Fernando Mansilla

"Echo de menos el albero de verdad, la tierra. Echo de menos el mercadillo de los domingos, echo de menos las candelas que hacía la gente los sábados por la noche."

Fernando Mansilla



"... esto se acaba muy rápido y hay que disfrutarlo. Para mí, la vida es una experiencia increíble. Sé que he venido aquí a morirme y, ¿qué voy a decir más? Lo que decíamos antes de la espiritualidad. Que somos parte de algo divino. Que entre todos conformamos algo que se nos escapa totalmente. Tengo cierto optimismo hacia lo que nos espera. No es que crea en la vida eterna ni nada de eso, pero creo que nos espera algo muy bueno."

Fernando Mansilla




Grandes Finales

¿Nos atraen las infraestructuras?
Pues haremos volar las infraestructuras, qué cojones.
¿Te atraen los finales a lo bestia?
a mí me atraen los finales a lo bestia,
los grandes finales.
Un gran meteorito acabó con los dinosaurios,
fue un gran final.
¿Qué daño hacían los dinosaurios?
Ningún daño.
Pero llegó aquel meteorito y tuvieron su gran final.
¿Pensáis que fue… injusto?
No existe ley ni justicia en el universo de los meteoritos.
Sólo buenos finales. No para los dinosaurios. Pero fue un gran final.
Los pobres dinosaurios… qué daño hacían.
Un gran final para un gran sueño
Un gran sueño merece un gran final:


El sueño de los valientes que murieron por una quimera de mierda.
El sueño de los amantes que se suicidan por un amor de mierda.
El sueño de los justos que murieron por una injusticia de mierda.
El sueño de los injustos que murieron ejecutados por una justicia de mierda.
El sueño de los deshonrados que murieron por un honor de mierda.


El sueño de quienes se acaban
en un fin sin confín,
Josefino y Serafín.
Un fin muy finolis,
un fin muy fingido,
finado y finés.
Un fin finiquito y finamente
financiado en las fincas de Finlandia.
Éste es el fin que se finge infinito
el fin Finibusterre
finústico y finisecular
que montó en funicular
y llegó hasta Finisterre.


El fin del viaje
El fin crepuscular
El fin del viaje.
No vale recular
El fin del viaje
No se puede calcular.
El fin del viaje
Imposible especular.
El fin del viaje
Es química molecular.
El fin del viaje…

Fernando Mansilla





LA CRISIS DE LOS CARPANTAS

Si los agoreros dicen que viene la crisis
bienvenida sea con todo mi cariño.
Vente con nosotros, mi alma,
que te vamos a merendar en crudo,
como los buenos Carpantas que siempre fuimos.
No tenemos manías.
Vengan esos siete años de vacas flacas
que también nos las vamos a zampar.
Siete años comiendo vacas.
Por muy flacas que estén
roeremos sus huesos
hasta el final de todas las crisis.
¡Oh, Virgen Crítica madre de Jesucrisis!,
nos zamparemos también a los agoreros
ya no quedan agujeros que apretar
nos hemos merendado el cinturón.
Tenemos hambre.
Así es la vida: se tiene hambre
deberíamos dar miedo
siete años de hombres flacos
veremos quién se come a quién.
Carpantus Dei qui tollis paranoia mundi…
tendremos piedad de vosotros. 

Fernando Mansilla



"Los años del caos no han llegado todavía y los chavales están tranquilos. Quien más, quien menos tiene su casa, su familia, sus amigos y su bola de grifa. Algunos camellos venden ya caballo por las esquinas del barrio, la heroína respira ya cercana, pero aún no ha pasado a la acera, está en fase de luna de miel y la devastación ni se huele todavía. No ha golpeado aún con saña la heroína entre los chavales del Pumarejo, con sus camisetas horteras y su agresivo acento nasal. La peña, recién acabados los mundiales del 82, todavía no está devastada.
(…)
La Plaza de la Mata era el vértice del ángulo agudo que formaba la Calle Joaquín Costa y Juan Pérez de Montalbán, detrás de La Alameda. Tierra de prostitutas, yonquis, travestidos y policías. La sucia y abandonada Plaza de la Mata, con sus incombustibles limoneros que agradecen el maltrato ofreciendo todas las primaveras el gratísimo aroma de azahar que florecía abundante en sus polvorientas ramas."

Fernando Mansilla
Canijo



Marca

Este verano
mientras
Trípoli arde
y Somalia…
se agosta
compro el Marca
me siento un hombre de mundo
de este mundo
que arde a mi alrededor.

Agosto es plácido
son las ocho de la mañana
hace más de treinta años
perforé mi oreja izquierda
con un pendiente de plata
y me declaré en rebeldía.
Luego crecí
y era el mundo quien se me rebelaba
a mí
y era la misma vida quien me provocaba
sin necesidad de perforar sus orejas.
Luego crecí
y hoy compro el Marca
libre de pactos y de compromisos.
Compro el Marca
leyendo la crónica deportiva
o leyendo a Proust
la vida es la misma
y no hay palabras
más justas que otras
ni sueños mejores.

Visto lo visto
acompaño a mi mujer
con el Marca bajo el brazo
a Phone House
quiere hacerse de Yoigo
abandona Movistar
a tomar aire la familia Movistar.
En la tienda en un folleto
descubro la existencia de los Smartphones
a las once de la mañana.
Me gusta la poesía
apareciendo a las once de la mañana
en los folletos de Phone House
Smartphones prepago
las palabras
ya lo dijo Octavio Paz
son pericos en celo.
Todo es puta poesía.
Nos hacemos de Yoigo
el mundo arde tras las fronteras
árabes
los Smartphones de los folletos
se diluyen en la nada
no hay vida tras los smartphones
me parece bien
una sonrisa
somos los de siempre
hacemos lo de siempre
compramos caro
vendemos barato
no sabemos regatear.
Visto lo visto
si la vida es negocio
lo llevamos claro
menos mal que tengo perro
y una flauta.

Fernando Mansilla



"Para mí, vivir del arte también ha sido ir a tocar al barrio de Santa Cruz y recoger dinero con la gorra. De hecho, fui de los primeros en tocar allí y tenía mucho éxito, gané mucho dinero. Luego vinieron muchos otros y ya había competencia y ya no era lo mismo."

Fernando Mansilla



"Quizá ahora no nos damos cuenta, pero dentro de unos años se verá este tiempo como un momento muy rico. Hay muchos locales pequeños en los que se hacen cosas casi todas las noches. Las salas de teatro más o menos van funcionando. En Sevilla hay movimiento. Hay una riqueza cultural importante. En cuanto a la poesía, tengo que decir que habitualmente no la leo, por eso prefiero ponerla en escena."

Fernando Mansilla



"Yo soy ante todo escritor. Empecé a escribir y como nunca tuve muchos contactos editoriales, se me ocurrió montar escenas medio teatrales, medio musicales, con lo que escribía para darlo a conocer. La música me gusta mucho, soy un melómano convencido, pero no soy músico."

Fernando Mansilla















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