Activación del recuerdo

Cuando era niño pensaba
Que el Perú era 28 reglas cuadradas
Con forma de Perú.
Y creía que el mundo
Terminaba más allá
De aquello que podía mirar.
La música de Pulso
Me daba miedo.
Me dormía
Con el sonido
De tambores a lo lejos
Y ese dragón de humo
Y esa canción para muertos
A veces
Cuando iba al colegio
-Año 86, 87-

Encontraba por la mañana los charcos de la sangre de algún caminante que por la noche salió durante el toque.

Y frente a mí
O casi al frente
El Banco de Crédito explotó
28 veces como 28 helicópteros
28 ajusticiamientos 28 acribillados
28 niños sin brazos 28 madres sin hijos
28 mil cadáveres sin nombre
28 millones de hombres tan deformes
Por la rabia el celo la luz sin luz
Como 28 mil millones de razones
Que no bastan para cubrir tu rostro
Tu mano tu abrazo ni este papel periódico ni esta sábana sucia
Y al lado mío
O casi al lado
La Superintendencia explotó.
Con 28 kilogramos de anfo
Y dentro del edificio
Donde vivíamos
Una bomba puesta en un cilindro
De metal
Envuelto en papel craft
Casi
Explotó.

Un 28
De 28 velas por 28
Hoy
Por 28
Los jóvenes, los más jóvenes,
Bailan
Por 28
También los menos jóvenes.
Quizás
Por 28

Nos enseñamos,
En los cuerpos,
Nuestra defensa al pánico.
Por 28
Ella conversa con Mariana
Micaela y María
Mientras el olor
De mirra y palo santo
Cubre el aire.
Por 28

Y sobre un ecran gigante se proyectan
Las danzas del Perú y a tres mujeres,
Hablando entre ellas
De la lluvia
Y del cerro,
De la luna y los corderos.
28 es un milagro
Una calidez sin nombre
28 es una avenida
Cubierta de osos y de arañas
28 es un torrente
Un día sin furia celebrando
En una casa sin ventanas
28 también es un mensaje
Una sola imagen en tus ojos
Un ladrido que te vuelve
De piedra y de arena
28 no tiene palabras
28 no tiene sonidos
28 no tiene colores
Solo amores
Innombrables
Solo camas, tazas, ratas.

Cuando llegó a Lima
San Martín
Ese 28
Cuatro veces se proclama
En la plaza y en otros tres lugares.
Como antes con el Rey de España.
Cuatro veces proclamado
Hacia las cuatro direcciones
Tenía sentido todo
Aunque tal vez
Nada también tenía sentido
Como esta combi veloz
Este bus llevándome a la muerte
Esta miríada de cuentas
Y el colegio y los recibos
Y el orín y la cresta
De tanto monstruo
Devorando un 28

Mientras San Martín, Túpac Amaru,
Zela y Bolognesi
Melgar y Pachacuti
Gálvez y Patricia
Claudia y Constanza
Gabriela y Antonieta
Carmen y Camila
En amplios salones del Olimpo
Se conversan
-Cada uno de sus glorias pasadas-
El Cristo Morado
Siempre en ese muro embadurnado
Durante el día sale
Pasea por los mercados
De los pocos que ahora quedan
Mirando los hoteles
Y las nuevas carreteras
Viendo a los niños
Pidiendo plata en la calle
Con los ojos en los parques como quien mira la tv.

28 carteles dicen
Que hay pan por 28
28 carteles dicen
Que ya no hay furia
Por 28.

Por 28
28 carteles anuncian
28 fantasías
28 viajes lujosos 28 cirugías
Al rostro
28 ironías
28 meses de préstamo
28 por ciento de deuda
28 becas de mierda
28 calaveras 28 nuevas formas de sexo
28 palabras por decir 28 palabras
Por callar
28 sueldos añadidos
28 presupuestos 28 bombas nucleares
28 campos de concentración
28 portaviones 28 invasiones
28 lanzamientos de misiles
28 amantes suicidas
28 niños ahogados
Para 28 bolsillos
De 28 mendigos.

Entonces Él asciende.
Clama por sus hijos.
Vuelven con Él
Los otros héroes.
Los que saben convertir la muerte en vida.
Los que viven
Sabiendo no ocultar la muerte.

Vuelven.

Y no hay ciudad amurallada
Ni cañón ni bomba
Esmaltada.
Ni tv ni corporation
Ni crédito ni bolsa
Que confundan
Su retorno
Llegan.

Se sientan con calma en la acera,
Junto a una vela.

Frente al imponente
Tanque,
Palacio,
Buque
O edificio.

Sobre el mar se sientan.

El Padre Madre nos mira.

Medicina al Alma brinda.

Y reímos y decimos:
Aquí resistiremos.

Somos más que el tiempo.
Somos más que Amo y Dueño.

Y Seamos, desde hoy,
Libres e independientes.
Por la voluntad amante
De cada alma andante.

Por la voluntad sin general ni comandantes
Por ese tiempo aquel
-Ya va quedando atrás-
¿O es adelante?

Hoy se renueva
Seamos libres por siempre
En el corazón ardiente del presente.

Entramos
A la Plaza San Martín, hace tres horas
Las doce han pasado.
Y creo
Distinguir a lo lejos unas luces
De fuegos en los cielos.
Me dice Ella:
Aquí están
Ya van llegando.
Yo tiemblo, lloro
Secretamente de alegría.
Como cuando era niño
Y me decía lo mismo:
Aquí están, ya van llegando.
Y toda la sala se volvía
Azul y transparente,
Como el primer suspiro.
Ya van llegando
Entonces,
El Cristo enamorado
De tanto corazón encendido
Vuelve del cielo a la tierra
De la tierra al cielo.
Y con un fuego de sus dedos
Al hombre muerto levanta,
A la mujer muerta,
Al niño muerto.
Y la gente de las tumbas,
Que aún no conocemos,
Regresaron.
Y María Elena,
De viva voz,
Con todo su cuerpo junto,
Regresó.
Y la gente del Frontón y de Accomarca
De Putis y Cayara, Barrios Altos
Y Cantuta,
Que tanto habían dormido,
-No en olvido.-
Regresó.
Y el mundo entero transformó:
Fuego y agua, tierra y ojos.
Y los soldados perdidos retornaron
A sus madres y a sus hijos.

Y cada pedazo de hierro
En flor se convirtió.
Y el anciano bajo tierra
Llenó de hierba la arena.
Y el hambriento,
El que mató y el que fue matado
Retornaron.

Y todos, con el corazón
Enamorado,
Se abrazaron,
Como el Cristo morado lo había ya anunciado.
Y el Perú entero, el orbe entero
Transmutado retornó.
Y la regla cuadrada se hizo esfera
Y el cetro de humo, bella compañera.

Florentino Díaz



”Si quieres recordarte, siéntate:
respira,
Junta las manos
derecha sobre izquierda.
Crea un puente en los pulgares.
Presta atención a tu vientre, percíbelo.
Allí el caldero donde emerge el tú.
la luna, el sol y los demás destellos.”

Florentino Díaz












No hay comentarios: