"¿Cómo pueden las personas confiar en la cosecha, a menos que vean la siembra?"

Mary Renault


"De vez en cuando, los llantos se interrumpían para que un nuevo visitante recitara sus versos. Los vecinos se marcharon pronto —los extraños a la farándula no saben qué decir de un actor—, pero sus colegas artistas se quedaron, pues mi padre fue siempre un hombre apreciado. Y no dejé de oírles repetir lo buen compañero que era en el trabajo y lo dispuesto que estaba siempre para ayudar a un amigo. (Mi madre, pensé, hubiera preferido la noticia de que había guardado algunos ahorros). Jamás se agotaba, decían; era capaz de ejecutar cualquier papel. Y me contaron algunas anécdotas que me causaron asombro, pues aún no tenía idea de que en una gira puede suceder cualquier cosa. Qué gran talento tenía el pobre Artemidoro, decían. Y qué lástima que no le hubieran tenido en cuenta en las Leneas; nadie recuerda una Polixena interpretada con más sentimiento, pero ese año quiso la suerte que hubiera malos jueces. Dejé las tijeras y corrí adentro, con el cabello trasquilado como el de un felón y los mechones guardados en la toalla. Como si alguien fuera a reprobar mis lágrimas, me escondí como un perro herido, sollozando y sofocando mi llanto tumbado en el lecho. Pero no era de los asistentes al duelo de quienes me ocultaba, sino de mi padre, tendido en el féretro y silencioso como un extra, con su rostro muerto por máscara, esperando para hacer el mutis. No estoy seguro de cuándo descubrí que yo tenía más talento que él. Un par de años antes…, no, tres; había cumplido los dieciséis cuando le vi como el joven Aquiles en El sacrificio de Áulide y dudo que ya entonces fuera una novedad para mí. Siempre se movió bien y sus manos podían expresarlo todo. Nunca oí más encanto en su voz."

Mary Renault
La máscara de Apolo


"He aquí una gran virtud que te permitirá avasallarlo todo: eres uno y no cincuenta."

Mary Renault


"Mandó a un servidor de confianza, que había sufrido ya la peste, el cual encontró a los dos jóvenes muertos. Por la forma en que yacían, parece que en el momento de la muerte de Filón, Alexias se había sentido enfermo, y, sabiendo el fin que le esperaba, tomó cicuta, para hacer el viaje juntos. La copa estaba en el suelo, a su lado; había derramado el sedimento, escribiendo FILÓN con el dedo, como se hace después de la cena, con el último vino."

Mary Renault, cuyo nombre de nacimiento era Eileen Mary Challans
El último vino



"No es de extrañar que los griegos tengan dioses envidiosos, estando ellos llenos de envidia."



Mary Renault


"No es la sangría lo que disminuye el poder.Es el consentimiento."

Mary Renault


"No se puede obtener nada si no se da algo a cambio."



Mary Renault


"Si uno no conoce a Homero está condenado a escribir como él."

Mary Renault


"Siempre hay hombres que se comparan con la grandeza y la odian, no por lo que ésta es, sino por lo que son ellos. Y hasta pueden llegar a envidiar a los muertos."

Mary Renault
















No hay comentarios: