Asisto a mi funeral
Todos me quieren en este momento
en que estoy dentro de mi féretro
y yo amo al mundo porque hoy es mi partida
Me he sentido dichoso, pues nunca me halagaron
como hoy día cuando cargan mi ataúd.
Mi alma dentro de unos instantes volará
me reuniré con mi Creador.
Hice lo que pude con amor
recibí de mi madre el color gualda de mis ojos
mis hermanos me regalaron sus lágrimas
y papá su sonrisa.
De mamá quiero decir además que es el ser
más hermoso que pisa la Tierra.
Fui un mirlo y hoy me tocó callar
He sonreído, pero también he llorado.
Juan Francisco Carrillo Ipanaqué
Irrepetible amor
Gladys
te canto hoy, mi amor
mañana podría llegar la ruina
Te amo, como ningún ser humano pudo haber amado jamás
Grité tu amor en silencio
y fue un estruendo que sonó en todos los oídos del mundo
Eres el ser más maravilloso
lo pensé desde el primer día que te vi
y no me equivoqué
Te canto porque mañana podría olvidarme de todo,
pero debes saber
que experimenté una felicidad sin límites
contigo.
Eres la mujer de mis sueños,
Dios te bendiga siempre
Recuerda: nunca estarás sola
pase lo que pase.
Nunca dejaré de pensar
que eres un regalo
que Dios me dio.
Un día no podré caminar
no podré mirar
no podré oír,
pero…
siempre oiré tu dulce voz
siempre miraré tu rostro,
siempre pronunciaré tu nombre.
En mi locura serás
el motivo para vivir
el motivo para dar un paso más.
Juan Francisco Carrillo Ipanaqué
Maestro
Tú que pintas con cariño
la alegría del hombre
y que tratas de reflejar en él
tu conocimiento
yo te pregunto
¿a ti te forjaron, o tú
forjaste el mundo?
Qué bella es la luz que irradias
por mi cuerpo;
Te llaman apóstol,
yo te llamo santo
y secretamente te corono
como a Dante.
Mi querido Maestro
Tú que todo lo inundas con la luz
¿Por qué te habrán clavado en la cruz...
del Magisterio?
Juan Francisco Carrillo Ipanaqué
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