Azahara Palomeque

Cancelaciones

trabaja,
y en la decrepitud de estos seres
encuentra su sentido.
todas las mañanas fiel suda y se lame las manos
que claudicarán en otro.
le pagan por no, como decisión unánime
tomada por sus órganos.
se mastica los ojos: no hubo, tal vez,
una opción del todo ética; buscó errante
la cápsula que al tiempo diera a luz, detonó
cuantas enfermedades pudo.

pero trabaja,
fiel al autobús entre cohortes iguales,
se disfraza y sale a silenciar un propósito:
pequeña miaja sutura.
es una recomponiendo tanta esquirla interna;
una ajena que no la deja dormir
sino cerrar los ojos.
mareada, y sólo tiene que seguir
y morder despacio la zona asignada.
irguió los sueños que desembocan
en esta blasfemia; creyó a tientas
las lecciones de antaño.

trabaja
y, si la ves de frente, te la encuentras
en la parada o dice buenos días, jamás
adivinarás que apenas vive
de la queja balsámica, en cuya lengua enloda
la obediencia,
la inteligencia.

Azahara Palomeque Recio



"Creo que para que el neoliberalismo más atroz deje de expandirse necesitamos llegar a ese grado máximo de madurez, abrazar el civismo, y eso se consigue a través de la educación."

Azahara Palomeque Recio



"Digámoslo claro: el American Dream es una gran mentira, abominable."

Azahara Palomeque Recio




El proceso

primero, te privan de cualquier otra lumbre:
los amigos, las cicatrices no sanan
bajo el emplasto dócil. después, te dicen
aquí está tu reino, hallarás en pastillas vulnerable
el cetro que lo haga seguro: ten,
tu encomienda habita en la oficina. la decorarás a gusto,
en el horario que mejor proscriba tu tendencia a llorar
fortalecerás tus músculos para golpearte más fuerte;
nada puede si no tú
el futuro frágil de los vencidos.
dueño de rostro impertérrito, consciente de un cuerpo
habitable en resinas, calibrarás los actos, medirás el peso
de la palabra, no te presentarás
como enemigo propio. ocultarás el roce
con la hierba pero presumirás
de jardín dominado; dependiendo del caudal,
besarás al salmón o los cantos.
en ti, no más que en tu antro intestino, el reino
se quiebra o rehace, las muñecas se secan,
el aire adquiere otra festividad que niega memorias.
al fin, acabas sabiendo del suicidio.

Azahara Palomeque Recio




"En un universo tan individualizado –y volvemos al neoliberalismo– los problemas sociales se entienden como malestares personales, y se medicalizan, lo cual contribuye al enriquecimiento de las grandes compañías farmacéuticas, pero también de los complejos hospitalarios, los seguros médicos, etc., en el caso de Estados Unidos hay toda una industria interesada en que internalicemos los defectos del sistema y los asumamos como fallos propios. Por otra parte, es mucho más fácil tomarse una pastilla que investigar los causantes socio-económicos de ese malestar e intentar erradicarlos precisamente cuando se está más débil. Por supuesto que desmoviliza las luchas colectivas, es más, las anula.

Por ejemplo, el psiquiatra estadounidense Allen Frances explica cómo muchos padres insisten en que a sus hijos se les diagnostiquen enfermedades mentales para que los asignen a un grupo especial en el colegio y puedan recibir la atención que merecen: es decir, palian con psicofármacos lo que es un defecto de la educación pública: la masificación de las aulas. No sólo no se resuelve el problema, sino que se crean ciudadanos victimizados, culpabilizados, con patologías que no existirían de haber un estado del bienestar sólido. Todo esto lo explican mejor que yo Edgar Cabanas y Eva Illouz en Happycracia."

Azahara Palomeque Recio




Estertor

El augusto
desmentir de la boca, tubería abajo, donde moran
los insectos practicándole a los astros
cirugías de luz,
aquel cieno amarillo de la noche.
La ruina, tráquea arriba
y abajo en alas que no padecen.
Y tengo el regusto de los hombres muertos en el acero de las mallas ciclónicas,
y doy besos con sus órganos,
melaza negra, multitud en mitad
del ciclo respiratorio.

Azahara Palomeque Recio



Ha nevado esta noche

Ha nevado esta noche y mañana
los hombres echarán sal a las heridas,
como si no doliera
la ciudad.
He perdido mi ancla. No existe
siquiera el injerto.
Ha nevado,
está aún todo limpio, como la memoria,
pero sé que vendrán a la sangre, es más,
vendrán a la llaga,
la verán
en pequeños cristales donde nada crece.

He de vivir estas horas antes del límite,
tocar
la hendidura ajena a las máquinas.
He de escribir la inocencia: que duela el frío,
que no me queme. 

Azahara Palomeque Recio



"Hace falta mejorar los sistemas de educación pública y facilitar el acceso masivo, pero quiero ir más allá: estoy hablando de hacer pedagogía ciudadana, de continuar aprendiendo hasta que el cuerpo aguante."

Azahara Palomeque Recio



Jornada laboral (I)

me mantiene lactante
a la vieja hora de la sal, una palabra, briza
de otro mundo – tal vez
allí –, una caricia
en la axila.
me pagan por esta disciplina de órganos
a los que apuntan astillas, bruñidas, barnizadas
con sacos de ojos;
y trabajo
como aire mintiendo, trabajo y
me poso en la sangre, la incubo pergeño intestino
sogueando
el café en su mota y al bebé en su pequeño
pulgar mutilado.
me mantiene
hiriente y sepulta, racionada
con un sueño escaso que apenas reclama ya viene
la culpa. y cada milímetro
sabe comportarse como llaman ventana
al muro de cristal.

Azahara Palomeque Recio




"La poesía me ha ayudado a soportar épocas muy duras, pero no creo que se trate de un ejercicio meramente catártico o soteriológico. La poesía también amplía ese dolor fingido que de veras se siente, como diría Pessoa, al explorarlo a través de la palabra. Por otra parte, se trata de un género que permite explotar la imaginación y llevarla al límite, extenuar el lenguaje y cuestionar sus significados, y establecer una relación contigo misma de honestidad total y conexión espiritual. Yo soy atea, pero creo que la poesía se acerca mucho a la religión y me alegro de haber encontrado esa forma de trascender lo mundano a través del verso, también como lectora. Como véis, soy una atea un poco mística."

Azahara Palomeque Recio




"Leer nos hace mejores personas, eso es lo más político del mundo."

Azahara Palomeque Recio



Oferta de trabajo

se requiere
muchacha que sepa acariciar el lomo de un perro
con las manos de haberse despedido. institutriz
practicable, miembro obediente de aspecto
calibradamente humano, sin excesos;
que pueda desapercibirse sola, que taladre
la piel animal vaya ello
en contra o en su beneficio. la jornada
será redonda; sus calificaciones, altas; dueña
en el rendir habitual y capaz
de regar con lágrimas orgánicas el asfalto, ausente
de quejas, prolija en escaparates, sus rodillas
oscuramente cubiertas
deberán soportar el peso de las manos
ajenas. estropajo sus ojos
ujieres tantean lo que precisa decir y lo hará
con sonrisa. se requiere y se alquila
el poco hambre que dure su contrato.

Azahara Palomeque Recio




Orfeo

Vomito
en un hoyo de tierra,
veo la cabellera de las raíces coagulares, los vermes
aprenden
qué no ser de mí
con esa fiebre triste de la noche.
Cabeza abajo,
cuando la tierra comienza a parecer aceite y el agua
tiembla en la esquina,
se me recoge el estómago; juegan los puños
a perseguirse en la arcilla
deslizante hacia el pozo.
Mi cabeza es un epitafio a quien grita cómo huir sin hacer
daño.
Falta la luz,
en gránulos las oscuridades procrean y veo a tientas
a quien ha podido parir
y sus esquirlas.
Expulso en una areola de la tierra mi proyecto madre,
indefinido, el sendero en india
fila larvas, mi carne devuelta, el último
suspiro hecho perforación, los peces subterráneos
podridos. 

Azahara Palomeque Recio



Residencia en el cieno

Ya casi
no se siente. Llueve a pedazos, se recoge
en el reloj templado de la madrugada, tres minutos
apenas es lo que tarda la criatura herida
en subir la escalera, menos
si va rodando. Casi
no pertenece si aprendo a dominar la presencia, ser fría
tras la máquina, hacer los gestos oportunos y asentir
bajo los techos. Ya casi
no desgasta, existe en la sima pero, desde la tos, parece un pájaro
desnudo, exilio que se habitúa,
manoplas en descomposición
me descubren América.

Azahara Palomeque Recio








No hay comentarios: