"Cuando salí de ese cañón, dejé algo atrás, pero no perdí nada (...) no fue una experiencia terrible, sino más bien la experiencia más bella de toda mi vida."

Aron Ralston


"¿Dónde ha ido a parar la confianza que me invadió durante la visión del niñito rubio que tuve, mi futuro hijo? Psicológicamente, anoche, cuando grabé mi epitafio, pensaba haber tocado fondo, pero sostener a ese niño entre mis brazos me tranquilizó."

Aron Ralston
127 horas
Tomada del libro Los Guardianes de Javier Pérez Campos


"Esa roca me dio el regalo de ver realmente qué era lo importante en mi vida. Está la tentación de querer que las rocas no estén ahí. Mi perspectiva es que abran los brazos para apropiarse de las rocas en su vida, porque estas rocas nos dan regalos, el regalo de la adversidad, el valor de los desafíos. Las rocas nos muestran lo que es importante para nosotros, lo que es posible para nosotros e incluso lo que es extraordinario dentro de nosotros. Piensen si estuvieran ahí, a quién le hablarían y que le dirían, así entenderán que en un momento así de crucial (…) se alza lo más importante en la vida."

Aron Ralston



"No fue realmente una decisión, sino una epifanía de que finalmente haría lo que fuera para poder volver con mi madre, para ver algún día a ese niño (del cual tuve una visión mientras estaba ahí) y que es mi hijo hoy. Yo me habría cortado la otra mano para poder volver a mis hijos. La motivación vino de las relaciones en mi vida, eso fue lo que llegué a entender que era lo más importante. Hubiera hecho cualquier cosa por eso. Así que no fue tanto una decisión finalmente, fue averiguar cómo resolver el problema. No fue que yo quisiera cortar mi brazo o no, sino cómo lo podía hacer. Eso fue realmente lo que me tomó tanto tiempo."

Aron Ralston


"Pasar por esas transformaciones en la mente, esa es la experiencia que disfruto. La aventura cambia mi perspectiva (…) Estar ahí con mis amigos también, tener esa experiencia con otra persona es un vínculo que dura por toda la vida."

Aron Ralston



“Pero esa roca fue una de las mejores cosas que me han pasado. Cuando me corté el brazo sentí que regresaba a la vida. Me mostró todas las posibilidades que tenía el mundo para mí. A partir de ahí me di cuenta de que absolutamente todos tenemos nuestras piedras. Algunas pequeñas, otras más grandes. Pero ¿qué debemos hacer? ¿Esquivarlas? No. Tenemos que recibirlas con los brazos abiertos.”

Aron Ralston


“Si no enfrentamos la adversidad, no vamos a aprender jamás qué es lo verdaderamente importante para nosotros. No nos vamos a dar cuenta de qué somos capaces. Por ejemplo, Colombia tiene una gran piedra que ha tenido que cargar por décadas: se llama conflicto armado. Es una piedra difícil de llevar, pero debe aprender a superarla.”

Aron Ralston



"Tal vez a través de un voluntariado, de ayudar a proteger el medioambiente, hacer algo para ayudar a los menos afortunados, los sectores marginados de la sociedad. Tiene que ver con ese tipo de responsabilidades que hacen el mundo un lugar mejor y es por eso que estamos aquí."

Aron Ralston



"Todos pasamos por experiencias en la vida que se sienten como rocas. Ante estas rocas, en estas experiencias que vivimos, tomamos decisiones cuando vienen los problemas. Ser una víctima o el ganador, elegimos si tomarlo como una tragedia o como un triunfo."

Aron Ralston


"Todos ustedes saben que soy la persona que se cortó su brazo, la película y todo eso, pero lo que probablemente no saben de mí es que soy el hombre que sonreía cuando se cortó el brazo. Esa es la perspectiva que les vengo a mostrar."

Aron Ralston


"Un niño rubio de tres años vestido con un polo rojo se me acerca corriendo por un suelo de madera iluminado por el sol que, sin saber por qué, sé que pertenece a mi hogar futuro. La misma intuición me revela que se trata de mi hijo. Me agacho para cogerlo con mi brazo izquierdo y utilizo el derecho, manco, para mantenerlo en equilibrio, y ambos reímos mientras trepa por mi espalda y se sube a caballito […]. Vuelvo a estar en la angostura, pero los ecos de las risas del niño resuenan en mi cabeza y, de algún modo, inconscientemente me convencen de que sobreviviré a esta aventura. Me había resignado a aceptar que moriría aquí antes de que llegara la ayuda, pero ahora estoy convencido de que viviré. Y esa convicción lo cambia todo."

Aron Lee Ralston








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