"En 1996 Goff trabajaba para una revista de Ufología conocida como “Global”, y era corresponsal del sur de Gales. El se desempeñaba con un asiduo investigador, inclusive pasando noches enteras al aire libre en regiones distantes en su búsqueda por recolectar evidencia de la actividad ufológica. En Enero del año 1997 Goff recibió una llamada para compartir información acerca de avistamientos de ovnis en el sur de Gales y en otros países. Goff se reunió en tres ocasiones con el testigo, quien resultó ser un militar que trabajó en los regimientos de fuerzas especiales; en un grupo especial de 11 en el cual se les dijo que las operaciones eran peligrosas y diferentes. El militar le explicó a Goff que la función del equipo era proveer de una respuesta rápida que no podía extenderse a más de 24 horas y que serían movilizados por helicópteros militares hacia los lugares en donde la actividad de platillos voladores era más activa. Parte de su trabajo era llegar al lugar en donde se habían visto los UFOs y recoger cualquier evidencia del lugar, y evitar ningún alboroto en el lugar. Los indicios a recoger podrían ser: cuerpos humanos, vehículos o en algunos casos alguna nave extraterrestre. Durante los 80s cuando su equipo especial estuvo activo, él llegó a presenciar entre 30 y 40 seres humanos mutilados en países incluidos Inglaterra, Irlanda, Escocia, España, Alemania, Alaska, Australia, Yugoslavia y Rusia. La operación estaba coordinada con los Estados Unidos. El gobierno ruso estaba al tanto pero dijo estar de acuerdo en que las operaciones de “limpieza” fueran llevadas a cabo por los norteamericanos y británicos. Los cuerpos hallados tenían todos los mismos fenómenos que los cuerpos del ganado mutilado. Cortes perfectos de órganos, ninguna gota de sangre derramada, cuerpos humanos con ausencia de piel en la quijada. En ocasiones una o dos orejas removidas. Los ojos extraídos. El militar le explicó a Goff que una vez los cuerpos e indicios eran llevados a una zona secreta llegaba un segundo equipo de norteamericanos quienes eran principalmente científicos y se encargaban del resto. La información de estos cuerpos no sería entregada a los civiles. Los individuos mutilados se pondrían en listas de “personas desaparecidas” indefinidamente."

Derek Goff
Tomada del libro Ufología volumen I de Esteban Peretz










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