Con esta luz

La luz diurna, ausente de tan fría
libre de toda provocación
experta en dibujar máquinas
y espacios vacíos
no sabe de mí, como no sabe
de mi sombra,
ella cree ser la causa
pero mi sombra me sale de adentro
y esta luz no llega siquiera a tocarla
es una cuestión de tiempo
que ella deje de flamear a mis pies
que yo deje de bailar a su vera
es una cuestión de tiempo
que esta luz se apague y venga otra
con la temperatura necesaria
para dibujar cuerpos como el mío
que disminuyan la soledad.

Carlos Ardohain


El no había cambiado...

El no había cambiado tanto todavía
el bolsillo iba donde estaba el refrán
la palabra iba donde estaba el silencio
él necesitaba lo esencial para vivir
una hoguera para derretir su coraza de nieve
una llama de hielo para congelar su dolor
él quería conservar en la memoria
la lengua que le lavó todas las heridas
los dientes que las volvieron a abrir
él sabía que las cosas nunca son
tan blancas como dicen tan negras como se ven
que lo semejante es a la vez lo más extraño
que antes de comenzar ya todo ha terminado

Carlos Ardohain







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