cumplirlo en los últimos años de mi vida."

Ramón Emeterio Betances y Alacán

"Si yo fuera capaz de dar un paso atrás sería para quemarme los sesos con plomo y pólvora.”

Ramón Emeterio Betances y Alacán

"Sigo luchando como puedo por el camino de siempre, hasta que caiga rendido."

Ramón Emeterio Betances y Alacán

"Sin libertad no hay felicidad posible."

Ramón Emeterio Betances y Alacán

¿Te imaginas a Betances pensando que lo que hace es "poco"? Chequea lo que le dijo a Hostos: “Yo sé que lo que hacemos es poca cosa, pero siempre es algo. ¿Qué es lo que nos anima a trabajar? Más que todo el amor a nuestros pueblos, cuya civilización nos interesa; y aunque todo se olvide luego, esa será nuestra recompensa.”

Ramón Emeterio Betances

Carta a Hostos, 10 de noviembre de 1896

"Y cuando los soberanos dicen, para acallar sus remordimientos: ‘¡es una herencia!’, los pueblos responden: ‘cuando un padre lega en herencia un crimen a su hijo, el deber del hijo no es continuar el crimen, sino lavarlo’.”

Ramón Emeterio Betances y Alacán