Kirikiño

"Un hombre más callado y solitario que Txomin de Otalar no lo ha habido en ningún sitio. Si alguna vez tenía que estar con otros compañeros, solía hacerlo muy callado, escuchando lo que decían aquellos; nadie podía saber hacia qué opinión se inclinaba, porque no movía ni un solo músculo de su cara; si no hubiera sido porque, de vez en cuando, movía los ojos de un lado a otro, cualquiera le habría tomado por una imagen de piedra, madera o cera. Pocas veces, muy pocas veces, empezaba él a hablar; la inmensa mayoría de las ocasiones había que dirigirse a él e, incluso entonces, terminaba su respuesta con tres o cuatro palabras cortas; aún queriendo, aún haciendo lo imposible, nadie podía mantener con él una conversación larga; ¡qué hombre más seco! Nada le alteraba. Cuando bajaba de su monte, en contadas ocasiones, pasaba junto a las cosas que suelen llamar la atención de un aldeano sin molestarse en mirarlas, como si estuviera acostumbrado a verlas todos los días. Cuando por primera vez pasó a su lado un automóvil, tocando la bocina y arrojando polvo y mal olor, no le hizo más caso que si pasara un perro. Parecía un hombre sin nervio."

Evaristo Bustinza Lasuen conocido por el pseudónimo Kirikiño
Nieve en Julio

No hay comentarios: