"Madame de Rochereul. En ese caso seré razonable y fuerte. Sólo te pido un cuarto de hora. Jugaré mis cartas, Axel. Un cuarto de hora en nombre del pasado.
Fersen. Lo haré.
Madame de Rochereul. Gracias. (se reprende a sí misma) ¿Es esto cierto, al menos? ¿No me engañas por lo que simbolizas para mí?
Fersen. ¡Créeme porque te lo digo!
Madame de Rochereul. Quizás sea eso precisamente. No logro perdonarme, pero siento la antigua lealtad.
Fersen. ¡Ni una palabra más! Tan pronto como el valor me amenaza no hallo nada en mí.
Madame de Rochereul. ¿Acaso retirarás tu promesa?
Fersen. No, pero me arrepiento de haber empeñado mi palabra."

Henri Lavedan
Varennes



"Me reía de la fe y me juzgaba sabio a mí mismo. Me engañaba y también os engañaba a vosotros que habéis leído mis libros y habéis cantado mis poesías. Era embriaguez... engaño... sueño. Abandonar a Dios es perderse. No sé si aún viviré mañana; pero quiero decir a mis amigos: Lavedán no se atreve a morir ateo: "Creo en Dios, creo, creo"."

Henri Léon Emile Lavedan
Al salir a la batalla de la Primera guerra mundial



No hay comentarios: