Carole McKelvey

"Despreocupado por los demás, ve fríamente los miedos y deseos de los demás, y los manipula a su gusto. Después de todo, aquel hombre podría no acabar llevando una vida de apuros y huidas de la ley, ni terminar en prisión. En lugar de asesinar a otros, es posible que se convierta en un invasor de corporaciones y que asesine compañías, despidiendo a personas en lugar de matarlas, y destrozando sus funciones en lugar de sus cuerpos.
[L]as consecuencias que sufre el ciudadano promedio a raíz de crímenes de negocios son asombrosas. Tal y como lo afirma la criminóloga Georgette Bennett, ‘componen casi el 30% de los casos que llenan las cortes de distrito de los Estados Unidos, más que cualquier otra categoría de crímenes. En conjunto, el robo, el atraco y otras pérdidas de pertenencias inducidas por los vándalos callejeros del país, suman aproximadamente cuatro mil millones de dólares al año. Sin embargo, los ciudadanos aparentemente íntegros del sector ejecutivo y los humildes jefes de nuestras tiendas minoristas nos estafan entre cuarenta y doscientos mil millones de dólares anuales’.
Lo preocupante es que es tan factible que el disfraz para la nueva cordura enmascarada de un psicópata sea un traje de tres piezas como una máscara de esquí o un arma. Como explica Harrington, ‘también tenemos al psicópata en círculos respetables, donde ya no es visto como un pobre diablo’. Este mismo autor cita a William Krasner: ‘Ellos —los psicópatas y los semi-psicópatas— se desempeñan muy bien en los trabajos de venta menos escrupulosos, porque obtienen placer en engañar y en salirse con la suya, y sienten muy poco cargo de conciencia a la hora de defraudar a sus clientes.’ Nuestra sociedad se está volviendo rápidamente más y más materialista, y el éxito a cualquier precio es el credo de muchos hombres de negocios. El típico psicópata prospera en este tipo de ambiente y se le considera un ‘héroe’ en los negocios."

Ken Magid y Carole McKelvey
“The Psychopath’s Favourite Playground: Business Relationships”
(“El terreno favorito del psicópata: las relaciones de negocios”)
Tomada del libro La ponerología política de Andrzej Łobaczewski, página 38

No hay comentarios: