Severo el rostro...

Severo el rostro, pálida la frente,
del Ande retemblando giganteo,
el genio baja, con luctuoso arreo,
como la noche oscura, lentamente.

Contempla un punto la apiñada gente
que en torno está del alto mausoleo,
y en el dolor del fúnebre trofeo
la faz serena y el pensar doliente.

La ingratitud, la envidia, el temeroso
furor civil y la ambición airada,
ante él en grave grupo silencioso,

póstranse mudos, la cerviz doblada:
y el Genio augusto, como blanca nube,
suelto el manto triunfal, al cielo sube.

Juan Bautista Calcaño y Paniza

No hay comentarios: