Egoísmo
Me gustan las poesías que hablan del amor,
sin traumas, demostrando su auténtica belleza
donde los sentimientos se muestran con pureza,
amores juveniles, ingenuos, sin dolor.
Me gustan las pinturas suaves de color,
bucólicos paisajes velados de terneza
y música romántica que calme la fiereza
durmiendo los sentidos en clima acogedor.
Ya sé que es utopía, la vida nos presenta
traiciones, desengaños, crueldades por doquier,
amores desgraciados, enfermedad sin cuenta,
guerras y terrorismos. ¡Vaya usted a saber!
Quiero vivir tranquilo lejos de la tormenta,
de momentos amargos me quiero guarecer.
Marcos Andrés Minguell
Esperando la bendición
Semana Santa, noventa y nueve,
por la mañana del Viernes Santo
suben Los Soplas, la fe los mueve,
hacia el calvario, tambor al canto.
El sol calienta, mas todo es leve,
la espera larga, no importa cuanto
y los tambores redoblan tanto
que a todo el cerro el temblor conmueve.
El Nazareno llega cansado,
desde la cima, silencio manda,
todo se queda mudo y callado.
Su mano santa el Señor levanta,
bendice al pueblo, cuando ha acabado
un gran estruendo el silencio espanta.
Marcos Andrés Minguell
Madre Tierra
Firmes los pies en el suelo
conectan la raíz profunda
de la tierra gemebunda
que vibra en su desconsuelo.
Es la madre, con recelo
teme que el hombre se hunda
en guerra cruel y profunda
horrorizando hasta el cielo
La humanidad en gran duelo
puede verse sumergida
¡Que poca cosa la vida,
pienso, sin hallar consuelo!
Madre tierra, tu desvelo
es causado por razones
reales,los corazones
llenos de odio convocan
a los diablos,provocan
muertes, hambres, destrucciones.
Desvastada y asolada
quedarás ¡Oh, madre tierra!
¡No solo al hombre la guerra
hiere y mata con su espada!
Sea perdida o ganada
destrucción y llanto encierra,
es cataclismo que aterra
hasta al alma más templada.
Frenética marejada,
ciega, que todo destruye,
aterrorizada huye
la populación cansada.
Bombardeada, minada,
consumida por el fuego.
¡Toda tu vida está en juego!
Basta apretar el botón
de la atómica explosión
y diremos ¡Hasta luego!
Marcos Andrés Minguell
No a la guerra
Legados del pasado, abrumadores
pesan hoy mas que nunca en mi conciencia,
veo el mundo oponiendo resistencia
a caer en pretéritos errores.
Mas conservo en el alma los ardores
de cruzadas y luchas contra el moro,
en mi duda no sé sumarme al coro
de la paz, y sus gritos tronadores.
No deseo las guerras en el mundo,
contra ellas mi lucha es con poesías
como muestra de mi sentir profundo.
Mi desprecio y condena a la codicias,
decidido presento un NO rotundo
a la guerra y todas sus sevicias.
Maramín
Poesía, musa mía
Bienvenida Poesía, musa ardiente,
necesito impulsar mi fantasía
por caminos de ritmo y armonía
que no tengan abrupta su pendiente.
Sea tu luz candela incandescente
que ilumine el camino y sea guía
de mis versos llenando de poesía
mis poemas con brillo permanente.
Sé mi amante, mi amiga inspiradora,
entreteje mis rimas, dame el arte
de saber conmover con voz sonora.
Y si estás en la sombra como parte
de los sueños, oculta espectadora,
he de saber, señora, convocarte.
Marcos Andrés Minguell
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