La senda

Contemplo airado mi único destino;
yo voy trazando, sin saber, mi senda;
si tengo algún igual tal vez comprenda
la nada, en campo abierto, de un camino.

Todo lo quiero en mi vivir sin tino;
y he de escoger, en íntima contienda,
esta miseria; y no hay quien me defienda
de tan estrecho y despreciable sino.

¿De qué me sirve este vivir menguado?
Las olas al nacer, ya van muriendo;
para vivir la vida, la consumo.

Inútil tierra, de mi senda, al lado;
deseo inextinguible, no comprendo
que aun mi nada se disuelva en humo.

Julio Munizaga Ossandón



No hay comentarios: