Anna Starobinets

“Cuando era niña un cuento que marcó mi forma de ver el mundo era Kolobok, un mito eslavo muy parecido al del hombrecillo de jengibre de la tradición inglesa, que me aterrorizaba pese a ser muy naif. Kolobok es una especie de pastel redondo que cobra vida y se escapa de la casa de su 'babusia' [su abuela]. En su huida va teniendo encuentros con distintos animales hasta que encuentra un zorro y se lo come. Pero la razón que tanto me inquietaba no era su destino final sino su fisiología, porque trataba de averiguar qué le pasaba a sus órganos dentro de ese cuerpo de pan. Porque si Kolobok era un ser vivo, aunque fuera un panecillo sin brazos ni piernas, ¿dónde estaban entonces su estómago, sus pulmones y su culo? ¿Cómo funcionaban sus orificios? Me inquietaba especialmente su boca, porque sabía que boca tenía, ya que le cantaba a los animales para distraerles; pero, pensaba, ”si rodaba probablemente estaría tocando la tierra constantemente con su boca“ y nada se decía en el cuento acerca de si le entraba tierra al desplazarse. Y en esa inquietud radica exactamente el origen de mi literatura porque cuando crecí no dejé de hacerme las mismas preguntas.”

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“En 10 años he perdido un embarazo, un marido y un país. Claro que soy otra.”

Anna Starobinets




"En el hospital Charité me recibe el profesor Kalache, una eminencia alemana del diagnóstico por ultrasonidos, especialista en malformaciones intrauterinas. Hablamos en inglés; nos acompaña mi amiga Natasha por si es necesaria una traducción del alemán.
Lo primero que me dice el doctor Kalache cuando entramos a la consulta es:
—Lamento mucho que estén en nuestro hospital por tan triste motivo.
Pasa la sonda por mi vientre y la cara de mi hijo aparece en la pantalla grande. Se chupa el pulgar. ¿Y si la eminencia alemana ahora rechaza el diagnóstico? O no, dirá que el diagnóstico en general es correcto, pero que en su hospital saben cómo tratar estos casos…
—Lamentablemente, no puedo más que confirmar el diagnóstico que le dieron en Moscú. Esta es la enfermedad renal poliquística de tipo infantil o la multiquística bilateral. No hay líquido amniótico. En cualquier caso, el pronóstico de vida es desfavorable. Lo siento mucho de verdad. Este niño no tiene ninguna posibilidad."

Anna Starobinets
Tienes que mirar



"He visto ciertos rasgos de totalitarismos en la actual deshumanización. Los autores de distopías erraron el tiro. El totalitarismo que preconizaban no provenía del futuro, sino que viene del pasado. Esta concepción del territorio y del enemigo que existen provienen de la Edad Media, de ayer. Incluso la guerra, que yo ya creía imposible en mi país, se hace desde unos parámetros que son antiguos."

Anna Starobinets



"Las aves los ayudaban a guiarse. Tenían una percepción especial, lo que salvaba vidas. Los escritores tienen la tarea de sentir que algo va mal, que hay una perturbación, y su deber es gritar para advertir al resto de que existe algo que no funciona."

Anna Starobinets



"Pronto, mi nombre aparecerá en la lista de los enemigos del Estado ruso."

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"Podría haber elegido quedarme en Moscú, siempre y cuando me mantuviese callada, pero moralmente sentí que no tenía opción porque prefería ser una exiliada a sentirme cobarde."

Anna Starobinets



"Si nos olvidamos de la condición humana podemos desembocar en un sistema más totalitario."

Anna Starobinets




“Todo ha llegado a ser tan blanco o negro que gran parte de la sociedad rusa se identifica con los valores tradicionales de la Iglesia Ortodoxa. Y para ellos la homosexualidad es antinatural, es pecado y una loca influencia Occidental. Creen que son los propios Estados Unidos los que quieren convencer a los rusos de que se hagan homosexuales para destruir la identidad nacional. Para ellos, la homosexualidad es equivalente al satanismo.”

Anna Starobinets

















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