Aires venían
Unos aires venían
del Sur
ingresaban en el pleno
esplendor del placer
que nos regalaba
aquel patio mío
tan de infancia
y que vos conocías
por mis relatos
y hacías tuyo
como si hubieras
corrido descalza
en un día de lluvia
con los sapos
que saltaban felices
casi como nosotros dos.
Jorge Isaías
La mano
La mano
que no puede
recoger el sol
se conforma
con apretar
algunos granos de trigo.
Mi madre
volcaba
en un vaso
con agua
algunos granos de trigo
haciendo tres veces
la señal de la cruz
y murmurando
una oración
incomprensible,
con ella me curaba
los calambres.
Ahora mi madre
ha muerto y se llevó el secreto
de sus curaciones
Y yo no tengo a quién
recurrir cuando siento
calambres en el alma.
Jorge Isaías
"Mi infancia en un pequeño pueblo del sur de la provincia de Santa Fe fue fundamental en mi poesía."
Jorge Isaías
Mi paisaje
Bordeo la letra
en una costa
ato el tembladeral
de ala viva
un puñado de juncos
la vía dormida
del tren
junto a los yuyos.
Alto urdo el bañado
donde se espantan
blancas garzas de nieve
una cigüeña sola
un zambullidor
y cuatro siriríes sueltos.
Jorge Isaías
Poema
Entre la lujuria
leve
de la noche
que con su estrella canta
albricias
rumores
mares
el alquitrán del cielo
la nostalgia.
Jorge Isaías
Un agapanto
Entonces vos dijiste
opaco o sol o río
o ramaje
entre el fervor
de aquella tarde
con dos picaflores
posándose
en esa claridad
en el agapanto
escondido
en los pliegues
del verano
es decir en un enero
inolvidable
con los horneritos
picoteando el pasto
recién cortado
Jorge Isaías
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