Árbol de frutas
Hueles como los anacardos de mi infancia
y tienes el color de la arcilla roja mojada
de antaño;
hay sabor a mango corriendo por tu boca
y una dureza de maboque rebotando en tus pechos.
Te mezclo con la tierra roja
y con las noches
de antiguas historias
escuchadas mucho tiempo atrás.
En tu cuerpo
, antiguos sonidos del tamborileo en mi puerta,
con que me provocas,
llenan mi cerebro de fuego incontenible.
¡Nena, eres el sueño hecho carne
de mi viejo barrio en el musseque!
António Mendes Cardoso
Epígrafe
Pasa,
No te detenga el miedo
O la conmoción,
Y evita ese aire tuyo de desgracia:
Aquí en el suelo
En lo más profundo,
No hay secreto...
Pero si pones bien tu oído sobre la tierra,
Oíras latir un corazón
Al ritmo pulsante del mundo...
António Mendes Cardoso
Exilio
Vivo en mi tierra
Pero estoy exiliado.
Quien vive en ella no soy yo
sino otro que vive en mí.
Mi tierra está por venir
Y mi otro ser vive, vive...
...vive esperando este futuro
António Cardoso
Mago
Ilumina una estrella
Con el encendedor
-Camarada rutinaria
De sueño desprendido y barato
En mi celda-
Y por un segundo,
Yo soy el mago, el insulto,
Aciago y pacato,
Que en este día amargo
Agito en mi mano cerrada
La más bella y amada
Estrella del mundo.
António Cardoso
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