"A los Kahmpas los ví por primera vez en Kathmandú, todo el mundo conocía su existencia. Sus campamentos estaban en el Mustang. Nadie sabía muy bien cuántos eran ni cómo funcionaban , ni siquiera la CIA que en parte los financiaba. En Katmandú, empresarios como Boris Lissanevitch y jesuitas como el padre Morand les ayudaron en algún momento con medicinas. la Cruz Roja nunca reconoció su lucha por la independencia del Tíbet como una guerra. Su territorio, la provincia de Kham, era también una zona muy desconocida donde antiguamente tuvieron lugar muchos conflictos tribales. En mi viaje a Mustang comencé a tratar con ellos a través de mi compañero tibetano."

Michel Peissel


"¿Existen aún horizontes inexplorados?¿Es posible encontrar hoy en día culturas ancestrales intactas? Mis ojos y mis pensamientos iban mucho más allá de las maravillosas cumbres. Buscaban algo, quizás un sueño que tuvieron antes que yo miles de hombres. Soñaba en un horizonte perdido y presentía que allí, en algún punto, existía la última tierra intacta, ilesa y sin edad, un mundo inexplorado." 

Michel Peissel


"He vivido en primera persona la invasión china del Tíbet. Hoy en día parece ser todo el mundo occidental reconoce el derecho del Tíbet de ser un pueblo soberano pero nadie hace nada por solucionarlo. El propio Dalai Lama es responsable de esta situación, no es un personaje fuerte, podría haber promovido una resistencia pasiva como hizo Gandhi. No veo que esté haciendo una gran labor por la causa del Tíbet. Su dinastía llegó al poder de la mano de los Mongoles en el siglo XVI, destronando al entonces rey legítimo del Tíbet , luego atacaron al rey de Ladakh y de Sikkim provocando su separación.
Se podría promover una presión internacional sobre China como la que se ejerció sobre Sudáfrica, imponer un boicot sobre las mercancías chinas, vetar la presencia de sus equipos en competiciones deportivas internacionales u otras medidas. Occidente ha traicionado a Tíbet como lo ha hecho con Sinkiang y Mongolia. Esto supone una gran derrota moral del mundo moderno, hemos permitido la destrucción de pequeños pueblos por una gran potencia."

Michel Peissel


"Mi pasión me llevó a ocho años de pelea por conseguir el permiso de entrada (a Tíbet). En 1959 tuve que cambiar de destino y decidí hacer una expedición al Valle del Khumbu, el lugar donde viven los sherpas en Nepal. Apenas existían mapas del país, sólo el del Instituto Geográfico Indio, que era muy impreciso. Nadie había estudiado si los sherpas eran realmente una raza, un pueblo. Muchos vivían exiliados en Darjeeling y entre ellos estaba Tenzing Norgay, que coronó el Everest con Hillary. Yo le conocí en Darjeeling. Al volver con él a Katmandú fue cuando le acusaron de romper la bandera de Nepal; por ello solicitaron que rechazara su nacionalidad nepalí, ya que él tenía doble nacionalidad. Tuvo que refugiarse en la embajada cuando empezó “la guerra de los sherpas”. A mí me acusaron de haberle ayudado y ser responsable de su traslado a Nepal. Por esa razón me pusieron muchas dificultades para concederme el permiso para la expedición. En 1962 me disponía de nuevo a viajar (a Tibet) cuando, justo antes de cruzar la frontera, mataron al primer ministro, lo que me impidió ser uno de los primeros occidentales en conocerlo. No pude visitarlo hasta mucho más tarde, en 1968."

Michel Peissel


"Trenzan las colas de sus ponis y decoran sus casas diciéndose: '¿Quién quiere un poni o una casa con aspecto triste?"

Michel Peissel


 "Viven en medio de la asombrosa belleza de estas tierras altas del Tíbet, iluminadas por la dorada claridad de su elevada altura."

Michel Peissel













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