A distancia
Deja que nazca en ese sol de tu paisaje
arando el mar entre la olas de tu piel.
Y adolescencias de la fuente de tu risa
bajo la sombra de un palmar podrán beber.
Deja que dance de ilusión una romanza
y de la voz fluya el caudal de una emoción,
acompañándola de arpegios que las manos
vuelven armónica y más dulce una canción.
Y en la durmiente placidez de tus orillas
se despierten auroras de imaginación
que de sutiles sortilegios te devuelvan
la libertad que no halla espacio en el dolor.
Marlene Flores Ulloa
Nuevamente
De miedo y de intensidad
me devuelves de misterio
la presentida poesía
de tu piel entre mis dedos.
Y te busco en un arpegio
cuando la voz es lamento
y el suspiro me recuerda
la dulzura de tus besos.
A quién testigo de historia
confesará el sentimiento
de idealidad imposible
la calidez de un momento.
Toda pregunta es impropia
entre temores y anhelos
más si te pienso de nuevo
se hace pasión el deseo.
Marlene Flores Ulloa
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